Rugby: la vida después de Japón

Rugby: la vida después de Japón

Después del Mundial, algunos se irán a Europa, aunque la mayoría aseguró su continuidad.

SE QUEDA. Orlando seguirá por lo menos hasta 2020. prensa jaguares SE QUEDA. Orlando seguirá por lo menos hasta 2020. prensa jaguares
13 Mayo 2019

Pese a la ajustada derrota del sábado a manos de Highlanders, el presente de Jaguares no deja de admitir buenas calificaciones: marcha segundo en la conferencia africana del Súper Rugby a sólo un punto del líder Sharks y con un partido menos, por lo que sus chances de entrar a playoffs siguen siendo concretas. Ahora bien, otra cuestión es el futuro: a este nivel se trabaja con mucha anticipación, y los contornos que tendrá la franquicia en los próximos tres años se están definiendo ya desde hace tiempo. Eso de que cocodrilo que duerme es cartera cobra vigencia cuando se trata de negociaciones contractuales, sobre todo en un escenario como el que debe enfrentar la UAR, con adversarios económicamente más poderosos, como son los clubes europeos. La partida de Nicolás Sánchez al rugby francés a fines del año pasado encendió las luces de alarma y empujó a la entidad madre del rugby argentino a redoblar los esfuerzos para sellar la continuidad de algunas de sus figuras, sobre todo ante el creciente interés de los clubes del Top 14 y la Premiership. Hasta aquí, el proceso ha sido positivo: un porcentaje mayoritario del plantel actual ya puso el gancho para seguir por lo menos hasta fines de 2020, aunque otros están todavía en plena negociación. Algunos se quedarán, otros quizás decidan cambiar de aire, como ya lo confirmaron Pablo Matera (Stade Francais), Martín Landajo, Santiago García Botta (ambos acordaron con Harlequins) y en los últimos días Tomás Lavanini (Leicester Tigers).

Estos cuatro -y los que decidan marcharse- se sumarán a sus nuevos equipos después del Mundial de Japón, por lo que el nuevo panorama quedará configurado a partir de noviembre de este año. En diciembre finalizan los contratos del tucumano Ramiro Moyano (el wing surgido en Lince, de 28 años, está en el mejor momento de su carrera y habría clubes ingleses interesados en llevárselo), Nahuel Tetaz Chaparro, Juan Manuel Leguizamón, Santiago González Iglesias, Joaquín Díaz Bonilla y Enrique Pieretto, por lo que la UAR se encuentra en tratativas para extenderlos.

Por lo pronto, ya son 27 los que aseguraron su presencia para después de Japón, entre ellos figuras de peso como Agustín Creevy, Jerónimo de la Fuente y el tucumano Matías Orlando. Eso sí, la mayoría firmó hasta fines de 2021 o 2022, pero algunos (como el propio Orlando) sólo hasta fines del año que viene, por lo que no pasará mucho antes de tener que renegociar los términos. Y a fin de reducir el riesgo de verse primereada por alguna suculenta oferta europea en euros o libras esterlinas, lo más probable es que ya desde 2020 la UAR comience a tantear la renovación de algunos que firmaron hasta 2021. Es eso o convertirse en cartera.

En ese grupo se encuentran Creevy, Tomás Cubelli, Guido Petti, Gonzalo Bertranou, Julián Montoya, Joaquín Tuculet, Emiliano Boffelli y Marcos Kremer, entre otros. Por su parte, entre los que seguirán por lo menos hasta 2022 está el pilar tucumano surgido en Natación, Javier Díaz, junto a otras caras jóvenes que se sumaron en el último tiempo, como Mayco Vivas y Lucio Sordoni. También está el más experimentado Javier Ortega Desio.

¿Y Domingo Miotti? El apertura tucumano de Lawn Tennis, quien recientemente tuvo un debut soñado en la franquicia y se posiciona como el dueño de la 10 en el futuro, todavía no tiene contrato -continúa como becado-, pero seguramente lo tendrá en el corto plazo. Además, al tratarse de un jugador con mucha proyección (cumplirá 23 años este mes), es de esperar que se le ofrezca un vínculo de tres años.

Una cuestión a tener en claro es que todo esto corre de manera independiente a la postura que adopte la UAR sobre la convocatoria a “europeos” a Los Pumas después del Mundial. Si bien la primera intención era sostener la veda, la escasez de resultados llevó a la UAR a flexibilizar la regla y permitir la convocatoria de jugadores que se desempeñen en el Hemisferio Norte (como Nicolás Sánchez) por vía excepcional y sólo en caso de probada necesidad en puestos específicos. La postura sigue siendo darle prioridad a los que juegan en Jaguares o en Argentina XV.

Comentarios