03 Mayo 2017
BUENOS AIRES.- El complicado panorama económico y social de la provincia de Santa Cruz ha llevado a solicitarle al gobierno nacional un salvataje para poder pagar los salarios. Ayer, el ministro de Modernización de la Nación, Andrés Ibarra, consideró que no es justo que todos los argentinos financien a quienes hicieron las cosas mal durante tantos años, al referirse a las finanzas de la provincia de Santa Cruz, y dijo que quieren ver un plan fiscal serio.
Expresó su deseo de que las autoridades provinciales, encabezadas por la gobernadora Alicia Kirchner, se comprometan públicamente a “llevar adelante un plan fiscal que valga la pena para que se ponga en marcha la provincia”.
Ibarra lamentó que durante tanto tiempo se hayan dilapidado los recursos de la provincia de Santa Cruz sin crear empleo. Se habla de $ 670 millones recibidos en regalías petroleras; $ 460 millones en contratos de obra pública entre 2007 y 2015 y una ayuda mensual del gobierno nacional que ronda los $ 25 millones por día. La provincia tiene 340 mil habitantes y se ha confirmado que casi el 48% tiene un empleo en el Estado.
El funcionario nacional dijo que cualquier auxilio está sujeto a una serie de condiciones “que demuestren la credibilidad de un plan”, en el cual se comprometa la gobernadora y reconoció que “el Estado no puede desentenderse en la medida que la provincia diga que se compromete”.
La realidad
Todavía el gobierno nacional no ha podido hacer una radiografía completa de las finanzas santacruceñas. Hay números que no cierran. Según un informe que Clarín publicó hace unos días “entre lo que informa el gobierno santacruceño y lo que realmente ingresa a sus arcas hay una diferencia de $ 1.200 millones en el primer trimestre de este año”. Pero además detectó que hay una diferencia anual superior a los $ 5.000 millones entre lo que se paga de sueldos y lo que se consignó en el presupuesto 2017.
Con motivo del Día del trabajador, la gobernadora Kirchner envió un mensaje a través de la redes sociales. “...En estos momentos necesitamos la ayuda de todos los sectores para defender cada uno de los puestos de trabajo, sean del ámbito público o privado. Porque despedir trabajadores no resolvió nunca nada, el trabajo es generador de riqueza, pero principalmente el trabajo es el derecho a la dignidad”. Un mensaje claro para le gobierno nacional, aunque un poco confuso dado que desde hace semanas están con medidas de fuerza varios sectores (docentes, jubilados, judiciales) que reclaman paritarias o el pago a término de los salarios y pensiones.
La web de Periodistas Independientes (OPI) de Santa Cruz publicó ayer que algunos municipios como el de Caleta Olivia y Río Gallegos, comienzan a tener problemas de caja en proximidad del pago de salarios y no reciben señales de ayuda de la provincia. “El Intendente de esta capital, Roberto Giubetich dijo que no podrá pagar los sueldos porque la recaudación cayó un 50% y no recibe el aporte de coparticipación provincial”, informaron.
A esto se le suma la situación de la docencia. En Santa Cruz todavía no empezaron las clases.
Los docentes, nucleados en el gremio ADOSAC decidieron en su Congreso la realización de un paro por 96 horas, la exigencia del pago de los haberes adeudados y un pedido de paritarias de forma inmediata, consignó OPI. Los judiciales permanecen en carpa frente a Tribunales y también determinaron la realización de un paro por 120 horas, mientras que los jubilados hace más de un mes que acampan frente a la Caja de Previsión Social.
