Cartas de lectores
17 Abril 2019

El incendio de Notre Dame

Cualquier monumento histórico que se destruya, sobre todo si tiene la envergadura de Notre Dame, debiera producirnos conmoción y tristeza; por la belleza, por la historia, por los significados. Es evidente que lo ocurrido hiere la sensibilidad de quienes visitaron o planearon visitar esta magnífica catedral. De todas formas he escuchado algunas opiniones patéticas. Lo escuché al embajador de Francia en Argentina decir que ante esta tragedia “la humanidad ha perdido un punto de entendimiento”. ¡Por favor!, el punto de entendimiento lo pierde la humanidad ante cada guerra que ignora, ante cada refugiado sin rumbo al que trata con indiferencia. Escuché a un periodista decir que todos los países deben colaborar con la reconstrucción. Bueno, pero que la Unesco declare “a los niños con hambre patrimonio de la humanidad” y que de los U$S 120 millones anuales que genera la visita a esta catedral, se destine una parte para solventar la miseria de los desposeídos del mundo. Dicen que ha quedado intacta la “Corona de Espinas”; celebro este hecho maravilloso, a sólo unos días de conmemorar la Semana Santa, pero creo que la corona de espinas del Cristo agonizante no se encuentra en el recinto pintoresco de una catedral llena de riquezas, sino que palita por las calles de un mundo despiadado que no encuentra rumbo.

Graciela Jatib

Herencias

¿Puede alguna herencia justificar tantos errores, tanta incapacidad, tanto desmanejo gubernamental? Racionalmente diríamos que no, pero en un país donde la racionalidad, la verdad, no existen ni en la justicia, todo es posible. Ya pasó aquello inventado por Durán Barba, asesor y amigo de Mauricio Macri, que pergeñó aquello de “la pesada herencia” y “la grieta”, con además el peor programa de gobierno para nuestro país, y que siguen hoy, a pie juntillas, todos los funcionarios de la Casa Rosada. Nada dio resultados positivos y tendremos una inflación anual cercana al 50% y pobreza del 35%, con indigencia en 1,5 millón de personas. ¿Recuerdan cuando Macri decía en lo de Mirta Legrand que “resolver la inflación es facilísimo”? Pero ahora, Peña y Bullrich nos piden que los acompañemos porque estamos en la mitad del río, (¡con el salvavidas de plomo que nos puso el FMI!) y que la herencia en realidad sería de los últimos 70 u 80 años. Eso sí, tratando siempre de echar culpas a terceros, aunque además se permiten decir, modestamente, que “tuvieron errores”. Como es muy difícil, sino imposible, resolver tantos despropósitos en este año electoral, se permitirán dejar una gran herencia negativa a los próximos gobiernos y al país todo. Mis años me permiten sugerir que de esta situación solo se sale trabajando. ¿Simple? Sí. Trabajando. Pero los sindicatos deben enseñar a sus afiliados que éste es el único camino, trabajar y dejar trabajar. Argentina no es y nunca fue un país rico. No. Este concepto falso también fue producto de mentiras de algunos gobernantes, y lo peor es que les creímos, y, entonces, pensamos, ¿por qué trabajar si somos ricos? Reitero: ¡basta de mentiras! ¡Basta de corrupción! Y sin banderías políticas, hay que trabajar con responsabilidad, honestidad y eficiencia, ya que es el único camino que nos queda para no tocar fondo.

Federico Vázquez

“El buen pastor”

Desde mi adolescencia, y hasta el día de hoy, pude observar cómo, poco a poco, el edificio ubicado en calle Salta y Mendoza, “El Buen Pastor”, fue deteriorándose como consecuencia del paso tiempo. Lo que llamábamos en ese entonces la “cárcel de mujeres”, que si bien no era tal como se define a estos centros de detención, servía como readaptación de las personas especialmente jóvenes, que delinquían y eran llevadas allí para su readaptación. Este pequeño introito sobre el particular, fue una de las primeras tareas que se nos ocurrió en la actual gestión del intendente, Germán Alfaro, consistente en averiguar en qué situación se encontraba esta propiedad deteriorada en su interior y en estado de abandono, con un exterior que presentaba un estado deprimente. Pues bien, el diario LA GACETA hizo referencia al estado de situación de dicho predio y lectores del medio aportaban con sus sugerencias lo que se podría hacer con el mismo. Al anterior Arzobispo, Monseñor Zecca, envié notas interesándolo para que el Municipio pudiera colaborar o mediante convenio, hacernos cargo; luego siguió la buena predisposición del padre Marcelo Barrionuevo y del actual Arzobispo, Carlos Sánchez, quienes tomaron nuestra idea con sumo interés. La situación legal del inmueble no era fácil: la administración y el cuidado del predio estaba a cargo de una congregación eclesiástica de monjas que hoy se encuentran en Córdoba. Por calle Mendoza, si no entendí mal, funciona una escuela perteneciente al gremio de SEOC, y el resto está bajo la órbita del Arzobispado de Tucumán, que está empeñado en darle un destino a dicho lugar. Y ahora, con la transformación de calle Mendoza al 800 en semi peatonal, le otorga otro aspecto a dicho sector. Allí funciona una capilla a cargo del padre, Marcelo Barrionuevo, con quien tuve amables charlas y me manifestó que se encuentra en pleno anhelo de remodelación del edificio. A la par hay otro predio que sí pertenece a la congregación de monjas citadas. Todo este relato es para poner en público el Editorial de LA GACETA del 08/04/19, como así entre otras las inquietudes del lector Federico Yurcovich del 14 del corriente mes. Es necesario enfatizar que esta gestión hizo todo lo que estaba a su alcance; la predisposición por parte del Intendente sigue en pie, y si no se concretó nada es por razones ajenas a la competencia de este Municipio.

