Batista: “Tenemos el as de espadas”

Batista: “Tenemos el as de espadas”

El técnico considera que Argentina tiene un plus con la presencia de Messi

EMOCIÓN: Batista aparece flanqueado por Pumpido y Olarticoechea.
EMOCIÓN: Batista aparece flanqueado por Pumpido y Olarticoechea.
26 Enero 2014
Sergio Batista es un ex campeón del mundo de 1986, que se dio el gusto, como alguna vez lo hicieron Diego Armando Maradona y Daniel Alberto Pasarella, de dirigir la Selección Nacional. El “Checho”, que había asumido el 2 de noviembre de 2010, estuvo en el cargo hasta el 25 de julio de 2011. Ese día le dejó ese lugar a Alejandro Sabella, que finalmente clasificó al seleccionado nacional para el Mundial de Brasil 2014.

El entrenador fue uno de los ex campeones mundialistas que estuvieron en la presentación del trofeo que estará en juego en la Copa del Mundo de Brasil y que se realizó en el Hotel Provincial de Mar del Plata, organizado por Coca Cola.

El evento acaparó la atención de los miles de turistas que estuvieron en la “Feliz” y LG Deportiva tuvo la posibilidad de entrevistar a “Checho”. El ex entrenador del equipo nacional analizó las chances de la Selección en el Mundial de Brasil y dejó algunos conceptos interesantes.

-Al igual que el resto de los muchachos se te vio emocionado cuando levantaste la Copa.

-Cuando la tuve nuevamente en mis manos, de inmediato recordé tantas vivencias que vivimos en aquel inolvidable torneo de 1986 en México. Recuerdo haberla tenido en mis manos en aquellos momentos y emocionarme tanto como lo hice en esta ocasión. Son cosas que, pase lo que pase en mi vida, me seguirán movilizando en lo sentimental. Agradezco la invitación a la organización del evento a participar en este acto tan emotivo.


Candidato lógico

-Por haber dirigido a muchos de estos jugadores en tu paso por la Selección ¿cómo la ves para el Mundial?

-Argentina tiene posibilidades ciertas para ganar el Mundial y no sorprendo a nadie con esta afirmación. Pero cuidado. Lo peor que nos puede pasar es sentirnos campeones antes de empezar a jugar el torneo. Este es un mal que tenemos los argentinos y que nos terminó dando tantos dolores de cabeza en otros certámenes. En este plantel hay riqueza técnica como para ilusionarnos, pero a los partidos hay que jugarlos.

-¿Que pálpito tenés?

- No me gusta hacer futurología, pero estoy seguro de que vamos a hacer un muy buen campeonato. ¿Cómo no ilusionarnos, si tenemos en el equipo al mejor jugador del mundo (Lionel Messi)? Por ser la mejor carta de triunfo que tenemos, hay que protegerlo en los días que restan para el comienzo del torneo. Hay que aprovechar que tenemos en nuestras manos el as de espadas. Un plus que muchas selecciones nos envidian.


-Los elogios de mitad de cancha hacia arriba son constantes; no así para la defensa. ¿Cuál es tu opinión?

-En el fútbol, como en tantos órdenes de la vida, el equilibrio es clave. No me cabe duda de que Alejandro (Sabella) lo va a buscar en estos meses que faltan para el Mundial. Tampoco hay malos jugadores en la defensa. Lo que ocurre es que dimensionamos tanto a los monstruos que tenemos de la mitad de cancha hacia arriba, que el resto de los futbolistas quedan relegados a un segundo plano. En lo personal, soy optimista de que ese equilibrio va a llegar en el momento justo.

Candidatos del “Checho”

-¿ Cuáles son tus candidatos para pelearle el título a la Argentina?

- Muchos consideran que el título no sale de una lista de tres o cuatro selecciones. Sin embargo, en esta clase de competencias todos los rivales son complicados. Hay que ganar siete partidos para llevarse la Copa. Nadie puede confiarse nunca, porque cualquier traspié te puede mandar de vuelta a casa. Es indudable que Brasil -mucho más siendo el país anfitrión-, Alemania, Italia y España son grandes equipos y estarán en la conversación.

- En la entrevista que le hicimos a Oscar Alfredo Ruggeri, nos dijo que la final soñada sería ante Brasil...

- Y, seguramente. Ojalá se pueda dar esa final y ganarla. Sería como tocar el cielo con las manos y una satisfacción que llenará de dicha al pueblo argentino. Cierro los ojos y me imagino el 13 de julio celebrando nuestra tercera Copa del Mundo, en el mítico estadio de Maracaná, en Río de Janeiro. Soñar no cuesta nada (sonrisa).


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