Todo bebé responde a las caricias de sus abuelos

Todo bebé responde a las caricias de sus abuelos

La nueva modalidad de atención incluye la visita de los abuelos. La prematurez es causa del 33% de la mortalidad infantil. Control.

EL DIA MAS ESPERADO. En la Maternidad, los jueves de 15 a 16, los abuelos toman contacto y miman a sus nietos prematuros internados en Neonatología. LA GACETA / FRANCO VERA EL DIA MAS ESPERADO. En la Maternidad, los jueves de 15 a 16, los abuelos toman contacto y miman a sus nietos prematuros internados en Neonatología. LA GACETA / FRANCO VERA
04 Octubre 2010
Faltan 10 minutos para que el reloj marque las 15. Como todos los jueves, en la antesala de Neonatología de la Maternidad las abuelas aguardan ansiosas que abran las puertas del servicio para acompañarlos y tocarlos a sus nietos. Francisco, Elvira y Ana María tienen la mirada fija en su muñeca. "Espero que Juan Pablo esté mas grandecito y gordito que la semana pasada...". "Me dijeron que a Rosarito sólo le ponen suero...", alcanzaron a decir, antes de que la enfermera abriera la puerta y los invitara a pasar. La visita dura una hora. A través del vidrio LA GACETA observó con cuánto cariño y ternura los abuelos acariciaban a sus nietos prematuros. Sonreían como niños y algunos hasta dejaron rodar sin disimulo un par de lágrimas.

Lazos afectivos

Las maternidades centradas en la familia evitan la atención despersonalizada y el exceso intervencionista de la medicina durante el embarazo, el parto y el puerperio. "Son las que permiten el ingreso irrestricto del padre y de la madre a los servicios de Neonatología para acompañar a su hijo, y hasta la visita -en días y horarios fijos- de los abuelos, y próximamente lo harán los hermanos. Además, garantizan a la embarazada la posibilidad de estar acompañada por el personal de salud y por quien ella elija, tanto en las consultas como en el parto y el puerperio", detalló a LA GACETA María Claudia Reartez, supervisora de Enfermería del servicio de Neonatología del Instituto de Nuestra Señora de las Mercedes, cuya atención y prevención están centradas en la familia. La modalidad también se emplea en los servicios de Maternidad del Hospital Nicolás Avellaneda y del Hospital Regional de Concepción, y en el Hospital del Niño Jesús. Tucumán es una de las siete provincias del país que puso en marcha este proyecto para reducir mortalidad materno-infantil. La prematurez causa el 33% de la mortalidad infantil y constituye el principal motivo de muerte neonatal en el país, según datos del organismo internacional.

Durante la "Semana del bebé prematuro" -que comienza hoy y se conmemorará en más de 70 maternidades del país- se pondrá énfasis en las necesidades especiales de los bebés prematuros. El personal médico trabajará para sensibilizar a la comunidad sobre las necesidades del bebé que nace antes de término, difundirá estrategias para prevenir la prematurez y sus consecuencias y desarrollará acciones para fortalecer a padres y demás involucrados en la educación de niños y adolescentes que nacieron pre-término, informó a nuestro diario la médica María Zaira Pérez, responsable del Consultorio de Seguimiento del Niño Prematuro de Alto Riesgo de la Provincia, ahora con sede en el Hospital del Niño.

La unidad funciona desde hace 20 años y se encarga de controlar el crecimiento y el desarrollo neurológico de los prematuros que nacieron con menos de 1.500 gramos. Por año ingresan al consultorio alrededor de 170 niños pre-término. La OMS considera prematuro a todo niño que nace con 36 semanas de gestación (el recién nacido en término tiene de 38 a 42 semanas). "Los prematuros de mayor riesgo son los que nacen con 32 semanas o menos de gestación y con 1.500 gramos o menos de peso", explicó Pérez.

En la Maternidad nacen por año unos 10.000 niños, y el 2% pesa menos de 1.500 gramos. La doctora Pérez aseguró que de este grupo de alto riesgo alrededor del 57% es dado de alta con turnos para controles periódicos en el Consultorio de Seguimiento.

Un equipo de salud asiste a este tipo de paciente, explicó la médica Marcia Mansilla, del consultorio del Hospital Avellaneda. La secretaria recibe a la madre y confecciona el registro de ingreso del paciente; las enfermeras controlan el peso, las medidas y la presión arterial del bebé y el cumplimiento de las vacunas obligatorias. Los neonatólogos y pediatras efectúan el examen clínico y el neurodesarrollo del paciente. En determinadas edades se efectúan evaluaciones kinesiológica; psicológica, pedagógica y fonoaudiológica. En el mismo consultorio controlan y siguen al niño con problemas neumonológicos y realizan la primera consulta con la genetista y con la neuróloga. Las demás especialidades se atienden en los servicios del hospital pediátrico.

"Es necesario hacer un seguimiento del desarrollo de los prematuros porque un gran número está en riesgo de sufrir algún tipo de déficit a corto o a largo plazo", añadió la doctora Aída Carrizo, del Hospital de Concepción, donde también evalúan a los prematuros.

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