Canciones para exorcizar la pena del paso del tiempo

Canciones para exorcizar la pena del paso del tiempo

El cantautor reconoce que la finitud de la vida lo angustia. “Perdido por perdido”, el disco que presenta ahora, ha sido un placebo.

DE ANTES Y AHORA. Noble presenta CD, pero también repasa clásicos. LA GACETA / FOTO DE OSVALDO RIPOLL (ARCHIVO). DE ANTES Y AHORA. Noble presenta CD, pero también repasa clásicos. LA GACETA / FOTO DE OSVALDO RIPOLL (ARCHIVO).
09 Junio 2016

ACTÚA HOY
• A las 22, en el teatro Alberdi (Jujuy 92). Entradas en el teatro o en Titanio (San Martín 853).


Viene diciendo Iván Noble que no hay un hilo conductor -al menos no uno deliberado- que una las canciones de su último disco, “Perdido por perdido”, que hoy presentará en Tucumán. Sí lo hay, sin embargo, en las entrevistas que el cantautor ha estado dando acerca del álbum y en las que reconoce que el tema del paso del tiempo tiene una gran presencia entre sus últimos temas porque también la tiene en su vida cotidiana, al punto de que lo define como “lo único de lo que vale la pena hablar”.

“El ocaso me asusta”, ha declarado recientemente al diario Clarín. “Hago cuentas. Quiero ver a mi hijo a los 30 y saber en qué clase de tipo se convirtió. Mis viejos están grandes, y empiezo a tener con ellos el mismo cuidado que tuvieron conmigo en otro momento. Y después... vas a la cancha de 11 y ves que no estás para eso”. También ha dicho en una charla con La Nación: “el paso del tiempo es el prólogo a la muerte, que es el gran problema que tiene la vida, sobre todo para los que tenemos la heladera llena y no tenemos que preocuparnos por darles de comer a nuestros hijos. Hacer canciones es una forma de exorcizar (esa preocupación), aunque a veces no funciona”.

Coherente con esa postura, Noble reniega de aquel mandato rockero que pide vivir rápido y morir joven. “Es una idea que cada vez me aterra más, como me indignan los que romantizan el reviente. Cuando la gente tiene todo servido para disfrutar la vida y termina liquidada por el entorno me da pena. ¿Por qué no disfrutás lo que tenés y te dejás de romper los huevos? Lo que pasa es que el mundo del espectáculo acelera una caída que quizás era inevitable. Para terminar ahogado en tu propio vómito tiene que haber una herida de origen muy profunda”.

La vida dada vuelta

“Perdido por perdido” es el sexto álbum de estudio de Noble como solista y contiene 12 temas. “Cuando termino un disco y lo miro en perspectiva me doy cuenta que las canciones son ‘parientas’. Cuando uno escribe canciones se está sacando fotos a sí mismo, mostrando el paisaje de la vida de uno en el momento en que hizo ese álbum”, describió.

Más allá de lo que el contenido de “Perdido por perdido” represente, está claro que Noble se ha dado con él un gusto: tocar y grabar con David Lebón, en el tema “Llenemos las petacas”. Al respecto, le ha dicho a Clarín: “a los 14 tenía un póster de Maradona y Brindisi, uno de Van Halen y uno de Serú Girán. Me había comprado su disco solista ‘El tiempo es veloz’ y mi viejo me llevó a la puerta de los estudios Del Cielito, donde vivía David, para que me lo firmara. Él nunca salió, y a la hora y media me fui sin la firma. Ahora, la vida dio una vuelta. Cuando le propuse grabar, dudó. Pero a los dos días me llamó para decirme que la canción le parecía hermosísima, y me preguntó dónde y a qué hora grabábamos”.

Otra perlita destacable del disco es que entre los invitados figuran Aaron Sterling (batería) y Sean Hurley (bajo), músicos de John Mayer; y Mark Goldenberg (guitarra), músico de Hugh Laurie. “Yo hago una música que inventaron ellos”, explicó Iván, al justificar por qué los convocó.


Publicidad
Tamaño texto
Comentarios
Comentarios