Muratore: "El próximo Mundial se juega en 2019"

SEVILLA, España.- Los cambios están en marcha. Horacio Muratore, flamante presidente de la FIBA, anticipó a LG Deportiva que el próximo Mundial se disputará en 2019 y contará con 32 seleccionados participantes. “Si bien hay cuatro o cinco postulantes, las federaciones de China y Filipinas son las que cuentan con mayores posibilidades para ser sedes de esa futura competencia”, explicó el dirigente tucumano.

Hasta el momento han presentado sus respectivas carpetas para entrar en la licitación, además de China y Filipinas, las federaciones de Brasil y México, aunque se continuará con la recepción de postulantes.

Muratore, que el viernes pasado asumió como el titular de la máxima entidad del baloncesto del mundo, aclaró que estas propuestas serán analizadas en el próximo mes de mayo, cuando se reúnan los integrantes del Buró de FIBA y sus máximos representantes. “En esa oportunidad se evaluarán distintos factores que tendrán que ver en decisión final”, explicó.

Muratore anunció que el encuentro dirigencial para determinar la sede del próximo Mundial se llevará a cabo en Ginebra, Suiza, donde tiene su sede la Federación Internacional.

Una gran organización

Sobre el desarrollo del torneo que se está jugando en las ciudades de Sevilla, Granada, Bilbao y Gran Canaria y que en su fase decisiva seguirá en Barcelona y Madrid, indicó que es “impecable”.

“La organización les brinda las mismas posibilidades a todos los equipos y a los casi 500 periodistas que están cubriendo el torneo y eso es muy importante”, expresó.

Un debut de película

SEVILLA.- De película. Así es la historia de Tayavek Gallizzi, el joven que debutó en el seleccionado argentino de mayores y lo hizo en un Mundial. El interno de Quilmes jugó un minuto y 38 segundos y marcó dos puntos (ambos de tiro libre) en la victoria ante Senegal por 81-46. “Por suerte hicimos una buena diferencia. En eso veo que Julio (Lamas) pidió minuto y me dice: ‘Entrá’. Lo disfruté como todo lo que me pasó acá desde que llegué”, resaltó. “Sentí una alegría inmensa. Quería entrar y moverme en la cancha. Era la oportunidad que tanto estaba esperando”, reveló, aún entusiasmado. “Antes de entrar, Scola me dio confianza y me dijo: ‘Pibe, quiero que vuelques la pelota en la cara de todo el mundo”, contó. (Télam y especial)