En Buenos Aires, las “Madres en Lucha” ya no confían en la Policía

Un día no lo soportaron más. Se dieron cuenta de que tenían que hacer algo para rescatar a sus hijos del infierno de las drogas. Se organizaron, planificaron, y hoy conforman una organización de alcance internacional que busca combatir el consumo de “paco”. “Esta sustancia no sólo es un flagelo para Buenos Aires, Tucumán o Santa Fe. Es una droga de exterminio que está atacando toda Latinoamérica”, expresó Marta Gómez, presidenta del Movimiento Madres en Lucha, conocido en Buenos Aires como “Madres del Paco”. Según estadísticas de esa organización, el consumo del desecho de la cocaína creció un 500 % en el país durante los tres últimos años.
Gómez explicó que el consumo de “paco” en Buenos Aires explotó en 2001. Ella y otras madres del barrio porteño de La Boca presenciaban con dolor cómo esa droga destruía sus hijos y decidieron organizarse. “Con llorar no solucionábamos nada. Por eso, pusimos sobre la mesa esta problemática, que estaba instalada dentro de la casa y de la familia de cada madre. También se adhirió gente que no tenía familiares adictos, pero que comprendía lo importante que era participar”, explicó.
Gómez definió el “paco” como una “droga de exterminio”. “Es un flagelo realmente muy duro, no sólo para los chicos que lo consumen, sino también para todo el grupo familiar. Pero no hay que olvidar que este es un problema de trasfondo político: los recursos no se reparten adecuadamente”, analizó.
Las tareas de Madres en Lucha se iniciaron en La Boca. “Empezamos a charlar, a ver cómo nos podíamos ayudar. Es lo primero que les recomendamos a las mamás: solidarizarse, dialogar, organizarse, ver en qué se pueden ayudar entre ellas. Incluso, pueden ponerse de acuerdo para buscar un espacio al cual llevar a sus hijos para que los asistan”, dijo.
Luego contó que en determinado momento dejaron de confiar en la Policía para luchar contra la venta de estupefacientes. “Hoy en día ya no hacemos denuncias. Cuando las realizábamos, los narcotraficantes se enteraban antes y no se encontraba nada en los allanamientos. Además, la Policía deja zonas liberadas y se pierde el tiempo en luchar contra eso. Por eso, preferimos enfocar nuestra atención directamente en la prevención de los pibes: llevarlos al médico y que se recuperen es la prioridad inmediata”, expresó.
Pese al trabajo que realizan, la presidenta de las “Madres del Paco” se mostró muy preocupada porque el nivel de consumo sigue en aumento. “Es difícil pelearle a esa droga. Desde el Ministerio de Salud no hay respuesta porque todavía no se sabe bien la composición. Eso trae aparejado que no tomen a los pacientes por el consumo sino por sus consecuencias, como la desnutrición, los problemas respiratorios y otras derivaciones. Se está trabajando, pero aún no se está a la altura de la circunstancia”, explicó. Y añadió: “los gobernadores deben darles respuestas a los chicos y a las familias para que obtengan una buena atención. Porque el ‘paco’ destruye el núcleo familiar”.
Finalmente, Gómez recalcó que es fundamental poner un proyecto de vida al alcance del adicto que se ha recuperado. “Cuando terminan el tratamiento, salen y tienen que tener una alternativa para no caer en lo mismo. Incluso, un pibe recuperado puede ayudar a recuperar a otros. Ese es uno de los objetivos de lo que hacemos”, dijo.

Disposición para colaborar
Las “Madres del Paco” aseguraron que están dispuestas a colaborar con las mamás de chicos que sufren adicciones a esa droga en Tucumán. Para comunicarse con la organización, pueden llamar al teléfono (011) 4301 9699, o escribir un correo electrónico a la dirección [email protected]