Los rastros del temblor amanecieron en las calles

Los rastros del temblor amanecieron en las calles

El sismo de 5,9 grados en la escala de Ritcher no sólo sacó a los tucumanos de la cama, sino que produjo daños en varios edificios.

LAPRIDA AL 100. Dos mujeres están a punto de pasar por encima del yeso que se desprendió de la sala Ross. LA GACETA / JUAN PABLO SANCHEZ NOLI LAPRIDA AL 100. Dos mujeres están a punto de pasar por encima del yeso que se desprendió de la sala Ross. LA GACETA / JUAN PABLO SANCHEZ NOLI
22 Febrero 2011
El único abrigo que llevaba contra el miedo era un camisón rosado. Instantes después de las 4, Luciana, una estudiante universitaria de Catamarca, comenzó a bajar las escaleras del edificio de Crisóstomo Álvarez al 400 a paso lento (a diferencia del resto de los habitantes, que lo hacía apurado). Cuando llegaba al primer piso, miró a uno de sus vecinos y con ojos desencajados por el susto, le dijo: "fue horrible; tembló tanto todo que hasta se me rompió el espejo".

Ayer, los despertadores no sirvieron de nada. El día comenzó antes como consecuencia de un sismo de 5,9 grados en la escala de Ritcher que sacó de la cama a los tucumanos y dejó a muchos con el estómago revuelto, lágrimas en los ojos y una sensación de vulnerabilidad que nunca antes habían sentido. Obviamente, fue difícil volver a conciliar el sueño después del tremendo susto.

Distancia y profundidad

Según el Instituto Nacional de Prevención Sísmica (Inpres), ubicado en San Juan, el temblor se produjo a las 3.58. El epicentro se ubicó a 45 kilómetros en dirección sur-sureste de San Miguel de Tucumán y a 100 kilómetros en dirección noroeste de la ciudad de Santiago del Estero a una profundidad de 27 kilómetros.

La intensidad del sismo en la escala Mercalli Modificada alcanzó el grado IV a V (cuatro a cinco) en San Miguel de Tucumán y en las Termas de Río Hondo, III (tres) en Santiago del Estero y San Fernando del Valle de Catamarca y II a III (dos a tres) en Salta. El máximo en esta escala es XII (12)

Como consecuencia del temblor, se produjeron daños en algunos inmuebles de la ciudad. En la sala Ross, Laprida 135, se desprendió una capa de yeso del balcón que cayó sobre la vereda. En un drugstore de 9 de Julio y San Lorenzo parte de la terraza se desplomó sobre la calle. Y en Catamarca y España cayeron ladrillos de una casa abandonada.

El director de Defensa Civil de la Provincia, Fernando Torres, explicó que la repartición recibió varias llamadas de vecinos que advertían que sus casas habían sufrido daños. "En general, los problemas son grietas en las paredes y caídas de revoque", explicó el funcionario y aclaró que no hubo víctimas.

Tras el sacudón, las calles del centro y de los barrios se llenaron de vecinos (muchos en pijama) que comentaban lo sucedido y trataban de calmarse unos a otros. A la mayoría, la adrenalina les jugó en contra cuando decidieron volver a la cama para seguir durmiendo.

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