Cartas de lectores
Cartas de lectores
19 Noviembre 2014
LA JUSTICIA POR MANO PROPIA

En las sociedades primitivas, los hombres se hacían justicia por sí mismos. Las sanciones que se imponían eran ilimitadas y no guardaban ninguna proporción con el daño causado. Después hubo un progreso. Vino la famosa Ley del Talión, con la célebre fórmula del “ojo por ojo y diente por diente”. Pese a lo bárbara que hoy nos parece, ella (la Ley del Talión) representó un gran avance en comparación con la represalia ilimitada anterior, porque estableció, al menos, una proporcionalidad entre el daño inferido y la respuesta de la víctima. Fue, de alguna manera, una limitación en el ejercicio de la justicia por mano propia. Más tarde nadie pudo hacerse justicia por sí mismo. Debió acudir al juez a que la hiciera. El viejo precepto del Derecho Romano de que nadie debe ser juez de su propia causa es una ardua conquista de la humanidad en el tiempo, es una esencial conquista del derecho. El juez es el que posee la autoridad para instruir, tramitar, juzgar, sentenciar y ejecutar el fallo en una causa, jamás la parte ofendida puede arrogarse el derecho de ser juez en su propia causa porque nunca podría ser objetiva ni imparcial. Ser juez es tener la prudencia de lo justo, es tener la virtud moral y el criterio ético suficiente para discernir lo justo de lo injusto; es contar con criterios objetivos para aplicarlos a situaciones concretas. El acto y sus consecuencias deben imputarse al actor, quien debe responder por ello. Para la justicia, todos los hombres tienen derechos iguales en tanto son seres humanos. Sin embargo, “para algunos” no todos los hombres son iguales. ¿Qué tipo de hombre o civilización es la proclama una venganza primitiva con derramamiento de sangre inocente o no? El viejo principio de la ley del más fuerte. La infracultura del gatillo fácil constituye el elogio de delitos que ofician de justificación moral y revancha social. El reclamo del gatillo fácil es como un culto al castigo justiciero, justificado, racionalizado, más allá de toda convicción legal, ciudadana, religiosa o moral. La justicia por mano propia presupone la denegación de defensa, el retorno del poder de muerte a manos de la sociedad civil sectorizada en clases. Si la mano de la policía deviene fácil y recesiva, entonces una mano propia debe autorizar de facto el poder de fuego ciudadano. Se quiere a la justicia por mano propia como una restitución al ciudadano victimizado del poder de fuego estatal. Esta trágica retroacción constituye la diversificación del monopolio en gatillos sectorizados. La ciudadanía armada parece renunciar a lo que la constituye como tal; retornar del estado de derecho al estado de naturaleza. La privatización de la seguridad, el armamentismo ciudadano y el recrudecimiento del delito con visos de justicia, supone una vuelta al discurso de predominio de la ley del más apto en cuanto a las propias manos y un regreso de la ley de la selva. 

