Cartas de lectores
06 Mayo 2017

Einstein y el Che

La entrada de la universidad que se encuentra en los predios del ex ingenio San Pablo, exhibe una gigantografia con la conocida fisonomía del Che Guevara pero con el rostro del eminente científico alemán Albert Einstein. Quizás hayan visto algún paralelismo entre ambos personajes, reconocidos mundialmente, que justifique tan extraña idea. Uno de ellos, conocido mayormente por la imagen preferida en una camiseta con extraordinario éxito de venta, es una figura muy popular entre quienes pretenden mostrar un ejemplo de idealismo al extremo. El otro, uno de los mas grandes científicos del mundo, que en 1905 formuló la Teoría de la Relatividad y puso el universo al alcance de la Humanidad. El primero, gran protagonista de la revolución cubana contra el régimen dictatorial de Fulgencio Batista, pero también principal mentor de la guerrilla en nuestro país, con las tremendas consecuencias ya conocidas. El inicio de la era espacial fue posible gracias a la genialidad del doctor Albert Eistein, que abrió los caminos para que la comunidad científica desarrollara las teorías de los viajes espaciales. Es evidente el abismo entre ambas figuras observando el aporte de cada uno al desarrollo de la Humanidad. No parece un paralelismo, sino mas bien una chanza para lograr un golpe de efecto, usando un recurso muy pobre para la imagen de una universidad.

Roberto Cuello
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Tarjeta Nativa y jubilados

Según una nueva reglamentación del Banco Nación, para acceder a la tarjeta Nativa, el jubilado debe percibir una suma superior a $8.000. Esta normativa impide que miles de jubilados que cobran la mínima puedan recibir esta tarjeta de crédito. Es de notar que Nativa fue ofrecida a los jubilados y es una de las formas de establecer supervivencia. Resulta irrazonable este límite del Banco y la falta de coordinación con Anses. Es imperativo que se revise esta reglamentación y se permita continuar a todos los jubilados el uso de Nativa.

Susana Puga de Unger
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El dos x uno

Se equivoca la Corte Suprema de Justicia de la Nación de aplicar el 2x1 a aquellos que fueran condenados por delitos de Lesa Humanidad. Las aberraciones que cometieron cumpliendo un rol de Estado opresor en la dictadura militar, bajo ningún punto de vista puede equiparse aplicando la ley más benigna con delitos comunes hasta tanto se dicte la sentencia definitiva y que por el tiempo de detención si es aplicable este “beneficio”. Hay que agregar algo más a lo insólito del caso: son las declaraciones de la ex presidenta, cuando manifiesta que en su época esto no hubiera sucedido, ergo quiere decir que a confesión de parte relevo de prueba, cuando tuvieron a su antojo al 90% del Poder Judicial. Lo práctico para que esto no sirva de precedente seria que el Congreso de la Nación derogue este beneficio, si es que subsiste, por lo menos para los delitos de Lesa Humanidad, que son imprescriptibles en el tiempo.

José Luis Avignone
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Atención a internados de PAMI

Desde hace una semana tengo a mi madre internada en un sanatorio de avenida Roca al 400. Cuando llegó se nos pidió que autorizáramos una orden para hacerle una tomografía de pulmón, dado su delicado estado de salud. Se hizo lo solicitado. Se le hizo la tomografía, pero han pasado tres días y el médico encargado de hacer el informe no lo entregó. Creo que cuando alguien está grave se debe actuar con celeridad. ¿O acaso cobran por algo que no hacen? He visto morir viejitos a quienes les habían pedido estudios, pero nunca tuvieron los resultados. Me pregunto si hay abandono de persona por parte de profesionales y del PAMI. ¿A quién recurrir? ¿Acaso debo dejar morir a mi madre? No están cuidando a nuestros viejos. Los están dejando morir. Están acostumbrados a la muerte. Quiero que ayuden a mi vieja, no la dejen morir. Ella quiere volver a casa.

