Por Alicia Liliana Fernández
24 Junio 2015
Yrigoyen, Perón, Evita, el Che y Maradona encabezan la lista de los mitos argentinos. Pero ninguno alcanza la aceptación universal de Carlos Gardel. Su arma imbatible era -y es- la voz. El 24 de junio de 1935, su trágica muerte solo agigantó el mito. Desde entonces los argentinos nos creemos Gardel y soñamos con su pinta, pero el que cada día canta mejor sigue siendo él.
Su voz era extraordinaria gracias a varias condiciones, según explica Manuel Luis Martí, del Centro de Estudios Gardelianos:
1 - Impostación natural: para cantar no necesitaba colocar la voz; cantaba como hablaba, con muy poco esfuerzo (se cantaba sin micrófono y en ámbitos amplios, como teatros y salones).
2 - Oído absoluto, como María Callas, Luciano Pavarotti, Nelly Omar y Mercedes Sosa.
3 - Afinación: el cantar los sonidos tal como están escritos. Gardel tenía una afinación perfecta y no es posible encontrar una nota desafinada en su vasta discografía. Esta cualidad gardeliana fue corroborada por Arturo Toscanini, que señaló que sólo Gardel y Bing Crosby no desafinaban.
4 - Registro amplio: era barítono, subclasificado como barítono brillante, pero llegaba cómodo al registro de tenor con voz plena, sin recurrir al falsete.
5 - La tesitura es la cualidad que determina la altura propia de cada voz; la de Gardel superaba algo las dos octavas, lo que le permitía alcanzar el registro de tenor. Pero la carrera significativa de Gardel está realizada con su registro de barítono. Incluso en el dúo con José Razzano, Gardel canta la segunda voz.
6 - Potencia: tenía una potencia intermedia (unos 100 decibeles). Por las cualidades podría haber cantado hasta avanzada edad sin perder las características.
7 - Relajación: se apoyaba en una respiración perfecta que tenía también como don natural.
8 - Desoclusión: de las letras “n” y, en menor medida, de las “m”. Este ardid es utilizado con frecuencia por los cantantes líricos para neutralizar la nasalización del sonido, al trasponer la consonante nasal en “r”, lo que ha permanecido como característica de su canto.
9 - Fraseo: es seguramente la cualidad mayor de Gardel con respecto al tango. La articulación del discurso que permite individualizar todas las palabras de la canción, aun en las antiguas grabaciones acústicas.
10 - El “rubato”: se encuentra dentro del fraseo y consiste en finalizar la frase antes de la terminación del compás, lo que permite prepararse mejor para la próxima palabra. El “rubato” fue empleado sistemáticamente por Gardel y es también una característica de su canto. Es notable también cómo manejaba los silencios.
11 - Gesticulación e inflexiones: favorecieron su actividad actoral cinematográfica.
12 - Musicalidad: surge de la combinación de todos los factores.
13 - Timbre: tenía color, volumen, espesor, mordiente o brillo y vibrato. La de Gardel es una voz ligeramente oscura, lo que incrementa su presencia, favorecida por su impostación natural. Poseía gran poder de selección y buen gusto, por eso las canciones se ajustan a sus cualidades vocales.
Ochenta años después, algunos siguen discutiendo acerca de si nació en Toulouse o en Tacuarembó, o sobre las causas del accidente que lo convirtió en inmortal. Él sigue cantando con una caricia, nunca de la misma manera, llevando la frase al punto máximo de tensión y dejándola caer con gracia, atento a la emoción, con infinidad de matices.
Compadritos, canyengues y arrabaleros
En Nueva York.- “En EEUU es el gran mito del tango, por sus películas, su imagen y su sonrisa. Si bien no se baila su música, muchos piden para su baile de casamiento una coreografía con canción de Gardel, por ejemplo ‘Por una cabeza’, famosa por la película “Perfume de mujer”, con Al Pacino. El que llega a las clases en el Consulado Argentino sabe de tango y de Gardel, del atractivo del baile y de su sensualidad”. Alicia Cruzado, profesora tucumana de Tango salón en Nueva York.
El legado.- “Gardel inaugura el tango canción. Su legado está presente en los grandes cantantes, como Julio Sosa, Hugo del Carril, los primeros tiempos del Polaco Goyeneche, y entre los actuales, Jorge Falcón, Luis Cardei y Guillermo Fernández. En mi caso escucho mucho más las voces femeninas: Tita Merello, Nelly Omar, Elba Verón y Zuli Moreno, entre tantas”. Mariela Acotto, cantante.