Jorge Lobo Aragón



EL PERONISMO

 Argentina fue gobernada desde 1916 por sólo dos partidos (el radical y el peronista) y por 14 dictaduras militares. Los dos partidos políticos tuvieron todas las oportunidades y un fin previsible. Después de 60 años de peronismo, es un deber debatir lo vivido. El primer peronismo terminó por largo desgaste. La crisis de 1949 indicó que la fiesta inicial terminaba y que había facturas por pagar. Luego vino la crisis de 1952, año duro, con ajuste de cinturones, pan negro y la muerte de Evita. Perón capeó el temporal con inteligencia, logró contener la inflación y encaró un nuevo rumbo económico. Se preocupó por la productividad, estimuló el campo y llamó a los inversores extranjeros. Ninguno de estos conflictos llevaba a un final inevitable. Perón tenía la legalidad institucional, el respaldo militar y un sólido apoyo popular. Pero lamentablemente se dejó dominar por sus obsesiones, cometió el error de embestir contra la Iglesia. Eso bastó para amalgamar a sus opositores, hasta entonces muy divididos, que así pudieron derribarlo. El segundo gobierno peronista terminó en un cataclismo. Perón actuó como un jefe de Estado. Acordó con todas las fuerzas políticas, pero no pudo resolver dos problemas en su propio territorio: un conflicto violento en el seno de su movimiento y un conflicto de intereses sectoriales en la sociedad. Perón murió antes de que la crisis llegara a su punto culminante, pero había dejado como sucesora a su esposa, Isabel. Si estaba pensando en liquidar la segunda experiencia peronista, no pudo haber elegido mejor. Isabel destruyó lo que Perón había construido. Alejó a dos sostenes clave, Gelbard y Balbín, ignoró a los peronistas experimentados y entregó todo el poder a López Rega. Después de los años del gobierno de Alfonsín, surgió nuevamente el peronismo, esta vez con Menem, la antítesis de todo lo que proclamó el peronismo en su historia. Un liberalismo económico absoluto que llevará a la destrucción de la industria nacional y de las empresas nacionales de servicio. El gobierno de Carlos Menem no terminó en catástrofe porque concluyó un poco antes del inevitable colapso de la convertibilidad, que cayó sobre quienes lo sucedieron. Tras un nuevo fracaso del radicalismo, esta vez con De la Rúa, la gente en la calle gritaba a toda voz: “que se vayan todos”. Pero entre radicales y peronistas no valía tanto la ideología, solo valía el poder, unidos eligieron a Duhalde que luego convocó a la única salida que les quedaba: nuevas elecciones, de las que surgió un desconocido para las masas populares, Néstor Kirchner, otra de las mil formas de presentación del peronismo. El presidente Kirchner, para ejercer un gobierno libre e independiente, tomó la iniciativa de irse del peronismo, debía independizarse de las ligas partidarias, para no decir mafias, de los intereses creados. Debatiendo estos 60 años de peronismo, me cabe preguntar: ¿es posible encontrar hoy, en la doctrina justicialista básica, algunos principios fundamentales y sustantivos, sobre los cuales se podría erigir el peronismo para el siglo XXI (palabras del profesor Joseph Page)?” El movimiento peronista que cambió definitivamente la política argentina desde su jubiloso nacimiento el 17 de octubre de 1945 y que aún hoy, a 60 años de su aparición, sigue liderando los destinos de la Nación. Como corolario de este “debate”, rememoro una inscripción sobre el pórtico de entrada a la sede del Archivo Nacional de los Estados Unidos que pudiera servir como slogan: “El pasado no es más que el prólogo del futuro”. Aún podemos presagiar un peronismo para el siglo XXI.

Julio Argentino Gómez



UN ACTO DE ESPERANZA 

Llevo 27 años de docente y desde hace tiempo no escucho más que quejas acerca de los jóvenes actuales: son imposibles, irrespetuosos, apáticos, etcétera. Considero que ellos son el resultado de una sociedad viciosa que no ofrece demasiados buenos ejemplos a seguir. Hoy quiero contar la experiencia de este año lectivo, en el instituto “Padre Manuel Ballesteros”, de Lules, en el área Inglés. Los jóvenes de 5° año realizaron una fiesta del Día del Niño para el comedor de El Oratorio, perteneciente a la FAI. Los alumnos de 2° año, recolectaron juguetes para Cáritas Parroquial, en una función de villancicos en inglés. Los chicos de 4° año recolectaron mercadería y útiles escolares para el Hogar San Agustín. Ellos hicieron todo esto con gran esfuerzo, ahorrando de su mesada diaria, estudiando vocabulario relativo a los proyectos con dedicación y mucho amor y obtuvieron un rotundo éxito, demostrando así que “el mar está hecho de pequeñas gotas”. En todas las escuelas se realizaron jornadas de auto evaluación y se discutió mucho acerca de la problemática educativa y el gran planteamiento fue el tipo de adolescentes que recibimos. Hoy quiero aportar una nueva mirada. Por más difícil que sea educar a esta edad, el adolescente es en esencia un espíritu puro, lleno de sueños y de ganas de transformar el mundo. ¿Por qué no pensar que todavía quedan cosas buenas para destacar acerca de los alumnos en  cada colegio? Si nos auto evaluamos como instituciones, también debemos considerar y dar preponderancia a lo bueno que se tiene, a lo humano que nos destaca, a ese detalle que hace la diferencia. Me conmueve el joven y su problemática y me desvela el “qué hacer” desde mi humilde lugar de docente. Escuché a una colega que recién comienza a transitar esta profesión citar una frase: “La educación es un acto de esperanza”, pues entonces me  auto proclamo “una esperanzada en la educación”. Creo que se puede, que con buenos modelos y guías los alumnos serán bien formados, no sólo en el aspecto cognoscitivo, sino integralmente. Dejemos de mirar a los jóvenes como generaciones perdidas y pongámonos a trabajar para brindarles calidad en la tarea diaria, buen ejemplo, pasión, valores y positivismo. En medio de esta sociedad desesperanzada, harta de la corrupción y la injusticia, apostemos a los que serán los hombres y mujeres del mañana y enseñémosle lo que sostiene el papa Francisco: “Sean los primeros en tratar de hacer el bien, de no habituarse al mal, sino a vencerlo”.