José Luis Avignone

Secretario de Relaciones Institucionales
, Municipalidad de San Miguel de Tucumán

La pobreza y otras miserias

Ante el informe del Indec, que ya no oculta o tergiversa datos como en años anteriores, vemos que la pobreza económica alcanza, lastimosamente, a un 32% de conciudadanos, que llegan apenas a subsistir. Escuchamos hace décadas que este país genera alimentos para millones de personas, pero sin embargo a esta maldita pobreza no la logramos erradicar, sea quien sea el gobernante de turno, por lo que cabe preguntarnos qué causa esta tragedia social que nos duele. Como todo efecto tiene su causa, no es tan engorroso entender la raíz de este penoso problema. Al no existir los principios, aunque mínimamente los haya, que hacen a la esencia y formación de una persona, abarcando dichos principios una adecuada formación educativa y cultural, rectitud, decencia, respeto al prójimo, capacitación y preparación para un trabajo, permiten que incapaces con una cuota de poder creen dinastías familiares o de amigos genuflexos que se insertan, sin mérito alguno, en distintas instituciones públicas, obstruyendo la participación e inclusión de chicos y jóvenes bien preparados y con ansias de contribuir al bien común. Mientras aquellas estén cooptadas por personajes oscuros y sin noción de lo que significa una República, al tiempo que estos vociferan y se rasgan falsamente las vestiduras cuando se enteran de tanta indigencia y pobreza que ellos mismos contribuyeron a crear, seguiremos deambulando sin brújula y dependiendo de gente inepta, que carece de una preparación política, ética y moral. Es así que la miseria educativa, cultural e institucional existente, es el génesis que conlleva a la pobreza económica. Sepamos ejercer, con nuestro voto y con acciones diarias, que estas miserias no carcoman la sociedad justa que anhelamos, y que seamos gobernados por gobernantes prístinos, cualquiera sea el partido político de los que provengan. Nos merecemos algo mejor.

Ramón Alfredo Maldones

Contaminación visual

Cualquier lugar de nuestra provincia se ve contaminado por espacios políticos que invierten el dinero para hacer campaña visual, cuando en realidad lo que deberían es “hacer”. Lamento que a muchos no se les caiga una idea o una propuesta, y solo busquen poder y enriquecerse. En las redes sociales solo se acompañan unos a otros, pero ninguno lleva un posible proyecto de trabajo. Siguen acarreando gente a cambio de la nada misma. ¡Tucumán, ojalá no te contamines y sigas llamándote el Jardín de la República!

María Eugenia Ortiz

Palabras del general Perón

El general Juan Domingo Perón, en 1973, vaticinó en uno de sus discursos que el año 2000 nos encontraría “unidos o dominados”. Sus proféticas palabras hoy se están cumpliendo en nuestra sociedad. En sus libros “Los vende patria” y “La fuerza es el derecho de las bestias”, pone de manifiesto que el pueblo unido vencerá, y advierte si esa unión desaparece, nos estaremos entregando al dominio de fuerzas extrañas, que con su poder económico nos sumirían a sus maquiavélicos designios, como ser las desigualdades sociales, la marginación social, la pobreza estructural y los gobiernos a los que solo les interesará el dinero para enriquecer sus arcas. Y luego, ese dinero será triangulado por dos o tres países y se instalará en los paraísos fiscales, donde lo disfrutarán los que usan el poder para sus propios beneficios. Hoy, el pueblo carece de ideales, sus protestas no son atendidas por los que manejan la política, y prevalece únicamente la caridad y el servilismo.

Jorge Antonio Chaves

Sabín s/n - El Corte - Yerba Buena

Comentarios