Antonio Rodolfo Alvarez
[email protected]


Cebil Redondo

Quiero manifestar mi impotencia y total enfado
ante la falta de acción del delegado comunal de Cebil
Redondo contra la cerámica radicada en el lugar,
ya que a pesar de numerosos reclamos, orales y escritos
a la comuna, y convenios firmados entre la
empresa y vecinos, la misma continúa transitando
con enormes camiones cargados de tierra por la calle
de entrada al barrio Mirador de la Virgen de
Schoenstatt. Esa situación comenzó durante el primer
mandato del actual delegado, lo que trajo como
consecuencia el enorme deterioro de las calles, la
destrucción total del pavimento realizado para ampliar
la calle de acceso realizado con el plan “Municipio
en los barrios” (que creo que duró dos meses)
y que nunca fue arreglado. Todo ello a pesar del
compromiso de la empresa en hacerlo. Señalo también
el deterioro del único puente de acceso a tres
barrios y que nos comunica con el Camino del Perú.
Y debo añadir el temor de que el mismo termine de
caer con la próxima tormenta: ya no tiene una baranda
y está cuarteado el pavimento. Como ciudadana
ya no me queda otro recurso que hacer pública la
situación que vivimos. Además, ahora corremos el
riesgo de que la tan esperada obra de cloacas no se
llegue a inaugurar porque el peso de los camiones
rompe el pavimento, impactando en los caños que
están debajo. Infiero que se tendrá que gastar dos y
tres veces el dinero del pueblo para reparaciones. El
señor Assan se ampara en la falta de recursos económicos
para reponer baranda o repavimentar calles.
Entonces, ¿cómo pagará la eventual caída de
un puente? ¿No es mejor cuidar lo que se tiene y prevenir
males mayores? Una vez más exijo al delegado
de nuestra comuna que impida el paso de los camiones
antes de que nos quedemos sin pavimento,
sin red cloacal aún sin inaugurar; y, sobre todo, sin
puente de entrada. ¿O está esperando que se produzca
algún hecho desafortunado? 
Quiero manifestar mi impotencia y total enfadoante la falta de acción del delegado comunal de Cebil Redondo contra la cerámica radicada en el lugar, ya que a pesar de numerosos reclamos, orales y escritosa la comuna, y convenios firmados entre la empresa y vecinos, la misma continúa transitando con enormes camiones cargados de tierra por la calle de entrada al barrio Mirador de la Virgen de Schoenstatt. Esa situación comenzó durante el primer mandato del actual delegado, lo que trajo como consecuencia el enorme deterioro de las calles, la destrucción total del pavimento realizado para ampliar la calle de acceso realizado con el plan “Municipio en los barrios” (que creo que duró dos meses) y que nunca fue arreglado. Todo ello a pesar del compromiso de la empresa en hacerlo. Señalo también el deterioro del único puente de acceso a tres barrios y que nos comunica con el Camino del Perú. Y debo añadir el temor de que el mismo termine de caer con la próxima tormenta: ya no tiene una baranda y está cuarteado el pavimento. Como ciudadana ya no me queda otro recurso que hacer pública la situación que vivimos. Además, ahora corremos el riesgo de que la tan esperada obra de cloacas no se llegue a inaugurar porque el peso de los camiones rompe el pavimento, impactando en los caños que están debajo. Infiero que se tendrá que gastar dos y tres veces el dinero del pueblo para reparaciones. El señor Assan se ampara en la falta de recursos económicos para reponer baranda o repavimentar calles. Entonces, ¿cómo pagará la eventual caída de un puente? ¿No es mejor cuidar lo que se tiene y prevenir males mayores? Una vez más exijo al delegado de nuestra comuna que impida el paso de los camiones antes de que nos quedemos sin pavimento, sin red cloacal aún sin inaugurar; y, sobre todo, sin puente de entrada. ¿O está esperando que se produzca algún hecho desafortunado? 

Constanza Rivas
Barrio Mirador de la Virgen de Schoenstatt

Manzana F C 16, Cebil Redondo



De motos y accidentes

He leído las publicaciones de esta semana en LA GACETA sobre motos y accidentes. Están fallando los controles municipales y policiales. Deben trabajar en conjunto, con una legislación municipal y provincial que los ampare. Hay vigentes ordenanzas y leyes que no se hacen cumplir. En el 90% de las motos no usan casco, no tienen patente o la tienen mal puesta; casi todas carecen de luces y espejos, tienen caños de escape ruidosos y muchos conductores están sin papeles. Sabemos que los ladrones de paradas, callejeros, motoarrebatadores, dealers y otros usan estos medios para delinquir. Entonces, ¿qué esperan para hacer cumplir las leyes y combatir los abusos? Puedo aportar diariamente más de 50 fotos de infracciones varias. Con los autos debe ser igual. Sin excepciones. Aplicando estrictamente las leyes se podrán corregir muchas cosas. Hay autos que llevan terribles parlantes y, ante tamaña contaminación acústica, ante una eventual emergencia, no podrán escuchar nunca una ambulancia para darle paso. Mucho menos, respetar el descanso de sus vecinos.