Sandra Elisabet Sosa



Estatismo y populismo 

¿Por qué acepta lo que ocurre? Acepta porque tiene incorporado desde niño la teoría filosófica altruista, la filosofía de la culpa, el manual de instrucciones que no le permite ver que toda teoría estatista, populista, colectivista, conforman la base necesaria de toda dictadura, tiranía o variante de un Estado absoluto. Y ya sea consciente o inconsciente de esto, los que gobiernan hacen lo imposible para que un hombre crea que el bienestar de algunos, puede ser alcanzado aplicando la fuerza física contra otros (un impuesto, por ejemplo) y que usted, se lo crea. Si no se dio cuenta todavía de que sistema usted defiende, estos nombres le pueden refrescar la memoria: Lenin, Stalin, Hitler. Si un colectivista quiere perseguir un ideal propio, se siente moralmente facultado para forzar a otros hombres para que cumplan con “el cometido”. Piense, el progreso no puede ser logrado por privaciones forzadas, por producto de violaciones, si fuera este concepto correcto, ¿dónde deberíamos estar viviendo en este momento? Mientras sigan sacando por la fuerza a los que pescan, en beneficio de los que no pescan, misión imposible. Pero para que esto ocurra, un ideólogo malvado tiene que estar detrás de esto, adoctrinando, metiéndoles a estas personas en la cabeza este discurso que “el trabajador tiene la obligación de mantenerlo”. Ahí está el secreto, la causa, que usted no puede ver. Y si se les demostrara, no a golpes, a los que no producen, que es imposible comer un pescado antes de sacarlo, o a los dueños de este discurso, se los obligaría a que ellos lo mantengan, ¿qué pasaría? Mire a su alrededor y verá si el bienestar general aplaudido es logrado para la población, o para una pandilla de gobernantes, que hacen creer, que este es el camino.

Néstor Horacio Juárez



INSTITUTO GORETTI

¿Habrá alguna secretaría de Estado, comisión legislativa, o área judicial que pueda dar respuesta a este ciudadano acerca de lo que el Instituto de Menores “Santa María Goretti” no responde respecto de una persona de la cual nuestra familia acompaña en su encierro? Son menores de edad sin familia, sin alguien afuera que pueda acompañarlos, son seres en manos de un Estado que evidentemente abandona. No puedo seguir escribiendo, me ahoga pensar esa realidad. No entraré en detalles. Solo busco respuestas a tantas preguntas que pudiera hacer. Son personas, no cosas. ¿Qué está pasando allí adentro? ¿Dónde están las áreas de gobierno que deben responder? ¿Dónde están las personas responsables de esta área? Busco respuestas. Me duele el dolor de esas niñas en estado de abandono. ¿Algo debería hacer para encontrar respuesta a tanto silencio? ¿Cómo debería obtener el permiso para que una niña venga a visitarnos y compartir en familia al menos un día a la semana? Pido a Dios nos acompañe en esto, y a quien sepa comprender lo que nosotros sentimos, nos ayude.

