El oficialismo consolidó su poder en Diputados

Buenos Aires.- La Cámara de Diputados aprobó en general, a las 00.05, la reforma del Consejo de la Magistratura, después de un paciente trabajo de negociación política por parte del oficialismo que permitió sumar el respaldo de ex duhaldistas, radicales filokirchneristas, seguidores del puntano Adolfo Rodríguez Saá y transversales de distinta filiación partidaria. La norma, que el año pasado fue votada en el Senado, fue aprobada por 148 votos afirmativos, 89 en contra y 2 abstenciones. Así, el oficialismo no tan sólo consiguió sancionarla, sino que pudo hacerlo como pretendía: con más de los 129 votos que necesitaba, como mínimo, para convertir en el ley el proyecto.
Sin embargo, el trámite fue largo y la oposición no desaprovechó ocasión para lanzar críticas y denuncias contra el Ejecutivo.
El debate fue abierto por el titular de la Comisión de Asuntos Constitucionales del cuerpo, el salteño Juan Manuel Urtubey, quien hizo una cerrada defensa de la iniciativa que reclaman el Gobierno y, particularmente, la primera dama, la senadora Cristina Fernández.
Las críticas a la iniciativa llegaron de parte de cada uno de los bloques opositores, que coincidieron en que la letra del texto atenta contra la naturaleza de la Constitución. El artículo 114 de la Carta Magna señala que “el Consejo será integrado periódicamente, de modo que se procure el equilibrio entre la representación de los órganos políticos resultantes de la elección popular, de los jueces de todas las instancias y de los abogados de la matrícula federal”.
La diputada del ARI Marcela Rodríguez cuestionó las pretensiones hegemónicas del oficialismo y destacó que equilibrio quiere decir que ningún estamento puede tener privilegio sobre otro. Por su parte, el radical Mario Negri planteó la disidencia total del bloque. “El proyecto atenta y va en contra de la naturaleza de la Constitución”, dijo.
También expresó abiertamente sus cuestionamientos la diputada Norma Morandini, integrante del bloque del Partido Nuevo Contra la Corrupción, que responde al intendente de Córdoba, el transversal Luis Juez. “Un amplio espectro de la sociedad señaló cómo se va a afectar el equilibrio al poner el estamento político en supremacía respecto de los otros”, dijo Morandini. También expresó su rechazo un sector del bloque Peronista Federal, integrado por ex duhaldistas y menemistas. En este caso, la diputada Alejandra Oviedo fue la encargada de atacar el proyecto oficial.
A pesar de las críticas de la oposición, quedó en claro que el oficialismo consolidó su poder en Diputados: en 2005 no había podido conseguir los votos necesarios para sancionar la norma; en cambio, en esta ocasión cosechó 19 adhesiones más de las mínimas necesarias para sancionar la norma.

Abrazo simbólico
En tanto, organizaciones civiles especializadas en el funcionamiento de la Justicia realizaron un abrazo simbólico al Congreso nacional para protestar contra la sanción de la reforma. “El futuro de la Justicia está en juego. El proyecto es inconstitucional, nadie puede negarlo honestamente. Vote por sus principios. Vote por la Constitución”, señalaba un comunicado que se distribuyó.
Entre los organizadores de la protesta se encuentran la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ); la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN); el Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP), y Poder Ciudadano. Estas organizaciones sostienen que la flamante norma apunta a limitar la independencia de la Justicia. (DyN-NA-Especial)


•El aspecto crucial de la reforma es la disminución en el número de integrantes del Consejo de los 20 actuales a 13. Al aplicar esta reducción, la representación de los jueces pasa de 4 a 3 lugares; la de los abogados de la matrícula de 4 a 2; la de los representantes académicos de 2 a 1; y la del Poder Legislativo de 8 a 6.
•El proyecto elimina la participación del titular de la Corte como integrante del Consejo, pero conserva el único integrante del Poder Ejecutivo.
•El oficialismo retiene sus 5 representantes, con lo cual puede bloquear las decisiones que deben adoptarse por dos tercios: el nombramiento y la remoción de jueces.
•El Jury de Enjuiciamiento deja de tener integración permanente y pasa a ser un tribunal que se renovará cada seis meses por sorteo.
•Se fusionan las comisiones de Disciplina y de Acusación, y dos jueces podrán integrarla.