Dante Falcón
Ayacucho 3646
San Miguel de Tucumán


La historia de Lucrecia

Sigo leyendo y conmoviéndome con la historia de la joven Lucrecia Jordanoff (LA GACETA, 4/5). Heroína tucumana que pese a haber nacido sin brazos hace lo imposible para que las barreras físicas no se conviertan en un obstáculo para su futuro. La adalid, que debe ser referente y aliciente de muchos, es paciente del traumatólogo Carlos Juárez (excelente médico y persona), que con su gran sentido de la solidaridad y fe cristiana clama por ayuda para su paciente, que sólo necesita y pide trabajar. Haciéndome eco de su reclamo, reitero lo que vengo sosteniendo desde hace años: que no existe la discapacidad. No existe la discapacidad; el hombre nace y es siempre entero, completo, capaz, por que es hecho a imagen y semejanza de Dios; si estamos vivos es para vivir del todo, con todo. Se puede decir, sin miedo a las palabras, que somos rengos, ciegos, mudos, paralíticos, que tenemos uno o varios problemas físicos y psíquicos. Pero que no somos capaces, eso sí que no. Podemos tener enormes dificultades, pero todos sabemos que algo maravilloso, misterioso e innegable, yo diría que “La Mano de Dios” nos ayuda a pelear, a vencer, a no flaquear. Debemos estar siempre preparados, alertas para luchar más o más. “...No te sientas vencido aun vencido...”, dice el poeta y tiene razón. Debo decir que en la mayoría de los casos no estamos solos; nuestros hijos, mujeres, padres, hermanos y amigos nos rodean y nos ayudan al considerarnos uno más del grupo familiar, y se nos convierte en personas iguales a los demás. El orgullo o la dignidad de ser persona hace que antes que aceptar una expresión de lástima, seamos capaces de mordernos y no pedir ayuda. “...La mano del piadoso nos quita siempre honor...” dice el poeta (Machado), y lo comprendo. No puedo hablar por el ciego, que estudia en Braille y se gana la vida, ni por el sordo, que lee los labios y se integra así al mundo; o por el paralítico, que por andar en sus muletas y en su silla de ruedas, desarrolla un tórax de campeón. No puedo hablar por ellos, pero los comprendo y valoro todo el esfuerzo, las garras y el sudor que necesitan para hacerlo. ¿Discapacidad? No, eso es supercapacidad, es heroísmo. Siempre es posible enfrentar a las adversidades y ganarle. Siempre es posible mejorar. Se puede… Siempre se puede, mi querida Lucrecia...

Jorge B. Lobo Aragón
[email protected]


El azar

No me gustan los juegos de azar, pese a que soy “suertudo”; gané un viaje a Cancún para mi hija, un auto e innumerables rifas truchas de beneficencia. Como la calle está dura, decidí probar fortuna. Compré dos cartones de telekino, el lance era lindo: $25 millones en juego. ¿Saben cuántos puntos hice? 14. Me faltó el 24. Y me digo: “bueno, me salvo con el segundo premio, que debe ser la mitad. ¡Ja, ja!. Gané $3.818, de los que me descontaron un 33% para la AFIP; vendedores ambulantes, SAT, propinas, para los inundados del sur, para repavimentación, EDET y alfa para los caballos del hipódromo. La única satisfacción fueron las fotos y el aplauso de los empleados de la Caja Popular cuando me pagaron sólo $2.700. Traté de averiguar las causas de tantos descuentos, y me respondieron: “señor, confórmese con lo que le dan. Antes al segundo le daban un chancho y dos gallinas. Desde 1974 que se hizo la ley para premiar al segundo. No sea desagradecido, agarre todos esos papeles que le dimos y úselos de pañuelo cuando vaya a llorar a la Iglesia. Y siga participando”.

Francisco Amable Díaz
Pedro Sal 1.180
San Miguel de Tucumán


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