La sonda Spirit constató la existencia de hierro en Marte

La sonda Spirit constató la existencia de hierro en Marte

Los análisis no permiten deducir aún si existe agua sobre la superficie del planeta

AVANCE ALENTADOR. Haber realizado análisis químicos es un gran éxito para los científicos, aunque todavía no hay señales de agua. AVANCE ALENTADOR. Haber realizado análisis químicos es un gran éxito para los científicos, aunque todavía no hay señales de agua.
21 Enero 2004
MAGUNCIA (Alemania), WASHINGTON y MOSCU.- En el marco de la misión de la sonda "Spirit" en el planeta Marte, el espectrómetro Mossbauer MIMOS II, construido por la universidad alemana de Maguncia, ha enviado a la Tierra los primeros resultados de sus análisis del suelo marciano.
El instrumento -que pesa sólo 500 gramos y tiene el tamaño de una lata de gaseosas- constató la existencia del mineral olivina y de combinaciones magnesio-ferrosas, según comunicó el Instituto de Química Anorgánica y Analítica en Maguncia.
Los análisis no permiten deducir aún si existe agua sobre la superficie de Marte, pero ya es un éxito el haber obtenido datos exactos gracias al espectrómetro, señalaron los científicos en Maguncia.
El miniespectrómetro, desarrollado y construido bajo la dirección del profesor Gostar Klingelhfer, emite radiaciones gamma que son reflejadas por las rocas marcianas, que revelan su composición mineralógica. También el Instituto Max Planck de Química en Maguncia participa en la misión de la NASA en Marte, con un espectrómetro de análisis químico.

Maniquíes de experimento
Por otra parte, un transporte espacial Progress llevará el 29 de este mes como "pasajeros" a dos maniquíes destinados a experimentos médicos a bordo de la Estación Espacial Internacional, anunció la Academia Rusa de Ciencias en Moscú. "Los maniquíes (que permanecerán a bordo durante un año) estarán llenos de modernos instrumentos para medir el efecto de la radiación cósmica sobre el organismo humano", dijo el médico Vladislav Petrov. En el llamado "Proyecto Matroshka" trabajan investigadores de Europa, Rusia, Japón y Estados Unidos, bajo la dirección del Centro Alemán para la Navegación Aeroespacial.
Según la Academia Rusa, la investigación es importante para posibles vuelos de larga duración. (DPA)

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