09 Septiembre 2018
HOY
• A las 18, en el Teatro Mercedes Sosa (San Martín 479).
Hoy, a la hora de la merienda, Katie Viqueira pone la tetera de porcelana en el inolvidable mundo de las canciones de María Elena Walsh. “¡Invitados a tomar el té!” sube al escenario del Teatro Mercedes Sosa: son imágenes y animaciones con sus canciones, que tienen millones de visitas en YouTube y llegan al teatro.
“Es un show audiovisual con música en vivo. Los chicos participan mucho, y se divierten ellos, los padres y los abuelos porque la música de María Elena traspasa generaciones”, afirma la cantante.
Banda e invitados
La acompañan Freddy Hernández en piano y dirección musical; Norbi Córdoba en bajo y Facundo Ferreyra en batería. La producción es de Carlos Mazalán y de Martín Rubio; el diseño es de Martín Mazalán y la asistencia de producción es de Florencia Babouian.
“Esta vez los invitados especiales que subirán a escena son Cecilia Paliza y un coro de niños tucumanos que fueron seleccionados por medio de un casting”, promete, y anuncia que no faltarán las eternas canciones para adultos como “Como los ejecutivos”, “Como la cigarra” o “Serenata para la tierra de uno”.
Recursos del cantante
Viqueira llega por primera vez a la provincia invitada por Paliza, y antes del show tenía previsto dar una masterclass sobre Recursos técnicos e interpretativos para el cantante popular, destinado también a docentes, locutores, actores, entre otros.
“Trato el uso de la voz, el cuidado, la prevención de los problemas vocales, la importancia de entrenar; de que antes de usar la voz tenemos que calentar como lo hace un deportista. Los profesionales de la voz trabajamos con músculos y esos músculos necesitan calentar, enfriar; son un instrumento musical metido en el cuerpo, que recibe muchas influencias”.
La coach induce a los cantantes a que tomen conciencia de comportamiento vocal: “quiero que tomen conciencia de que la conducta vocal cantada y hablada es sumamente importante para la salud; que existe un cuidado de la voz fácil de realizar, que no hay que ir siempre a la clase de canto para recibir los ejercicios; que hay algo que podemos hacer solos, todos los días en la cocina o en la ducha. Quiero que quede la prevención y la capacidad de reconocer cuando ya la voz nos dice ‘basta’”.
Un instrumento
“La laringe es un instrumento muy noble; es un órgano que siempre nos avisa, y casi todo el cuerpo humano es así, pero no escuchamos -afirma-. En cambio la laringe es muy obvia, y nos avisa cuando hablamos de más, cuando hablamos gritando, o después del tercer gol cuando hace rato que no festejamos. Pero en una fiesta, si estamos gritando lo registramos, y el que se dedica al canto, mucho más, porque después viene una disfonía, una angina, tiene que cancelar, se deprime. Y el que no también, porque no es lo mismo un docente que habla disfónico o con voz rasposa, y que está sufriendo por su voz”.
La interpretación
Después de tratar los temas inherentes a la salud de la voz y a la técnica vocal Viqueira propone en su masterclass que los cantantes suban al escenario y se sometan al coaching interpretativo.
“Sugiero opciones para mejorar esa canción -señala-. A partir de ellas cada uno va tomando lo que le conviene para que esté al servicio de esa canción y transmita el mensaje, como todo cantante popular”.
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