Detuvieron a cuatro funcionarios de la Aduana por tráfico de droga

Detuvieron a cuatro funcionarios de la Aduana por tráfico de droga

Pedido de colaboración a la Policía de Bolivia. Las detenciones se realizaron en la localidad de Salvador Mazza, en Salta, en el marco del operativo "Carbón Blanco II". Las declaraciones de los acusados.

En total se secuestraron 753 kilos de cocaína. En total se secuestraron 753 kilos de cocaína.
14 Enero 2006
SALTA.- Cuatro empleados de la Aduana fueron detenidos por Gendarmería Nacional, en el marco del operativo "Carbón Blanco II", durante el cual, el 31 de diciembre, se secuestraron en Buenos Aires 753 kilos de cocaína.
El procedimiento se realizó por orden del juez federal de Salta, Adolfo Aráoz Figueroa, quien, durante la Feria, subroga al titular de la causa, Abel Cornejo. Personal de la Unidad Especial de Procedimientos Judiciales de la Gendarmería detuvieron a los acusados en la localidad de Salvador Mazza. Allí fueron arrestados dos funcionarios aduaneros, un despachante y su ayudante. De esta forma, ya son 15 los acusados arrestados en el marco de la causa. Los investigadores secuestraron además gran cantidad de documentación que será analizada por el juez.
Durante la semana pasada, el juez tomó declaraciones a ocho de los acusados, uno de los cuales es un hombre que fue quien pasó la droga desde Bolivia hacia Salta en camión frigorífico que transportaba bananas. Este hombre, en su declaración, habría advertido que la carga no podría haber traspuesto el límite fronterizo sin la colaboración de personal de Aduana, de los cuales, según trascendió, habría aportado hasta sus nombres.
Dos de los detenidos son tucumanos que fueron arrestados hace poco más de una semana, en la localidad de Campo Bello, en Alberdi, donde se habría acopiado la droga y se la habría camuflado en las bolsas ya cargadas con carbón. Desde allí el cargamento fue llevado hacia Buenos Aires, donde los investigadores lo secuestraron.
Ahora la Justicia le pidió colaboración a la Policía Técnica Judicial de Bolivia, a fin de tratar de comprobar qué contactos tendría la banda desarticulada en Argentina, cuyos líderes serían parte de un clan familiar, y un poderoso cártel de droga del vecino país.

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