14 Abril 2014
la gaceta / foto de roberto delgado
Montículo peligroso en Gobernador del Campo al 1.000
En Gobernador del Campo al 1.000 quedó un montículo de tierra por una obra que dejaron abandonada, y ya han ocurrido varios accidentes. El vecino Carlos González contó que viernes a la noche una señora que conducía una camioneta Ford Ranger chocó de frente contra el guardrail, a causa de este montículo, y que el jueves hubo otro caso igual. “No hay ninguna señal”, advirtió el vecino.
Levantaron las baldosas para arreglos y no volvieron más
Las veredas de calle San Juan al 300 (foto) y al 400 están sin baldosas en varios sitios, debido a que la Municipalidad comenzó a poner cemento alrededor de los árboles para darles más firmeza, dijo una vecina. “Pero levantaron las baldosas y no volvieron más. No se puede limpiar la vereda y esto está cada día más sucio”, se quejó.
El piropo: ¿galantería o agresión?
La Semana Contra el Acoso Callejero concluyó ayer en el país, referida a frases, silbidos y gestos (a menudo vulgares) de hombres hacia mujeres en la calle. Según una encuesta de la Universidad Abierta Interamericana (publicada por “La Nación”), el 59,2% de las mujeres dijo sentirse incómodas y violentadas ante esta práctica, y la mayoría cruza la calle cuando encuentra un grupo de hombres en una vereda. En 9 de Julio segunda cuadra de nuestra ciudad, una pintada da cuenta de la incomodidad que genera el piropo.
En Gobernador del Campo al 1.000 quedó un montículo de tierra por una obra que dejaron abandonada, y ya han ocurrido varios accidentes. El vecino Carlos González contó que viernes a la noche una señora que conducía una camioneta Ford Ranger chocó de frente contra el guardrail, a causa de este montículo, y que el jueves hubo otro caso igual. “No hay ninguna señal”, advirtió el vecino.
Levantaron las baldosas para arreglos y no volvieron más
Las veredas de calle San Juan al 300 (foto) y al 400 están sin baldosas en varios sitios, debido a que la Municipalidad comenzó a poner cemento alrededor de los árboles para darles más firmeza, dijo una vecina. “Pero levantaron las baldosas y no volvieron más. No se puede limpiar la vereda y esto está cada día más sucio”, se quejó.
El piropo: ¿galantería o agresión?
La Semana Contra el Acoso Callejero concluyó ayer en el país, referida a frases, silbidos y gestos (a menudo vulgares) de hombres hacia mujeres en la calle. Según una encuesta de la Universidad Abierta Interamericana (publicada por “La Nación”), el 59,2% de las mujeres dijo sentirse incómodas y violentadas ante esta práctica, y la mayoría cruza la calle cuando encuentra un grupo de hombres en una vereda. En 9 de Julio segunda cuadra de nuestra ciudad, una pintada da cuenta de la incomodidad que genera el piropo.
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