Además los santacruceños ya avecinan un nuevo frente de conflicto. Esta vez vinculado con una de las actividades medulares: el petróleo. Según publica ese medio, se viven momentos de incertidumbre en la actividad con cortes de rutas, reclamos por despidos y baja en la actividad exploratoria. “Debido a ello, la cúpula del Sindicato de Petroleros Privados de Santa Cruz, se encuentra en Buenos Aires negociando una flexibilización laboral para el sector petrolero de Santa Cruz, algo que el propio Claudio Vidal, secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas Privado Santa Cruz, ha manifestado que no van a aceptar. (Especial)
Expresó su deseo de que las autoridades provinciales, encabezadas por la gobernadora Alicia Kirchner, se comprometan públicamente a “llevar adelante un plan fiscal que valga la pena para que se ponga en marcha la provincia”.
Ibarra lamentó que durante tanto tiempo se hayan dilapidado los recursos de la provincia de Santa Cruz sin crear empleo. Se habla de $ 670 millones recibidos en regalías petroleras; $ 460 millones en contratos de obra pública entre 2007 y 2015 y una ayuda mensual del gobierno nacional que ronda los $ 25 millones por día. La provincia tiene 340 mil habitantes y se ha confirmado que casi el 48% tiene un empleo en el Estado.
El funcionario nacional dijo que cualquier auxilio está sujeto a una serie de condiciones “que demuestren la credibilidad de un plan”, en el cual se comprometa la gobernadora y reconoció que “el Estado no puede desentenderse en la medida que la provincia diga que se compromete”.
La realidad
Todavía el gobierno nacional no ha podido hacer una radiografía completa de las finanzas santacruceñas. Hay números que no cierran. Según un informe que Clarín publicó hace unos días “entre lo que informa el gobierno santacruceño y lo que realmente ingresa a sus arcas hay una diferencia de $ 1.200 millones en el primer trimestre de este año”. Pero además detectó que hay una diferencia anual superior a los $ 5.000 millones entre lo que se paga de sueldos y lo que se consignó en el presupuesto 2017.
Con motivo del Día del trabajador, la gobernadora Kirchner envió un mensaje a través de la redes sociales. “...En estos momentos necesitamos la ayuda de todos los sectores para defender cada uno de los puestos de trabajo, sean del ámbito público o privado. Porque despedir trabajadores no resolvió nunca nada, el trabajo es generador de riqueza, pero principalmente el trabajo es el derecho a la dignidad”. Un mensaje claro para le gobierno nacional, aunque un poco confuso dado que desde hace semanas están con medidas de fuerza varios sectores (docentes, jubilados, judiciales) que reclaman paritarias o el pago a término de los salarios y pensiones.
La web de Periodistas Independientes (OPI) de Santa Cruz publicó ayer que algunos municipios como el de Caleta Olivia y Río Gallegos, comienzan a tener problemas de caja en proximidad del pago de salarios y no reciben señales de ayuda de la provincia. “El Intendente de esta capital, Roberto Giubetich dijo que no podrá pagar los sueldos porque la recaudación cayó un 50% y no recibe el aporte de coparticipación provincial”, informaron.
A esto se le suma la situación de la docencia. En Santa Cruz todavía no empezaron las clases.
Los docentes, nucleados en el gremio ADOSAC decidieron en su Congreso la realización de un paro por 96 horas, la exigencia del pago de los haberes adeudados y un pedido de paritarias de forma inmediata, consignó OPI. Los judiciales permanecen en carpa frente a Tribunales y también determinaron la realización de un paro por 120 horas, mientras que los jubilados hace más de un mes que acampan frente a la Caja de Previsión Social.
Además los santacruceños ya avecinan un nuevo frente de conflicto. Esta vez vinculado con una de las actividades medulares: el petróleo. Según publica ese medio, se viven momentos de incertidumbre en la actividad con cortes de rutas, reclamos por despidos y baja en la actividad exploratoria. “Debido a ello, la cúpula del Sindicato de Petroleros Privados de Santa Cruz, se encuentra en Buenos Aires negociando una flexibilización laboral para el sector petrolero de Santa Cruz, algo que el propio Claudio Vidal, secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas Privado Santa Cruz, ha manifestado que no van a aceptar. (Especial)
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