La lluvia dejó a los fans de Abel Pintos bajo el agua y con frustración

Era el viernes a las nueve de la noche y por momentos el cielo se caía a pedazos. Aún no se sabía si el recital de Abel Pintos en el Club Central Córdoba de Tucumán se iba a realizar. Hacía una hora que las puertas del club deberían haberse abierto, pero no había novedades. Mientras tanto, la lluvia se intensificaba. Afuera de las instalaciones, una larga fila de paraguas e impermeables integrada por familias con niños, jóvenes, embarazadas y personas mayores, esperaba noticias, aunque presentía lo peor.

Minutos después, desde la boletería anunció que el show no se haría. A pesar de esto, muchos permanecieron en el lugar hasta escuchar una confirmación oficial del propio artista que llegó las 21.40, a través de una historia en su cuenta de Instagram: “Lamentablemente el concierto tuvo que suspenderse. Esto ya lo hemos vivido y sabemos que siempre las reprogramaciones se cumplen de la mejor manera y terminamos viviendo grandes conciertos. Una vez más les doy las gracias por la comprensión y les mando un abrazo muy fuerte, nos vemos el próximo domingo 2 de febrero y nos vemos en la música”.

Entonces, la desazón ya era total. Las calles aledañas estaban cubiertas de agua y complicaban el desplazamiento del público. Los puestos de comida seguían abiertos intentando sobrellevar la situación y salvar la noche, pero saben que es difícil.

Esteban Brizuela quien trabaja en la esquina del club comentó: “Esto nos perjudica, pero son cosas del tiempo. Lo mejor se vende al final del evento, así que ahora solo queda esperar al proximo fin de semana”. Mientras declaraba, comenzaban a irse las jóvenes con vinchas de colores, banderas y sombreros, símbolos de la Patria Abelera, que revisaban constantemente las redes sociales.

El impacto

La noticia trajo frustración pero no sorpresa. No fue la primera vez que un recital de Pintos se cancelaba en Tucumán por cuestiones climáticas. El recuerdo del 23 de febrero del 2024 aún esta fresco. Sin embargo, en esa oportunidad el show se reprogramó para el día siguiente y se pudo realizar bajo condiciones más favorables; esta vez fue imposible porque Abel cantaba anoche en Cosquín.

Noemi Portillo y Laura Sallago, oriundas de Santiago del Estero, viajaron con toda su familia. “Hace mucho que no toca en nuestra provincia, la última vez fue en el Festival del Artesano en 2018. Para venir todos, alquilamos una casa en El Cadillal y nos quedamos hasta el miércoles descansando, pero la idea principal del viaje era el recital. El 2 de febrero se nos complica porque al otro día trabajamos. Habrá que esperar, qué decepción”, lamentó Noemi.

Para Kitti González, que vive en San Andrés la suspensión tuvo un impacto íntimamente personal. “Perdí a mi madre de crianza esta semana. Le mandé un mensaje privado a Abel contándole de ella y quería que le dedicara ‘El Mar’ a mi bella Blanquita. Ella tenía 100 años y era reAbelera. Voy a volver el 2 de febrero, por que sus canciones sanan”, afirma.

Por su parte, Natalia Conde, de 33 años, dejó a sus tres hijos al cuidado de una amiga para poder asistir al show. “Hice de todo para venir hoy. Hace seis años que espero este encuentro, es el sueño de mi vida. A él se le perdona todo, me salvó la vida en un millón de situaciones con su música. Tendré que volver”, se comprometió.

Daniela González asistió al club con su hija Martina, de 19 años, a quien contagio el fanatismo por el artista. “Me quiero matar, avisaron retarde. Creo que lo tendrían que haber suspendido más temprano, así la gente no se movilizaba hasta aquí. Pero bueno, lo amo a Abel, así que está perdonado. Lo sigo a todas partes, si hay que ir a otra provincia, voy”, afirmó. A su vez, Martina resaltó lo que más le atrae del artista a su joven edad: “Me parecen impresionantes sus shows, sus letras y su versatilidad; su performance y su estilo es lo que atrae mucho a nuestra generación”.

La logística

Rubén Urueña, presidente del Central Córdoba, explicó la decisión a LA GACETA: “La lluvia comenzó a las seis de la tarde y estuvimos en comunicación permanente con el productor de Abel. Cada media hora evaluamos el clima. El equipo técnico nos informó que las condiciones del clima no permitirían garantizar la seguridad del público, de los artistas y de los equipos técnicos”, afirmó.

Urueña destacó que las entradas ya compradas serán validas para la nueva fecha y que quienes deseen podrán adquirir nuevas localidades; y quienes no prefieran la devolución de lo comprado, podrán hacerlo. “Nuestra responsabilidad es garantizar que el evento se haga en condiciones óptimas. Todo estaba preparado desde ayer a la tarde, pero el clima no dio tregua”, aseveró.

Aunque algunos lamentaron no poder asistir en la nueva fecha del 2 de febrero, muchos seguidores aseguraron que estarán presentes sin importar las dificultades. Para los fanáticos de Abel cada encuentro con el artista es más que un recital: es un ritual cargado de emociones. Mientras tanto, Tucumán sigue esperando la voz que tantas veces supo llenar de música y esperanza sus noches.