Desconocidos en las salas, famosos en internet

Desconocidos en las salas, famosos en internet

Internet se ha convertido en un nuevo espacio para la expresión artística. Varios grupos de rock tucumanos promocionan sus discos y videos en myspace y ganan adeptos no sólo en la provincia, sino también en el resto del país y hasta en el mundo entero. Lo mismo sucede con los artistas plásticos que, en vez de exhibir sus obras en alguna sala o museo, las vuelcan a la red.

OPCIONES EN LAS PANTALLAS. Las visitas y los posteos legitiman las composiciones en las páginas de numerosos cantantes y agrupaciones. OPCIONES EN LAS PANTALLAS. Las visitas y los posteos legitiman las composiciones en las páginas de numerosos cantantes y agrupaciones.
04 Enero 2009

Hubo épocas en las que la popularidad de una banda se medía según cuántos discos vendían o cuántas tribunas llenaba. Hoy, pareciera que lo que importa es cuántas personas visitan su myspace; o cuántos están en su lista de amigos.
El sitio www.myspace.com es actualmente una de las mayores plataformas de promoción de artistas, donde se codean grandes celebridades como Madonna, junto a cualquier chico con una guitarra, cámara web y espíritu narcisista.
Con una amplia oferta que permite subir archivos de sonido, video, imagen y textos, y de hacer con ellos lo que la imaginación y el conocimiento de la tecnología permiten; cada banda le da un toque especial a su sitio, y se enfoca en lo que considera le puede abrir más posibilidades.
Así, el grupo tucumano Shells, además de subir sus temas, colocó una gran cantidad de fotografías. "La idea es marcar una estética particular, que cause una impresión que permita a la gente recordar al sitio como nuestro", explica Ana Celia Castellano, la baterista de la banda.
Los principales beneficiarios de este sitio, parecieran no ser las grandes bandas, sino, las más pequeñas, que, entre comentario y comentario, van consiguiendo hacerse escuchar por cualquier curioso que entre clic y clic llega a sus páginas.
Su uso, además de conseguir efímeros reconocimientos, puede abrir puertas para nuevos proyectos. "Es una forma práctica de comunicarse con otras bandas fuera de la provincia", asegura Darío Mendoza, guitarrista de Factor Común, que, a través del myspace, consiguió una fecha para actuar en Buenos Aires (lo hicieron en octubre de 2008).
Es que, entre todos sus usos, el myspace cumple también con la función de ser un verdadero currículum vitae, donde antes de decir si gusta o no una banda, habría que preguntar si se visitó o no la web. Además de relaciones públicas, el myspace hace publicidad. Así fue como un chico de Bariloche, que estaba de visita en Tucumán, aprovechó para ir a ver a Bogardus, banda que escuchaba a través del myspace, cuenta Yussef Alé, cantante de la banda. La popularidad ya no depende de los discos vendidos, es verdad. Y tampoco depende de que exista un disco. Este es el caso de varias bandas que sin tener un CD, pueden ir haciendo conocer sus temas, a modo de anticipo. Como hace la banda Alem, que mientras amaga con el lanzamiento de su trabajo, sabe entretener al público con los videoclips que van subiendo al sitio.

Interactuación
Así, este espacio va creando una nueva manera de interactuar entre el público y sus bandas. Desde la posibilidad de que algún entusiasta aficionado alemán, termine dejándole sus felicitaciones (como le pasó a la banda Factor Común); hasta el orgullo de algún tucumano que tiene en su lista de amigos a bandas como Coldplay o Metallica.
Las opciones de estrellato, o de acercarse a las estrellas, crecen a la misma velocidad que la lista de sus amigos. La cual, a la vez, es la medida precisa de la popularidad de cada miembro o banda. Y, aunque Gorillaz tenga 11 millones de visitas más que Factor Común, esta última puede decir con orgullo que más de 8.000 personas entraron a su sitio. Por eso, las opciones, e ilusiones, de estrellato son variadas. Y cada cual explota lo que cada uno tiene a cambio de sus 15 minutos de fama, o mejor dicho su nuevo récord de visitas. De todos modos, un interrogante queda para la reflexión: ¿quién apaga la computadora para ir a un recital?

Publicidad
Comentarios