Vivir de Gardel.- “Carlos Gardel fue único, y lo será porque a veces quieren negar su vigencia, pero nosotros, los músicos, seguimos viviendo de Gardel. Hace 80 años que murió y cuando lo interpretamos el público nos responde plenamente, por supuesto, haciéndolo con el corazón y como tiene que ser. Lo que más piden es ‘El día que me quieras’. No dejo de destacar las letras de Le Pera, muy bonitas, y la enorme producción que dieron a la música. Gardel es todo aún hoy, a pesar de quienes no quieren reconocerlo. No he conocido a alguien que lo haya superado”. Maestro Miguelito Ruiz, guitarrista.
El contenido y la forma.- “La vigencia de sus temas hace que lo sigamos interpretando. Hay compositores que están componiendo muy bien tangos, como ‘Tano’ Fiorio, que viene mucho a Tucumán. Uno nunca deja de ser intérprete en el tango; no te podés despegar de los tangos viejos porque son el alma; las letras tienen la tierra propia del género. Hoy por hoy se ha avanzado en el modo de cantar. Hay intérpretes que buscan parecerse a Nelson Díaz Filippi, una escuela muy al estilo Jorge Falcón, que a su vez venía emparentado con la forma de cantar gardeliana, pero son pocos los que siguen manteniendo esa forma de cantar. Creo que lo que hoy se revaloriza del Zorzal es el contenido de las letras y el modo de decir, porque si bien no se utiliza la impostación sí se utiliza la forma de expresar, compadrito, canyengue y arrabalero”. Patricia Castro, cantante.
Inimitable.- “Estoy convencido de que el tango es lo que es por él en lo que se refiere al canto, y a Piazzolla en lo que se refiere a la música. En el mundo el tango es 80 % de Gardel y 20% de Piazzolla; es la realidad. Gardel llega a todos los públicos, de todos los estratos. No sé si Piazzolla hubiese llegado a conquistar el mundo sin el antecedente de Gardel”. Luis “Grillo” Córdoba, cantante
Consejo de tío.- “Un tío tanguero fanático me va a escuchar por primera vez. Me dice: ‘muy lindo pero te pido que no pongas tangos de Gardel en el repertorio porque no hay nadie igual a él’. Yo no le hice caso y canto sus temas. ‘Soledad’, ‘Por una cabeza’, y temas que sin ser de él uno los identifica como de él, como ‘Siga el corso’, o varias milongas. Uno trata de cantarlo en su estilo personal porque con Gardel siempre se pierde”. Luis “Grillo” Córdoba
Otros cantores- “Hay cantantes excelentes. después de Gardel, ya de la década del 40, o de las nuevas generaciones. Teníamos a Marín, a Goyeneche... Para mí el sucesor de Gardel, por la forma en que lo decía, en su propio estilo, es ‘el Polaco’”. Maestro Miguelito Ruiz, guitarrista
Su voz era extraordinaria gracias a varias condiciones, según explica Manuel Luis Martí, del Centro de Estudios Gardelianos:
1 - Impostación natural: para cantar no necesitaba colocar la voz; cantaba como hablaba, con muy poco esfuerzo (se cantaba sin micrófono y en ámbitos amplios, como teatros y salones).
2 - Oído absoluto, como María Callas, Luciano Pavarotti, Nelly Omar y Mercedes Sosa.
3 - Afinación: el cantar los sonidos tal como están escritos. Gardel tenía una afinación perfecta y no es posible encontrar una nota desafinada en su vasta discografía. Esta cualidad gardeliana fue corroborada por Arturo Toscanini, que señaló que sólo Gardel y Bing Crosby no desafinaban.
4 - Registro amplio: era barítono, subclasificado como barítono brillante, pero llegaba cómodo al registro de tenor con voz plena, sin recurrir al falsete.
5 - La tesitura es la cualidad que determina la altura propia de cada voz; la de Gardel superaba algo las dos octavas, lo que le permitía alcanzar el registro de tenor. Pero la carrera significativa de Gardel está realizada con su registro de barítono. Incluso en el dúo con José Razzano, Gardel canta la segunda voz.
6 - Potencia: tenía una potencia intermedia (unos 100 decibeles). Por las cualidades podría haber cantado hasta avanzada edad sin perder las características.
7 - Relajación: se apoyaba en una respiración perfecta que tenía también como don natural.
8 - Desoclusión: de las letras “n” y, en menor medida, de las “m”. Este ardid es utilizado con frecuencia por los cantantes líricos para neutralizar la nasalización del sonido, al trasponer la consonante nasal en “r”, lo que ha permanecido como característica de su canto.
9 - Fraseo: es seguramente la cualidad mayor de Gardel con respecto al tango. La articulación del discurso que permite individualizar todas las palabras de la canción, aun en las antiguas grabaciones acústicas.
10 - El “rubato”: se encuentra dentro del fraseo y consiste en finalizar la frase antes de la terminación del compás, lo que permite prepararse mejor para la próxima palabra. El “rubato” fue empleado sistemáticamente por Gardel y es también una característica de su canto. Es notable también cómo manejaba los silencios.