Marcelo Funes



CAOS DE TRÁNSITO EN LA 24 

Recorrer la 24 de Septiembre a la mañana (por las tardes también, quizás un poco menos) es una verdadera tortura para un conductor responsable y respetuoso de los reglamentos de tránsito. Taxis, vehículos privados y también camiones de reparto impunemente bloquean la banda derecha. Muchos dejan el vehículo solo, aunque con “prudencia” sus luces titilan avisando que ellos están ahí detenidos. Otros permanecen “distraídos” frente al volante. El personal de tránsito no existe, pero continúa cobrando sus “merecidos” sueldos de trabajadores “eficientes”, la Municipalidad de la ciudad no está enterada del tema (la política de “alto nivel” es más importante) y el conductor sufre, mientras las motos pasan zigzagueando y los peatones cruzan en cualquier lugar, sin mirar, en ocasiones insultando a quien trata de atravesar indemne la maraña de nuestras desamparadas calles tucumanas. “Dale que va, a quien le importa si naciste honrao... si allá en el horno se vamo a encontrar...”

Máximo E. Valentinuzzi



EL HOSPITAL DE SIMOCA

Hace 34 años, el Hospital de Simoca contaba con un quirófano donde se hacían cirugías programadas, se realizaban partos y cesáreas e incluso teníamos un pequeño banco de sangre para transfusiones. Funcionaba en el hospital una escuela de enfermería y muchas de las estudiantes de entonces, luego de recibidas, fueron incorporadas al servicio. Trabajábamos sin policías y sin aire acondicionado. No existía el pomposo Siprosa, por lo tanto no figuraban los jefes de áreas, subjefes o vocales, con sus secretarias, choferes, vehículos y celulares pagados por el Estado. Cuando había un problema, el director del hospital se comunicaba directamente con el secretario de Salud o con el ministro sin tantos intermediarios. La Municipalidad colaboraba en forma estrecha y era habitual encontrar al intendente o algún funcionario dentro del hospital, interesándose por sus problemas o necesidades. A pesar de tener el hospital menos de la mitad del personal que tiene ahora, brindaba más servicios a la comunidad. Algo hicimos mal, o algo dejamos de hacer y sobre todo, algo habrá que hacer.

Luis O. Pérez Cleip



DISTINCIÓN 

Mis sinceras felicitaciones para el doctor Carlos Páez de la Torre (h) por la  distinción Domingo Faustino Sarmiento  que le otorgó el Senado de la Nación Argentina. Justo homenaje. Asimismo felicito al directorio de LA GACETA por la edición del libro “Rostros del Viejo Tucumán”, un valioso documento histórico.

Soledad Ardiles Gray de Stein



CONCURSO TRANSPARENTE

En 1984, la comisión de cultura de la Federación de Entidades Profesionales Universitarias de Tucumán (Feput) organizó el concurso de cuento  y poesía “Juan Bautista Alberdi”. En cuento, integraban el jurado Gustavo Bravo Figueroa, Pola Capllonch de Filippone y Héctor Ivo Marrochi. En poesía, José María Bruguera, Carola Briones y Mirta Suárez Porto. LA GACETA publicó los seudónimos ganadores y la convocatoria  a la entrega de premios en el salón de actos del Centro Cultural Virla. En una concurrida ceremonia, en diciembre, en la que fueron distinguidos también los mejores egresados de las carreras universitarias de la promoción 1983, ante un escribano, se abrieron los sobres y  conocimos  los nombres de los ganadores. En cuento, el seudónimo Marveri me llevó al primer puesto, siguieron Miguel Hugo Gutiérrez Ripoll y Salvador Chaila. En poesía, Salvador Chaila, Tomás García Giménez y María Isabel Colombo. Un acto transparente que honró al tucumano Juan Bautista Alberdi, nombre del concurso, a la entidad organizadora, a los miembros del jurado y a los participantes.

