Miguel González fue el ganador del interno del club de Concepción

Miguel González fue el ganador del interno del club de Concepción

Campeón de la amistad.

ORGULLOSO. Miguel “Mejicano” Gonzáles muestra orgulloso el trofeo que ganó y a su nieto que quiere seguir sus pasos. ORGULLOSO. Miguel “Mejicano” Gonzáles muestra orgulloso el trofeo que ganó y a su nieto que quiere seguir sus pasos.
15 Agosto 2014
Está feliz y no oculta el porqué. “Pesco en el club desde hace 10 años y es la primera vez que gano el título interno. Pero eso no es lo más importante; lo mejor es haber formado un gran grupo de amigos en este tiempo”, dispara Miguel “Mexicano” González, que al haber ganado la competencia del club de Pesca y Náutica de Concepción, se transformó en el primer campeón de la temporada.

González, comerciante de profesión, se ríe a carcajadas de todas las anécdotas que cosechó a lo largo de las siete fechas que duró el certamen de la entidad sureña. “Eso es lo mejor de este deporte. Hacés lo que te gusta y te divertís hablando macanas todo el tiempo. La última fue haberle puesto ‘Nereida’ a Gustavo Figueroa”, comenta sonriendo y pidiendo, para no romper su principio, “publíquelo así para que se rían los changos”.

González festeja el título con calma, sin muchos excesos. “Estuvo muy parejo. Pudo haber sido para cualquiera”, asegura y felicita a los que estuvieron muy cerca de él durante todo el campeonato, y a Julio Martínez, a Marcela Font y a Valentino Geria, que se quedaron con los títulos de las categorías Caballeros B, Damas y Juveniles, respectivamente.

El “Mexicano”, como es conocido en el ambiente, no duda a la hora de decir cuál fue el secreto del éxito: “La suerte, amigo. En casi todos los concursos tuve la fortuna de que me tocaron buenos lugares para pescar”.

González no se guarda los secretos que utilizó porque él, como muchos pescadores de su edad, entienden que los conocimientos hay que transmitirlos a los más jóvenes para que la actividad no se muera.

“Este fue un año atípico en La Angostura, donde se realizaron la mayoría de los concursos. Como no es común, pescamos mucho con boya anclada, es decir, con el aparejo pegado al barro. Siempre usé la misma carnada: filete de mojarras, a veces teñida de rojo o de amarilla y natural con aceite”, cuenta entusiasmado.

Se acaba la temporada, pero a González no se le pasan las ganas de tirar el anzuelo. “Cuando se acabe la pesca de pejerreyes, comenzará la de variada, que también me fascina. Tengo la suerte de tener una esposa que me apoya para que haga esta actividad. La vida me dio dos hijas a las que también les enseñé a pescar, pero ahora tengo dos nietos a los que les estoy transmitiendo esta pasión que no morirá nunca”, concluye este campeón de la amistad.

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