Empujones y piñas durante un confuso episodio dentro de un boliche de Yerba Buena

Un hombre de 63 años denunció ante la Policía -y luego le contó a LA GACETA- que sus tres hijos y un sobrino habían recibido una paliza por parte de una patota de rugbistas en un boliche de Yerba Buena. Por otra parte, los deportistas afirmaron que los que se presentan como víctimas, en realidad, manosearon y golpearon a una mujer en el local, y que esto motivó la pelea.

“Mi sobrino sintió un empujón en la espalda. Creyó que era una broma, pero al darse vuelta, se dio cuenta de que era un muchacho que se abría camino a los codazos. Ahí le gritó para preguntarle qué le pasaba y el otro respondió con una trompada que lo tiró al suelo”, relató el denunciante. Según le explicó a la Justicia, uno de sus hijos tiene una fractura en la nariz; y el otro, fuertes golpes en la sien.

“Uno de mis hijos quiso agarrar al agresor para separarlos. Es que mis hijos son cero pelea. Se ve que los otros estaban predispuestos a las agresiones. Yo me voy enterando de a poco de lo que pasó. Estoy afligido. Los patearon en el piso”, agregó. Según la denuncia que presentó, la agresión provino de “siete u ocho sujetos que juegan al rugby en el club Cardenales”. También explicó que la situación ocurrió en el boliche ubicado en avenida Aconquija al 1.400.

“Mi sobrino recibió dos trompadas en la cara; y a uno de mis hijos lo desfiguraron: lo patearon en el piso. Yo pedí que les hicieran el examen de alcohol porque nunca tomaron, porque yo no tomo alcohol. Ellos sólo beben gaseosa. Esta gente que los golpeó está acostumbrada a patotear”, acusó.

La respuesta

“Los hechos no fueron como están contados. Los denunciantes no son las víctimas, sino los agresores. Y nunca hubo siete personas involucradas. Están armando una versión que no se ajusta a lo sucedido para acomodarse mejor ante la situación penal”, respondió el abogado Luis Germain, quien representa a la novia de uno de los denunciados. Según la versión de este letrado, ella es la chica que sufrió el abuso.

“Los denunciantes manosearon a la chica, pero también incurrieron en violencia de género porque la golpearon en el rostro. La tiraron al suelo y ella cayó desmayada. Le deformaron la boca”, agregó.

Según Germain, en este momento ocurrió el enfrentamiento. “Pelearon dos contra tres, porque se metió el amigo del novio de mi defendida. Habían salido a bailar las dos parejas. La versión que dan estas personas intenta encubrir las lesiones que le ocasionaron a la chica, pero mañana nos presentaremos con todas las pruebas que tenemos”, anticipó.

LA GACETA dialogó con el dueño del local, pero este explicó que no estuvo presente en el momento de la pelea, por lo que manifestó que derivó toda respuesta a su equipo legal. El caso se encuentra en manos de la comisaría de Yerba Buena, a cargo de Mauricio Álvarez, y de la fiscala Mariana Rivadeneira.