Identifican a las tres víctimas del accidente de la avioneta en Chicligasta

Una avioneta con tres ocupantes se precipitó a tierra esta mañana en Villa Chicligasta, localidad que se encuentra 75 kilómetros al sureste de San Miguel de Tucumán, en cercanías del Embalse de Las Termas de Río Hondo. Debido a la brutalidad del impacto, las víctimas que viajaban a bordo murieron en el acto, según los datos de la Unidad Regional Sur.

La aeronave cayó a 800 metros del pueblo: estalló en el aire y se estrelló. Fuentes de la Policía de Seguridad Aeroportuaria explicaron que la máquina despegó del aeroclub de Yerba Buena, de esta provincia, alrededor de las 8.30, con destino a la ciudad de Río Cuarto, en Córdoba.

Desde allí habrían tenido planes de continuar hacia El Calafate, donde se iba a desarrollar un festival aéreo. "Sentí un ruido raro y cuando miré al cielo vi que era un avión que parecía tener problemas. Explotó de repente y se partió. Tuve miedo que cayera sobre mi casa", relató a LA GACETA la vecina Mirta González.

La sección de la cola cayó sobre un monte, en donde quedó el cuerpo del piloto; mientras que la cabina se precipitó hacia un campo de caña de azúcar. En su interior quedó atrapado el cuerpo de otro hombre. Los primeros en llegar fueron vecinos y empleados de la comuna, quienes sofocaron con tierra las llamas.

En un primer momento, se pensó que eran dos los que viajaban en el avión; sin embargo, con el correr de las horas, se encontró un tercer cuerpo. Según la información oficial de la Policía, las primeras víctimas fueron identificadas como Gerardo Alfredo Gramajo y Alberto Di Lella.

Finalmente, pasadas las 17, Adrián Lombardi, tesorero del Aeroclub de Yerba Buena, le dijo a LA GACETA que se encontró a una tercera persona fallecida, la cual fue identificada como Guillermo Fares. Las tres víctimas fatales pertenecían a la institución aeronáutica desde hace varios años.

Algunos especialistas sostienen que el piloto tuvo algún tipo de problema al entrar en una zona de nubes, por lo que el avión entró en tirabuzón y no pudo controlarlo. La propia presión del aire habría provocado que la nave se despedazara en vuelo.