30 Abril 2017
BARRIO YRIGOYEN. Techo y LA GACETA construyeron un módulo en 2016. la gaceta / foto de franco vera (archivo)
“Buscamos visibilizar la falta de oportunidades a la que se enfrentan millones de vecinos y vecinas todos los días. Queremos ciudades para todos y todas, en donde los asentamientos estén social y urbanamente integrados”. Gabriela Arrastua, directora de Áreas Sociales de Techo en Argentina, remarcó las necesidades de que se conozca cómo viven tres millones de ciudadanos y sobre todo, de que esas condiciones se transformen.
La organización viene trabajando para que eso suceda mediante el impulso de programas de desarrollo comunitario. Para sostenerlos, entre el 5, 6 y 7 de mayo se llevará adelante la onceava colecta anual en 30 ciudades de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Corrientes, Chaco, Misiones, Tucumán, Salta, Córdoba, Neuquén y Río Negro.
Para poder desarrollarla, Techo convoca a 9.000 voluntarios y voluntarias a movilizarse por las calles de todo el país.
El dinero obtenido durante las tres jornadas permitirá que se sigan financiando iniciativas de oficios, emprendedores, viviendas de emergencia, apoyo escolar y proyectos de soluciones definitivas para el acceso a los servicios básicos e infraestructura.
“Los asentamientos llevan, en promedio, más de 50 años sin respuestas integrales. Aún así, los vecinos se organizan y se movilizan constantemente para reivindicar sus derechos. Levantan sus voces, pero muchas veces no son escuchados”, destacó Arrastua.
Quienes deseen donar o participar como voluntario deben entrar en la página web oficial techo.org.ar/colecta o llamar al número de teléfono 0810-888-83246.
A fines del año pasado, Techo dio a conocer un relevamiento efectuado en la provincia sobre los asentamientos irregulares. Para ello, durante seis meses, concretó encuestas, entrevistas y recorridas por los barrios (desde octubre de 2015 que la organización trabaja de manera continua en Tucumán).
El estudio concluyó que en San Miguel de Tucumán más de uno de cada 10 habitantes viven en asentamientos informales.
Registraron 67 agrupaciones de viviendas de ese tipo en la zona, en las que viven 18.945 familias; es decir, 87.150 ciudadanos (utilizando para el cálculo la media nacional de 4,6 miembros por cada grupo familiar).
Se tomaron como asentamientos, según la organización, los conjuntos que como mínimo tuvieran ocho familias, cuya mayoría no contaran con títulos de propiedad ni con acceso regular a al menos dos servicios básicos.
En total, se relevó a aproximadamente el 36% de la población de la provincia. La mayoría de los asentamientos, detalla el informe, se encuentran alejados de la “ciudad formal”; es decir, que sus habitantes deben viajar hasta una hora, por ejemplo, para acceder a un hospital u otros servicios.
Distinguieron los asentamientos informales de las villas, por su tipología. Los primeros son el 94% en la capital y se caracterizan por ser una continuación de la trama de la ciudad y, además, son menos poblados que las villas. Cuentan con calles trazadas y con espacios verdes. Las segundas, en cambio, alcanzan el 6% y son más irregulares en sus formas.
La organización viene trabajando para que eso suceda mediante el impulso de programas de desarrollo comunitario. Para sostenerlos, entre el 5, 6 y 7 de mayo se llevará adelante la onceava colecta anual en 30 ciudades de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Corrientes, Chaco, Misiones, Tucumán, Salta, Córdoba, Neuquén y Río Negro.
Para poder desarrollarla, Techo convoca a 9.000 voluntarios y voluntarias a movilizarse por las calles de todo el país.
El dinero obtenido durante las tres jornadas permitirá que se sigan financiando iniciativas de oficios, emprendedores, viviendas de emergencia, apoyo escolar y proyectos de soluciones definitivas para el acceso a los servicios básicos e infraestructura.
“Los asentamientos llevan, en promedio, más de 50 años sin respuestas integrales. Aún así, los vecinos se organizan y se movilizan constantemente para reivindicar sus derechos. Levantan sus voces, pero muchas veces no son escuchados”, destacó Arrastua.
Quienes deseen donar o participar como voluntario deben entrar en la página web oficial techo.org.ar/colecta o llamar al número de teléfono 0810-888-83246.
A fines del año pasado, Techo dio a conocer un relevamiento efectuado en la provincia sobre los asentamientos irregulares. Para ello, durante seis meses, concretó encuestas, entrevistas y recorridas por los barrios (desde octubre de 2015 que la organización trabaja de manera continua en Tucumán).
El estudio concluyó que en San Miguel de Tucumán más de uno de cada 10 habitantes viven en asentamientos informales.
Registraron 67 agrupaciones de viviendas de ese tipo en la zona, en las que viven 18.945 familias; es decir, 87.150 ciudadanos (utilizando para el cálculo la media nacional de 4,6 miembros por cada grupo familiar).
Se tomaron como asentamientos, según la organización, los conjuntos que como mínimo tuvieran ocho familias, cuya mayoría no contaran con títulos de propiedad ni con acceso regular a al menos dos servicios básicos.
En total, se relevó a aproximadamente el 36% de la población de la provincia. La mayoría de los asentamientos, detalla el informe, se encuentran alejados de la “ciudad formal”; es decir, que sus habitantes deben viajar hasta una hora, por ejemplo, para acceder a un hospital u otros servicios.
Distinguieron los asentamientos informales de las villas, por su tipología. Los primeros son el 94% en la capital y se caracterizan por ser una continuación de la trama de la ciudad y, además, son menos poblados que las villas. Cuentan con calles trazadas y con espacios verdes. Las segundas, en cambio, alcanzan el 6% y son más irregulares en sus formas.
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