Una jornada para ser libremente mujer

Una jornada para ser libremente mujer

“Casa Valentina”, una de las obras más exitosas del año, llega a Tucumán con un elenco de grandes figuras, dirigido por Muscari.

MILITAR BROMISTA. Roly Serrano compone a Gogó en “Casa Valentina”. Detrás aparece Fabián Vena (Georgina). MILITAR BROMISTA. Roly Serrano compone a Gogó en “Casa Valentina”. Detrás aparece Fabián Vena (Georgina).
30 Abril 2017
Hace medio siglo existió en Estados Unidos la Casa Susanna, un lugar donde un grupo de encumbrados hombres del poder se reunía en secreto para vestirse de mujer y encontrar su femineidad lejos de la mirada cuestionadora del resto de la sociedad.

La historia de este espacio permaneció oculta hasta muchas décadas después, cuando se descubrieron fotos del sitio que dispararon investigaciones, libros y, hace tres años, una obra teatral. “Casa Valentina” fue escrita por Harvey Fierstein (el mismo de “La jaula de las locas” y de “Algo en común”) y José María Muscari la estrenó en 2016, convirtiéndola en uno de los mayores éxitos de taquilla. Hoy y mañana (pese al feriado), se la verá en el teatro Mercedes Sosa con un elenco que integran el propio director, Boy Olmi, Fabián Vena, Diego Ramos, Mario Pasik, Pepe Novoa, Roly Serrano, Cristina Alberó y Paula Morales. Los personajes son referencia del poder: hay banqueros, jueces, militares y activistas políticos que, sin perder su condición heterosexual, disfrutan vestirse como mujeres, lo que se conoce como crossdressers (experiencia diferente al travestismo).

“No conocemos quiénes eran las personas reales, no eran conocidos, pero cada vez que se aborda una obra, uno investiga su personaje y le crea una historia. Cada uno tomó el nombre y la condición: en mi caso, soy un coronel del Ejército que está casado, con una educación castrense y rígida, y que se transforma en Gogó, una gorda juguetona muy lúdica y bromista”, explica Serrano, en diálogo con LA GACETA.

En su experiencia lo más difícil fue trabajar la femineidad. “Porque nuestra cultura es muy machista y desde niños tenemos la cabeza formateada en no llorar y en ocultar la sensibilidad hasta el último momento”, explicó. “No estamos acostumbrados a lidiar con lo que representa la mujer, y es hermoso descubrir que uno tiene sus componentes y puede sacarlos afuera. Fue un proceso maravilloso, porque encontrar mi femenino me ayudó a mejorar mi masculino”, asevera Serrano.

El actor disfruta de la respuesta del público a la propuesta: “no se dan muy seguidos éxitos como este y uno trata de exprimirlos al máximo, pero también me entristece ver que hay muchos compañeros que hacen grandes espectáculos a los que no les está yendo bien, porque la situación económica no es buena”. “Cada vez que hay adversidad se mejora la calidad de las propuestas, porque uno no se relaja y agudiza los sentidos”, afirma.

“Ejercicio de aceptación”

Pasik se sumó a “Casa Valentina” para esta gira, con la obra ya probada. “Por otros compromisos no pude estar de entrada, pero logré incorporarme ahora y en el personaje de Valentina, que es la anfitriona de esta reunión. Es una obra muy profunda, que propone un ejercicio de la aceptación. Eso es lo que le pasa al público, que llega atraído por ver a estos actores que ha visto tantas veces, ahora componiendo mujeres y descubrir qué tal caminan con tacos. Son riesgos que uno encara. La gente se divierte mucho, se afloja y les llega un mensaje; sale muy conmovida”, destaca.

Pasik elogia al autor: “es una obra de gran altura, que está hecha con mucho compromiso, acorde a la larga trayectoria de cada uno”. La trama que comienza como comedia luego se complica con un conflicto que aparece en escena. “Así que no es una noche de fiesta, sino una reunión para hablar de cosas profundas y de las ideas de cada personaje, de su identidad más allá de lo que es común y que para algunos es inexplicable o difícil de entender”, aclara.

“Mi trabajo actoral no es parecer una mujer, sino entender quién está adentro de ese personaje en esta propuesta, cuál es su carácter, por dónde aparecen lo femenino y lo masculino. Me gusta hablar de capas de pintura: las primeras que puse apuntaron a entender qué le pasaba a Valentina en un día como el que describe el texto, con el contexto moral, económico y policial que la rodea. Mis anteriores construcciones de mujeres siempre fueron en televisión y en comedias; en teatro es otra responsabilidad”, precisa.

La posibilidad de llegar al escenario del Mercedes Sosa es especialmente atractiva para Pasik. “Es una obra para un espacio grande, que crece con el lugar y ya está asentada con un elenco genial. Tucumán tiene una gran tradición teatrera, con un público muy informado y ávido, que no se decepcionará con esta propuesta”, señala a partir de las numerosas veces que estuvo en la provincia (la última fue hace dos años, con “Aeroplanos”, de Carlos Gorostiza, y junto a Rodolfo Ranni).

DOS FUNCIONES

• Hoy y mañana, ambas a las 20, en el teatro Mercedes Sosa (San Martín 479).

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios