Carta de lectores
20 Octubre 2018

Tarifa del agua

Considero que el nuevo régimen tarifario es arbitrario y constituye una burla a la inteligencia y sentido común del consumidor. El señor Giménez Lascano, en su carta del 3 de agosto titulada “Anomalía del Servicio Sanitario”, ya nos había advertido sobre las irregularidades cometidas por el Ersept en la última audiencia pública del Ente. Recibí las dos facturas remitidas por la SAT, ahora de pago mensual, acompañadas por un anuncio en el que consta el cambio de criterio de facturación, de estimación de superficie a “tarifa fija”, según “información actualizada y criterios sólidos” establecidos por el Ersept. Consecuencia: todos los departamentos de mi consorcio pagan exactamente el mismo importe, sin considerar si se trata de un monoambiente de 30 m2 o un amplio departamento de 100 m2 o más,  ni evaluar la cantidad de habitantes de la vivienda. Pero no sólo eso: averigüé en otros consorcios y todos presentan la misma incoherente situación. El reajuste tampoco remite a un criterio racional: aplicaron un aumento de 75% para un departamento de 1 dormitorio, mientras que los más grandes recibieron una actualización menor. Cabe acotar que en un inmueble de propiedad horizontal resulta imposible la instalación de un medidor. Señores de la SAT y del Ersept: Urge la anulación del actual cuadro tarifario y la aplicación de una facturación que asegure realmente “una mayor equidad distributiva y una tarifa transparente”, como declaman engañosamente en la papeleta amarilla adjunta a las boletas.

Ana Lía Toledo

El nazismo y el vaticano

Me pareció excelente el panorama tucumano de Guillermo Monti (19/10) sobre la serie de Netflix “Operación Final”. En la serie se narra la vida del genocida Eichmann pero, cuenta el artículo, por un error de la traductora, los millones de usuarios de Latinoamérica nunca entendieron que Eichmann  vivió en Tucumán: la traductora escribió “Tuckerman”. Solamente quisiera hacer una salvedad sobre el artículo, en aras de buscar la objetividad de los hechos históricos. En él  se habla del compromiso del Vaticano para aceitar “la ruta de las ratas -los nazis-” a través del Puerto de Génova. Quisiera recordar que cuando el entonces obispo de Utrecht protestó contra el nazismo, y tras la carta de los obispos de los Países Bajos condenando “el trato injusto y sin misericordia reservado a los judíos” leído en las iglesias en julio de 1942, los nazis deportaron a multitudes de judíos y de cristianos, entre ellos a una de las grandes mentes contemporáneas: la filósofa Edith Stein. Pío XII comprendió que los reclamos eran contraproducentes para los judíos. Me parece importante mirar las dos caras de la moneda porque a la Iglesia  se la está haciendo responsable de todas las lacras que ha sufrido la humanidad, mientras se ocultan peores vejaciones, protagonizadas por  actores invisibles.

Graciela Jatib[email protected]

Caballos sueltos

Estas palabras están dirigidas a los dueños de los caballos que dejan sueltos en la ruta 341 camino al Siambón: ¿Cómo se hace para dormir tranquilos por sus acciones? Días pasados, mi primo y su familia venían de El Siambón cuando fueron embestidos por tres caballos. Sí, tres caballos, los mismos tres que ví yo, cuando volvía y a los que les toqué la bocina para que no se cruzaran en medio de la ruta. Yo tuve la suerte de contar con la luz del sol, mi primo no; él volvió más tarde y la noche ya cubría la ruta. No fue el único accidentado; una camioneta volcó por la misma causa. Un milagro que hoy estén vivos. Ustedes (los propietarios de esos caballos sueltos) siguen impunes creyendo que como tienen mucho dinero y contactos políticos y en la “justicia”, siempre se saldrán con la suya. Pero no se dan cuenta de que existe una ley física: toda acción tiene un efecto. Y sí, sinceramente me dan mucha pena. No se confundan, tener dinero para lograr que no se investigue y para que la justicia sea ciega, no los hace de la elite. Hoy mi familia está sana y salva; tendrán que trabajar el doble de lo que ya lo hacen para poder arreglar el auto; ¿pero saben qué? ellos pueden dormir sin medicarse, tienen el mejor de los somníferos: la conciencia tranquila. Y eso es algo que ustedes jamás podrán entender. Perdón, sí lo van a entender, tarde o temprano lo van a entender, porque nadie se va de esta vida sin aprender lo que debe aprender, y a ustedes, aunque estén encubiertos por sus fortunas, tarde o temprano la vida les va a enseñar. A la policía les digo: son cómplices porque no quieren ver lo que todos vemos. A los jueces: existe la Justicia y esa también caerá sobre ustedes. Un accidente es algo que no se puede evitar, pero esto es como un crimen. Al señor delegado comunal Juan Stok: ¿qué medidas tomó para evitar estos accidentes? ¿Ya tiene los nombres de los dueños de los animales sueltos? ¿Por qué de nuevo hoy (el lunes pasado) están los animales como si nada hubiera ocurrido? ¿Acaso estamos esperando más muertes? Gracias a José Zabaleta, por haber sido tan solidario y ayudarlos a salir del lugar. Espero que el chico que estaba en la camioneta se recupere pronto.

María Gabriela Vega

"Facultad de derecho tomada"

Son las 11 horas del día 16 de octubre de 2018. El tórrido clima tucumano de la ya avanzada primavera, se manifiesta con todo su esplendor, léase calor agobiante. El ambiente ya se hace irrespirable en las calles céntricas de San Miguel de Tucumán, donde pulula un conglomerado humano vivo, entusiasta y bullanguero. Los vehículos circulan lentamente, atentos los conductores a los zigzagueos de las motocicletas. Esperando con paciencia que se resuelva un atasco en Ayacucho al 400, tengo curiosidad de investigar cuál es el problema y me encuentro con la calle cortada por un cartel que la cruza de lado a lado, donde con más o menos prolijidad han escrito: “Facultad de Derecho tomada” (esto ocurre frente al Rectorado de la UNT). En el país de las incongruencias, esta debe ser de las más notables. Personas que se identifican con el colectivo llamado “universidad”, bastión de la República, vulneran el derecho ajeno a circular libremente, y lo hacen de manera inopinada, sorpresiva y ajena a todo criterio de respeto ciudadano. Cualquier persona de a pie escucha decir “Facultad de Derecho” y se imagina un templo donde se educa para la libertad, la democracia, la República y los derechos ciudadanos. Tomarla por la fuerza seguramente es un acto de desprecio, por la institución y por lo que ella representa. Sin Derecho no hay Estado, y sin Estado no hay Nación. Vuelvo a mi vehículo  con la cabeza gacha. Alguien ha puesto en el parabrisas un volante que dice lo siguiente: “2018, Centenario de la Reforma Universitaria. Buscamos, desde el diálogo y la reflexión, seguir afianzando los principios reformistas y así construir la Universidad argentina de los próximos cien años”. Menos mal.

José Risso

Inundados por líquido cloacal

En diciembre pasado, a causa de la rotura de la colectora que se halla en la intersección de las avenidas Francisco de Aguirre y Siria, mi casa se inundó de líquidos cloacales. Tuvimos que abandonar en forma urgente nuestra vivienda con dos mudas de ropa, porque era imposible vivir en esas condiciones. Mi esposa y yo andamos prácticamente con lo puesto. Hace un mes, la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) reparó la colectora y me ofreció no cobrarme el servicio durante seis meses, a modo de indemnización; me dijeron que es todo lo que podían hacer. La propuesta me parece vergonzosa y humillante. Los muebles y la heladera se han deteriorado, tengo que tirar, por lo menos, seis colchones, desinfectar toda la casa y pintar las paredes. Como consecuencia de esta situación, me he enfermado y ello ha afectado mi carrera artística de más de 50 años sobre los escenarios de la provincia y del país, como folclorista. Me parece una burla, desde todo punto de vista, esta respuesta de la SAT, razón por la que me veo obligado a llegar a instancias judiciales, dado el daño moral que me han provocado.

Rodolfo “El Colorao” Herrera

Día de la madre (I)

Federico “Pichón” Gramajo, en los valiosos escritos que publicó bajo el seudónimo de “El Dimanao Atontao” sobre su Bella Vista natal, relata la inauguración en el Día de la Madre de 1964 -hace 54 años-, de la Escultura a la Madre existente en la Plaza San Martín de Bella Vista (foto superior). Se trata de una obra del escultor Juan Carlos Iramain y fue la primera que se instaló en esa Plaza. La escultura fue encargada por el centro Juvenil Cultural de Bella Vista y es la imagen de una mujer en la que la placidez de su rostro irradia la condición de una joven embarazada. El Centro Juvenil Cultural, que actualmente ya no existe, tuvo en su primera Comisión Directiva como presidente a Farid “Gringo” Juri; como secretario a Jesús “Laly” Díaz; como tesorero a Federico “Pichón” Gramajo y vocales a Froilo Zelarayán, Jorge Díaz, Hugo Ruiz y Oscar Ruiz. En la crónica se dice que el acto de inauguración dio lugar a una emotiva ceremonia, con la participación de delegaciones de varias Escuelas y directivos del Club Social y Club Sportivo Bella Vista.

Manuel Roberto Valeros

Día de la Madre (II)

Nunca le pediría a un hijo que me agradezca haberle dado la vida. He oído muchas veces a madres recordar a sus hijos ese gesto, y también escuché a hijos mencionar gratitud por el mismo acto. En general, los padres tenemos hijos en un primer instante, deseando ser padres, un deseo que se manifiesta como la concreción de algo que nosotros queremos. Cuando decimos “quiero tener un hijo” manifestamos el deseo de tener, un deseo que viene a satisfacernos a nosotros mismos, incluso cuando es fruto del amor. Por mi parte, creo que el “mérito” radica en lo que hacemos por nuestros hijos, luego de traerlos al mundo, y en lo que no hacemos. Nada tienen que agradecerme mis hijos. Los traje al mundo por mi decisión y ellos no me lo pidieron. Es mi obligación cuidarlos, protegerlos, acompañarlos y velar por su felicidad. Cuántas madres dieron vida y luego la quitaron, cuántas otras fueron crueles, egoístas y salvajes. Cuantas tuvieron hijos y no estuvieron con ellos cuando fue necesario. Y así, la lista de ejemplos puede ser amplia. Del mismo modo, cuántos hijos encontraron madres lejos del cordón umbilical. Cuántas madres dieron todo cuanto contaban, por ver sonreír a esas “almitas” a quienes rescataron del abandono. Feliz Día a las mamás y especialmente a aquellas que no los vieron crecer en su panza sino en su corazón.

Norma Nelegatti

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