Juan Sasturainy sus mil vidas

Juan Sasturainy sus mil vidas

Por Hernán Carbonell. El prolífico autor argentino publica la tercera parte de la saga del inefable detective Etchenike.

MULTIFACETICO. Sasturain es colaborador del matutino Página/12, dirige la nueva generación de la Revista Fierro y conduce el único programa sobre libros que se transmite en televisión abierta. MULTIFACETICO. Sasturain es colaborador del matutino Página/12, dirige la nueva generación de la Revista Fierro y conduce el único programa sobre libros que se transmite en televisión abierta.
21 Septiembre 2008
Cuando uno se pregunta en qué andará alguien, es que quiere dar con su paradero, saber de su presencia. En este caso, y operando a través de los opuestos, podríamos decir que el sujeto en cuestión, Juan Sasturain, está en todos lados. O, al menos, en muchos al mismo tiempo.
Sasturain es, por estos días, director de Negro Absoluto, un sello de literatura policial recientemente creado, con cuatro títulos en la calle. Conduce Ver para leer, el único programa sobre libros en televisión abierta, que acaba de ganar un premio Martín Fierro (justamente: un libro). Dirige la nueva generación de Revista Fierro; es colaborador de Página 12, donde hace un par de años reeditó gran parte de su obra a través de la editorial del diario, además de hacerse presente en concursos como jurado (por ejemplo, en el Premio Internacional de Novela Letra Sur, en proceso de resolución), presentaciones de libros, charlas, festivales literarios, ferias y congresos.
Dicen que quien mucho abarca poco aprieta. Quizás no sea tan así. Lo cierto es que Juan Sasturain acaba de editar Pagaría por no verte, tercera parte de la saga protagonizada por el inefable detective Julio Etchenike y sus surreales laderos, el Gallego y el Negro Sayago, que sigue a la inaugural e imperdible Manual de perdedores y su secuela, Arena en los zapatos, reeditada a principios de año (amén de un papel secundario de Etchenike en La lucha continúa, 2003).
La cosa es que, entre el verano y el otoño del 80, Etchenike es invitado a una fiesta en el Tigre, cumpleaños de un viejo amigo, y con eso comienza una serie de aventuras y desventuras en las que a este antihéroe veterano con alma de quijote cínico, terco y justiciero, se le mezclarán su historia personal con su ética profesional. Un pasado oscuro, irresuelto y tramposo que conjuga los recuerdos dolorosos con las piñas, tiros y sopapos propios del caso.
A esta versión tanguera, vernácula del policial, concurre, en la cita inicial y el título, aquella milonga de Celedonio Flores: Me revienta tu presencia, pagaría por no verte. Bien argentina, la historia narrada no desatiende las circunstancias históricas en que está emplazada la trama: la dictadura militar. Hay "milicos para rato", Falcon verdes, Hábeas corpus, ejércitos en la noche, militantes perseguidos, emigrantes urgentes.
Así, entre citas directas e indirectas a Chandler, Hammett, Cain y otros grandes del género, en una sociedad corrompida, con mujeres bellas y malas, un muerto que presuntamente nada tiene que ver con el argumento, el infaltable sentido de la amistad y la baba sucia del dinero, Sasturain reconstruye un argumento clásico del policial negro (¿homenaje, parodia, influencia?) donde vuelve a su máxima de que "la literatura no se escribe con hechos, se escribe con palabras", siempre del lado de las novelas que cuentan historias y no de las que se dedican a coquetear con el estilo.
Sasturain ha trabajado gran parte de su carrera con lo que se suele llamar "géneros marginales": policial, infantil, historieta, fútbol, folletín. Medios muchas veces tildados de "evasivos". Lo cual trae a la memoria aquella declaración de -justamente- Raymond Chandler: "todo lo que se lee por placer es una evasión". Pagaría por no verte no es excepción. Pero confirma la regla.© LA GACETA

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios