Boca: el partido es una excusa

BUENOS AIRES.- Más que para enfrentar a Unión (Santa Fe), por la última fecha del certamen, Boca saldrá esta tarde al campo de juego de la “Bombonera” para celebrar el título que había obtenido el martes, sin jugar. En definitiva, el partido ante un alicaído “Tatengue” servirá como excusa para la celebración, que se realizará con una fiesta prolijamente organizada la obtención de la 66ª estrella en la historia del club. El encuentro comenzará a las 16.15; será arbitrado por Mauro Vigliano y televisado por Telefe.

El “Xeneize” se había consagrado el martes, luego de la victoria de San Lorenzo sobre Banfield (1-0). Este resultado desfavorable para el “Taladro” -único equipo que hasta ese momento se mantenía con chances matemáticas de alcanzar a Boca- le permitió al plantel “auriazul” festejar en el hotel de Bahía Blanca donde se alojaba para el partido que habría de jugar al día siguiente contra Olimpo (empató 2-2 con Olimpo).

Boca, un equipo que mostró actitud ofensiva en todas las canchas y variantes para llegar al gol, fue el mejor de la temporada. Entre otros, ganó cuatro de los cinco clásicos que jugó. Su público celebrará esta tarde junto al plantel y junto al cuerpo técnico, encabezado por un ídolo como el “Mellizo” Guillermo Barros Schelotto, quien sumó su 17° título en Boca, el primero como entrenador.

La fiesta en la “Bombonera” tendrá como protagonistas a los hinchas -esos, que trascendieron fronteras y ganaron el reconocimiento a nivel mundial por su aliento incesante-, y al plantel. Se entregarán las medallas a cada jugador y el trofeo, previo al partido.

Barros Schelotto repetirá la formación que presentó ante Olimpo, pese a que los defensores Leonardo Jara y Fernando Tobio arrastran molestias físicas.

Boca apostará una vez más al poderío de sus delanteros Darío Benedetto -hasta el momento, goleador del campeonato, con 19 gritos-, el cordobés Cristian Pavón y Ricardo Centurión, cuyo préstamo finalizará en una semana y el club deberá resolver si le compra su pase al San Pablo de Brasil, tal como reclaman los hinchas.

“Si no ganábamos el campeonato era un fracaso, por la diferencia que habíamos sacado. Pero cumplimos el objetivo”, dijo Benedetto, el delantero que espera transformarse en el máximo artillero del certamen. “Ya tenemos el campeonato, ahora me falta ser el goleador. Hay que buscar la mejor forma de cerrar el torneo”, dijo. (Télam-DPA)