El ejército se enfrentará con organizaciones del crimen en Río de Janeiro

El ejército se enfrentará con organizaciones del crimen en Río de Janeiro

Lula define hoy el rol de las fuerzas armadas. La violencia creció en las fronteras de la ciudad turística por el tráfico de armas y drogas.

12 Abril 2007
RIO DE JANEIRO.- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se reunirá hoy con el ministro de Defensa, Waldir Pires, y con los jefes de las tres Fuerzas Armadas para definir cómo actuarán las tropas que el gobierno enviará a Río de Janeiro por pedido del gobernador de ese Estado, Sergio Cabral. Desde enero, una fuerza de elite formada por policías federales, militares y bomberos de todo el país, está apostada en el Estado de Río para contener la serie de ataques del crimen organizado contra las fuerzas policiales, y los enfrentamientos entre la mafia de la droga y las milicias paramilitares, que han dejado hasta ahora decenas de muertos.
Aun con esas tropas desplegadas, sobre todo en las fronteras del Estado por las que transitan armas, drogas y delincuentes, la violencia en la capital turística de Brasil no disminuyó. Según el sitio Riobodycount, que cuenta en tiempo real la cifra de víctimas de la violencia, desde el 1 de febrero hasta ayer suman 650 los muertos y 356 los heridos. Cabral pidió el auxilio militar tras el asalto y el asesinato de un agente de la Policía Militarizada (PM) que era custodio de sus hijos. Ese caso elevó a 39 la cantidad de miembros de ese cuerpo muertos en lo que va del año.

Las cosas por su nombre
El gobernador aseguró que no es su intención usar las tropas en las favelas, donde las bandas criminales y las milicias paramilitares luchan por el poder. “Queremos que las tropas patrullen la ciudad”, dijo. “Basta de hipocresías. Hay que llamar a las cosas por su nombre. Esto es una guerra”, subrayó.
Da Silva llegó ayer en helicóptero el estadio Maracaná, en la zona norte de Río de Janeiro, acompañado por los ministros de Justicia, Tarso Genro, y de Deportes, Orlando Silva, y por el gobernador, con quien se había reunido el lunes en Brasilia. En el estadio los esperaban 10.500 guías cívicos que van a actuar en forma voluntaria durante los Juegos Panamericanos, en julio. (DPA-Télam)


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