Ana María D’Andrea de Dingevan



INCANSABLE LUCHADORA (I)

El 14 del corriente, el Señor la llamó a su lado a Florinda Leguizamón, referente principal del movimientos Los Jubilados de la Plaza, que los miércoles, durante muchos años, peregrinamos en la plaza Independencia, exigiendo lo que por ley nos corresponde. Ella fue la convocante, la que guió al grupo, la que pedía ser fuertes y no claudicar nunca. Estuvo presente hasta que su salud se lo permitió y con profundo dolor, dejó de hacerlo. Desde su lecho de enferma continuaba preocupada por la problemática de los jubilados. Descansa en paz, Florinda, los que quedamos, aun viejos y cansados, continuaremos en esta lucha. Estás junto al Señor, que sin duda, te premió por tu vida de entrega y lucha por los demás. Ayúdanos a continuar y pídele al Altísimo que abra el corazón de los funcionarios del gobierno para que se sensibilicen y solucionen nuestro problema. Físicamente ya no estás con nosotros, pero tu presencia espiritual estará siempre presente en nuestras marchas. No te olvidaremos jamás. Continuaremos en la lucha hasta que nuestras fuerzas lo permitan.

Clara Reinoso de Abdala
Pasaje Calchaquíes 1.473
San Miguel de Tucumán



INCANSABLE LUCHADORA (II)

Ayer fueron Carlos Martínez, Mario Carabajal, Zuleta y muchos otros jubilados y pensionados provinciales transferidos los que debieron partir sin ver reconocidos sus derechos. Hoy, le tocó hacerlo a la emblemática dirigente Florinda Leguizamón. Ella pasó a ser el último trofeo obtenido por el señor gobernador caracterizado por su falta de generosidad en el cumplimiento de sus deberes. Generosidad que tuvo con una amplia legión de punteros políticos, cuyo único mérito fue perder las elecciones en que se presentaron, pero no con quienes aportaron toda su vida para obtener un beneficio conforme a derecho y amparados por sentencia judicial que condena a la Provincia a abonar la movilidad y porcentualidad. Florinda, al igual que los que continuamos esta lucha, no logró conmover la cruel indiferencia oficial, llevándose la frustración de tanto esfuerzo en vano, pero los responsables de tan tremenda discriminación, cargarán en su conciencia el peso de su abusiva gestión y algún día tendrán que rendir cuenta por ello. Incansable luchadora: libraste el buen combate, descansa en la paz del Señor.

Marcelo Venecia



EL SERVICIO DE TAXIS

La población de Tucumán debe entender que el servicio de taxis es explotado por particulares, no por el Estado y cada vez que sube a un pasajero quiere rapidez, que sólo se logra con autos nuevos y choferes profesionales. Quiere seguridad, que tenga mecánica excelente, un chofer adecuado y los seguros de transporte de pasajeros. Quiere comodidad, el auto limpio, perfumado y aire acondicionado, pero pretende pagar como un servicio trucho. La rapidez, la seguridad y el confort tienen un costo, y alguien debe pagarlo. En Tucumán, el servicio de taxis es por cuenta y riesgo de particulares, no tiene ventajas ni subsidios estatales, lo que dista de ser un servicio público, por lo que cada exigencia de la autoridad de control debe acompañarse con una adecuación de la tarifa, porque tiene que aceptar que los costos de mantenimiento del servicio deben ajustarse a la realidad, de lo contrario, el Estado estaría promoviendo el deterioro del servicio. Hasta ahora, el servicio de taxis se mantiene por la negligente aplicación de las normas, y el incumplimiento de las funciones públicas de la autoridad de aplicación.

Roberto Córdoba (h)



PLAZA SAN MARTÍN

Ya que la plaza San Martín será remodelada, la Municipalidad podría escuchar las sugerencias los vecinos, que son los que hacen uso del paseo.

Godofredo J. Lezcano

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