
Desde que se anunció el fallecimiento del papa Francisco, una marea de fieles ha inundado la Basílica de San Pedro, conmovidos por la pérdida de un líder espiritual que tocó millones de vidas. Hoy se cumple el tercer y último día en que los devotos pudieron acercarse al Vaticano y darle el último adiós, antes de que el ataúd fuera cerrado a las 20 (a las 15 de Argentina), iniciando así los ritos finales del funeral, para el que se espera una asistencia multitudinaria.
¿Cómo será la despedida final del Papa? A continuación, con la ayuda del padre Luis Zazano, te contamos los puntos más importantes de la ceremonia fúnebre que se calcula que durará aproximadamente unas seis horas.
Se cierra el féretro
La capilla ardiente se mantendrá abierta hasta hoy a la noche, cuando el sencillo féretro del Pontífice sea cerrado en privado y se prepare para el funeral. El rito será presidido por el Camarlengo, que lee el acta, un texto en latín que resume la vida y obra del pontífice.
De acuerdo al protocolo, el maestro de ceremonias extenderá un velo de seda blanca sobre el rostro de Francisco y colocará en el ataúd una bolsa con las monedas acuñadas durante su pontificado y el tubo metálico con el acta.
Kevin Joseph Farrell, camarlengo de la Santa Iglesia Romana, será el presidente del rito.
A diferencia de las tradiciones pasadas, no se utilizará el catafalco ni las tres urnas superpuestas (de ciprés, plomo y roble). En su lugar, se empleará una única urna de madera, con una caja de zinc en su interior, siguiendo la voluntad de Francisco de hacer su despedida más austera.
Según explicó Zazano, Francisco dispuso que su cuerpo fuera enterrado con dignidad, pero como todo cristiano, sin triple ataúd, doble velatorio ni títulos ostentosos.
Sobre el ataúd del Papa, colocado delante del altar, se ubicará el Libro de los Evangelios. Encomendó la tarea a monseñor Diego Ravelli, maestro de las celebraciones litúrgicas papales, y aprobó una nueva edición del “Ordo Exsequiarum Romani Pontificis” (Rito del entierro de los romanos pontífices) el 29 de abril de 2024, para establecer que el funeral del Romano Pontífice es el de un pastor y discípulo de Cristo y no el de un poderoso de este mundo.
De esta forma, en las oraciones Francisco será llamado “Papa”, “Episcopus Romae” o “Pastor”, en el ritual “Romanus Pontifex”, y por tanto obispo de Roma, pastor, romano pontífice, sin más títulos como “Sumo Pontífice de la Iglesia Universal” o “Soberano del Estado de la Ciudad del Vaticano”.
El cambio en el ritual no solo refleja un deseo de humildad, sino que también marca un giro en el enfoque de las exequias papales.
La misa
Hoy a las 10 (5 AM de la argentina) comienza la ceremonia de despedida con la celebración de la Santa Misa Exequial en el atrio de la Basílica de San Pedro, en un acto solemne al que se espera que asistan miles de fieles. Aseguraron su presencia 50 jefes de Estado y 10 monarcas del mundo. El oficio será presido por el cardenal Giovanni Battista Re, el decano del Colegio Cardenalicio, y también participarán patriarcas, cardenales, arzobispos y obispos.
Al final del servicio, el cardenal decano pronunciará la última oración, que encomienda formalmente al Papa a Dios antes del entierro. El ataúd será llevado por portadores al interior de la basílica para la conclusión del servicio, antes de ser transportado a su lugar de entierro.
El traslado
Tras la misa, los restos mortales serán trasladados a la Basílica de Santa María la Mayor de Roma, según la última voluntad del papa Francisco y alejándose del protocolo habitual que contempla el descanso de los pontífices en la Basílica de San Pedro, en la Ciudad del Vaticano.
Será la primera vez en 122 años que un Papa será sepultado fuera de las murallas vaticanas. Según el testamento de Francisco, su tumba deberá ser simple, sin ningún tipo de ostentación, con la única inscripción: “Franciscus”, un reflejo fiel de su vida de sencillez y misericordia. La tumba se podrá visitar desde el domingo por la mañana, indicó la oficina de prensa.
El recorrido
El cortejo fúnebre del papa Francisco atravesará el centro de Roma y abarcará aproximadamente cinco kilómetros. Será en un vehículo, pero “a paso de persona”, informó el Vaticano. La comitiva se desplazará lentamente para que los romanos y fieles puedan ver el paso del féretro.
El Vaticano confirmó que tanto el funeral como el traslado se transmitirá en directo, mientras que el momento del entierro será privado. Aunque es una tradición transmitir a nivel mundial la despedida de un Papa, según el padre Zazano, esta despedida tiene un tinte especial para nosotros porque es del primer pontífice latinoamericano. También por todo lo que ha gestado el papa Francisco y el legado de humildad y cercanía con los fieles que nos deja.
Un grupo de personas pobres recibirá el cuerpo del difunto Papa en la Basílica de Santa María la Mayor en Roma, donde Francisco siempre rezaba a la Virgen antes y después de sus viajes al extranjero.
Entierro
El funeral culminará con un entierro sencillo y privado en el sitio elegido para su descanso final. Se entonarán oraciones y salmos. Antes de colocar el féretro en el sepulcro, se imprimirán en él los sellos del Camarlengo, de la Prefectura de la Casa Pontificia y de la Oficina de Celebraciones Litúrgicas.
Este rito marcará el inicio de los “Novemdiales” (Novenario), una antigua tradición de nueve días de luto y misas por el descanso del alma del difunto Papa.
El rosario previsto el sábado por la tarde, tras el funeral, se celebrará en el exterior de la Basílica de Santa María la Mayor para permitir las tareas de preparación de la tumba.