
En medio del debate acerca del impacto del nuevo régimen cambiario en los precios, el Gobierno nacional reafirmó la iniciativa para actualizar la metodología de medición del Índice de Precios al Consumidor (IPC).
La novedad surgió durante el informe que brindó ante el Congreso nacional el jefe de Gabinete de ministros, Guillermo Francos. En particular, la pregunta 22 aludía a un planteo formulado por la Cívica para que se informe “si el Indec tiene previsto actualizar la canasta de bienes y servicios utilizada para el cálculo del Índice de Precios al Consumidor (IPC), para que represente adecuadamente los cambios en los hábitos de consumo, asegurando así una medición más precisa de la inflación y su impacto en el costo de vida”. La respuesta escrita del reporte de Francos fue la siguiente: “el Ministerio de Economía informa que el Indec finalizó en marzo todos los desarrollos técnicos y metodológicos del nuevo IPC, así como también las consultas y testeos técnicos del nuevo índice para su implementación”. “Mientras tanto, el Instituto continúa realizando los análisis técnicos en torno a la estabilidad de los precios para asegurar el cumplimiento de las recomendaciones internacionales y garantizar que las modificaciones no se introduzcan en períodos atípicos”, se explicó.
Según trascendió, en la nueva medición se tomaría más en cuenta el peso de las tarifas, del servicio del transporte y de los gastos propios de la vivienda. De esta manera, Alimentos y Bebidas no Alcohólicas, no tendría tanta incidencia en el cálculo del IPC, siempre y cuando los precios no registran oscilaciones bruscas. De todas maneras, desde el organismo que conduce el economista Marco Lavagna aclararon que aún no hay fecha de difusión del nuevo indicador.
La inflación volvió al centro de la escena a partir del impacto del nuevo régimen cambiario de flotación entre bandas. Los analistas estiman que la depreciación de la moneda, producto de los cambios anunciados el viernes pasado, pueden impactar en las mediciones de precios de los próximos tres meses. Al Gobierno le inquietó que empresas proveedoras de alimentos hayan pasado a sus clientes listas de valores con un reajuste de entre un 9% y un 12%. Estos aumentos se registraron en productos considerados como de primera necesidad y entre los que se incluyen aceites, harinas, productos de limpieza e higiene personal.
Primer período
Los analistas del mercado estiman que en este primer periodo, el dólar oficial se ubicará en un rango entre los $ 1.200 y $ 1.250, lo que implica un salto del 10% al 15%, que inevitablemente se traducirá en una aceleración del índice de inflación. “Un ajuste cambiario inicial en el orden del 10% podría trasladarse a precios con un impacto adicional cercano al 5%, llevando la inflación a niveles de 5,2% en abril y 6% o 7% en mayo. Si ese shock se mantiene contenido, la desinflación debería retomar en los meses siguientes y, para octubre, converger nuevamente en torno al 2% mensual”, proyectaron en las Perspectivas Económicas de Cohen Consultores.
El nuevo escenario puede impactar en un encarecimiento del valor de las propiedades, un mercado que siempre estuvo dolarizado pero que, con un precio de referencia, implicará correcciones de precios, admiten en la actividad. También hay inquietud en la incidencia dentro de los valores de los alquileres, que suelen tener ajustes trimestrales, semestrales o anuales, según el contrato, y se actualizan sobre la base del IPC.
Con el dato de marzo, la Argentina se ubicó en el segundo lugar del ranking de inflación, con una variación interanual del 55,9%. La lista sigue siendo encabezada por Venezuela, con una variación interanual del 136%. Bolivia ocupa el tercer lugar, con un IPC interanual del 14,6%. Otros países vecinos como Brasil, Uruguay o Chile registraron inflaciones de entre un 5% y un 6% en el último año.
Consumo masivo: en marzo registró una caída del 5,4%
El consumo masivo en supermercados y autoservicios continúa en terreno negativo, habiendo registrado en marzo una caída del 5,4% interanual y acumulando un retroceso del 8,6% en el primer trimestre de 2025, según reveló un informe de la consultora Scentia. El reporte reflejó que el derrumbe en las ventas fue mayor en las cadenas de supermercados, ya que tuvieron una merma del 7,1% en el tercer mes del año frente al mismo periodo de 2024 mientras que en los comercios de barrio la caída alcanzó el 3,7%. El mayor retroceso se dio en Bebidas con alcohol (-18%), seguido de Bebidas sin alcohol (-16%) y de Impulsivos (-15,6%).
Precios mayoristas: en marzo, la variación fue del 1,5%
La inflación mayorista registró una suba de 1,5% en marzo, lo que significó una desaceleración de 0,1 puntos porcentuales contra febrero que cerró en 1,6%. Así, en los últimos 12 meses, los precios al por mayor avanzaron 27,7% y siguen por debajo de los precios al consumidor (55,9%), de acuerdo con el informe difundido ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). La variación del Índice de Precios al por Mayor (IPIM) en marzo se explicó por la suba del 1,5% en los productos nacionales (con mayor incidencia en el reajuste del valor de los alimentos y bebidas no alcohólicas) y una variación de 1,3% en los importados.