Cementerio: por qué es el hábitat favorito del Aedes aegypti

Cementerio: por qué es el hábitat favorito del Aedes aegypti

Las necrópolis son focos potenciales de reproducción del mosquito que transmite el dengue.

TAREAS DE PREVENCIÓN. En el cementerio del Oeste intentan disminuir la presencia de insectos. TAREAS DE PREVENCIÓN. En el cementerio del Oeste intentan disminuir la presencia de insectos.

Una cajita de plástico que alguien dejó de ofrenda sobre una tumba, con un rosario adentro. Un plato, que alguna vez sirvió para que posara una vela. La imagen por la mitad de una Virgen del Valle. El florero, que antes tuvo flores y quedó de recuerdo.

Esos recipientes tienen un poco de agua acumulada durante las últimas lluvias. También se junta líquido en las estructuras de los nichos. Por el abandono que presentan muchos de los mausoleos hay huecos húmedos, ideales para que los mosquitos se críen. Todos se vuelven focos potenciales de reproducción del mosquito que transmite el dengue. En las plantas, los insectos se refugian. Por los pasillos encuentran sombra para protegerse del sol y de las altas temperaturas. Y cuentan, para alimentarse, con la sangre de los visitantes y empleados.

Estas son las condiciones que hacen de los cementerios la casa predilecta de los Aedes aegypti, insectos que transmiten el dengue. Hay algunas salvedades, como por ejemplo que los mosquitos prefieren las necrópolis de la ciudad a las del piedemonte.

Los datos fueron revelados en dos estudios de investigación que realizaron en el Instituto Superior de Entomología (INSUE), de la Facultad de Ciencias Naturales e Instituto Miguel Lillo.

En detalle

Se seleccionaron tres camposantos del Gran San Miguel de Tucumán, dos de ellos ubicados en zonas urbanas y de administración pública, el Cementerio del Norte y el Cementerio del Oeste, y otro de administración privada y relativamente alejado de la urbanización, el Cementerio Parque de la Paz (Yerba Buena). Se evaluó la actividad de oviposición de Aedes aegypti. Para esto, se colocaron semanalmente -durante un año y medio- 30 ovitrampas en distintos sectores de cada necrópolis.

En total se recolectaron 27.833 huevos. El 97% fueron de los cementerios capitalinos (49% en el del Norte y 48% en el del Oeste) y solo un 3% provenían de Yerba Buena. Este trabajo también les sirvió a los investigadores para saber cómo es la actividad del Aedes durante el año: el mosquito está activo desde antes de la primavera (principios de septiembre) hasta bien entrado el otoño (mayo).

¿Cuáles son los lugares del cementerio más elegido por los Aedes para poner huevos? Según este estudio son los sitios con cobertura de techo (adentro de los mausoleos, por ejemplo) y donde hay vegetación. En menor medida, en recipientes con agua.

Marzo, el más activo

“Sobre la base de los resultados obtenidos los cementerios estarían funcionando como importantes focos de proliferación al cubrir necesidades vitales del insecto, especialmente aquellos que se encuentran en zonas urbanas y presentan una combinación de mayor superficie con edificaciones y coberturas, vegetación circundante y menor mantenimiento”, concluyó el trabajo que dirigió la licenciada Giselle Rodríguez, y que también realizaron Miguel Pomares y Gimena Ávila Herrera.

En otro estudio que hicieron también en el INSUE se concluyó que los mayores niveles de infestación en las necrópolis se detectan en marzo. Los estados deficientes en construcciones y de la higiene en los cementerios favorecen a los mosquitos, remarcó la investigación.

Arena y larvicidas

Conscientes de que los camposantos están en la mira, en medio de la epidemia de dengue que vive la provincia, la Municipalidad capitalina encaró un trabajo de lucha contra el vector de la enfermedad, comentó el director de Cementerios, Augusto Petersen.

Además de fumigar estos espacios, a los visitantes se les pide optar por arena en vez de agua en los floreros. Sin embargo, especialmente en el Cementerio del Norte, hay gente que no respeta este pedido y se observaron recipientes con agua a la intemperie. “Ante esta situación, colocamos briquetas en lugares específicos de acumulación de líquidos. Son pastillas que contienen larvicidas”, especificó Petersen.

Respecto al estado de abandono que presentan varios mausoleos, y que favorece al desarrollo de mosquitos, el funcionario dijo que ellos notifican a los concesionarios para que reviertan la situación. “La verdad es que hay muchas personas a las que ya no les importa conservar bien estos espacios -explicó-. Estamos preocupados porque sabemos que es el hábitat ideal para la cría del Aedes”.

Vigilancia epidemiológica: 23 casos nuevos de dengue en Tucumán

La cifra de infectados con dengue sigue en aumento en la provincia. Ayer sumó 23 nuevos casos y ya son 261 los pacientes a los que se les detectó la enfermedad que transmite el mosquito Aedes aegypti. La capital, Yerba Buena, Alderetes, Banda del Río Salí, Lules y Concepción son las localidades más afectadas. Para disminuir las tasas de contagios, el Siprosa realiza fumigaciones a diario. Además, se aconseja a los vecinos vaciar y dejar boca abajo cualquier recipiente que pueda contener agua estancada, en la que puedan reproducirse las larvas del mosquito. Hay que usar repelente, espirales y mosquiteros. Y consultar ante cualquier síntoma: fiebre alta, dolor de cabeza y en el cuerpo, picazón, náuseas y vómitos.

Esta nota es de acceso libre.
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