11 - Gesticulación e inflexiones: favorecieron su actividad actoral cinematográfica.
12 - Musicalidad: surge de la combinación de todos los factores.
13 - Timbre: tenía color, volumen, espesor, mordiente o brillo y vibrato. La de Gardel es una voz ligeramente oscura, lo que incrementa su presencia, favorecida por su impostación natural. Poseía gran poder de selección y buen gusto, por eso las canciones se ajustan a sus cualidades vocales.
Ochenta años después, algunos siguen discutiendo acerca de si nació en Toulouse o en Tacuarembó, o sobre las causas del accidente que lo convirtió en inmortal. Él sigue cantando con una caricia, nunca de la misma manera, llevando la frase al punto máximo de tensión y dejándola caer con gracia, atento a la emoción, con infinidad de matices.
Compadritos, canyengues y arrabaleros
En Nueva York.- “En EEUU es el gran mito del tango, por sus películas, su imagen y su sonrisa. Si bien no se baila su música, muchos piden para su baile de casamiento una coreografía con canción de Gardel, por ejemplo ‘Por una cabeza’, famosa por la película “Perfume de mujer”, con Al Pacino. El que llega a las clases en el Consulado Argentino sabe de tango y de Gardel, del atractivo del baile y de su sensualidad”. Alicia Cruzado, profesora tucumana de Tango salón en Nueva York.
El legado.- “Gardel inaugura el tango canción. Su legado está presente en los grandes cantantes, como Julio Sosa, Hugo del Carril, los primeros tiempos del Polaco Goyeneche, y entre los actuales, Jorge Falcón, Luis Cardei y Guillermo Fernández. En mi caso escucho mucho más las voces femeninas: Tita Merello, Nelly Omar, Elba Verón y Zuli Moreno, entre tantas”. Mariela Acotto, cantante.
Vivir de Gardel.- “Carlos Gardel fue único, y lo será porque a veces quieren negar su vigencia, pero nosotros, los músicos, seguimos viviendo de Gardel. Hace 80 años que murió y cuando lo interpretamos el público nos responde plenamente, por supuesto, haciéndolo con el corazón y como tiene que ser. Lo que más piden es ‘El día que me quieras’. No dejo de destacar las letras de Le Pera, muy bonitas, y la enorme producción que dieron a la música. Gardel es todo aún hoy, a pesar de quienes no quieren reconocerlo. No he conocido a alguien que lo haya superado”. Maestro Miguelito Ruiz, guitarrista.
El contenido y la forma.- “La vigencia de sus temas hace que lo sigamos interpretando. Hay compositores que están componiendo muy bien tangos, como ‘Tano’ Fiorio, que viene mucho a Tucumán. Uno nunca deja de ser intérprete en el tango; no te podés despegar de los tangos viejos porque son el alma; las letras tienen la tierra propia del género. Hoy por hoy se ha avanzado en el modo de cantar. Hay intérpretes que buscan parecerse a Nelson Díaz Filippi, una escuela muy al estilo Jorge Falcón, que a su vez venía emparentado con la forma de cantar gardeliana, pero son pocos los que siguen manteniendo esa forma de cantar. Creo que lo que hoy se revaloriza del Zorzal es el contenido de las letras y el modo de decir, porque si bien no se utiliza la impostación sí se utiliza la forma de expresar, compadrito, canyengue y arrabalero”. Patricia Castro, cantante.
Inimitable.- “Estoy convencido de que el tango es lo que es por él en lo que se refiere al canto, y a Piazzolla en lo que se refiere a la música. En el mundo el tango es 80 % de Gardel y 20% de Piazzolla; es la realidad. Gardel llega a todos los públicos, de todos los estratos. No sé si Piazzolla hubiese llegado a conquistar el mundo sin el antecedente de Gardel”. Luis “Grillo” Córdoba, cantante
Consejo de tío.- “Un tío tanguero fanático me va a escuchar por primera vez. Me dice: ‘muy lindo pero te pido que no pongas tangos de Gardel en el repertorio porque no hay nadie igual a él’. Yo no le hice caso y canto sus temas. ‘Soledad’, ‘Por una cabeza’, y temas que sin ser de él uno los identifica como de él, como ‘Siga el corso’, o varias milongas. Uno trata de cantarlo en su estilo personal porque con Gardel siempre se pierde”. Luis “Grillo” Córdoba
Otros cantores- “Hay cantantes excelentes. después de Gardel, ya de la década del 40, o de las nuevas generaciones. Teníamos a Marín, a Goyeneche... Para mí el sucesor de Gardel, por la forma en que lo decía, en su propio estilo, es ‘el Polaco’”. Maestro Miguelito Ruiz, guitarrista
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