El complejo ADN musical de un talento único

El complejo ADN musical de un talento único

28 Abril 2017

Pedro Aznar tenía 12 años cuando, en 1971, formó una banda con amigos del barrio, a la que bautizó Life. Tocaba una guitarra eléctrica amarilla. Han pasado más de cuatro décadas y casi 40 discos (como solista o en grupos), recorrió el mundo con sus sonidos, se reinventó, aprendió con maestros de todos los instrumentos, creció, se apropió de nuevos ritmos y con todo eso alumbró “Contraluz”, su último álbum, que esta noche presentará en el Teatro Mercedes Sosa. Llega coronado con el premio Konex y varios Gardel, y especialmente cobijado por una cohorte de fans que lo reivindican como el creador por excelencia de la fusión entre el rock y la música latinoamericana, con toques del pop, la electrónica y el jazz.

Su más reciente trabajo es una renovada apuesta por esa línea sonora conceptual, junto con una poesía en la que aparecen el milagro de la vida, el dolor de la despedida, los espejismos del deseo, los triángulos amorosos, los desafíos de la madurez, la embriaguez del enamoramiento y hasta la incógnita que plantean los avances en la creación de la inteligencia artificial. En el diseño de arte está la mano del tucumano Alejandro Ros, con fotos tomadas por el propio Aznar, que ya ha realizado exposiciones de sus trabajos.

“Es un disco que tiene un apoyo muy fuerte en sus letras; fueron ellas, en muchos casos, las disparadoras de los temas. Las canciones terminaron reflejando las cosas que me ocupan y preocupan en estos últimos tiempos. Hablan de amor y de pérdida, de espejismos, de saber entregarse a las vueltas del destino por sinuosas que parezcan, de las promesas y peligros de las tecnologías exponenciales, que trazan una delgada línea entre un potencial de cambio positivo extraordinario para la humanidad y su posible desaparición. Y, frente a todo esto, del lugar de lo humano en el mundo y de nuestra responsabilidad de hacernos las preguntas más necesarias”, responde a una pregunta de LA GACETA vía correo electrónico, mientras hace las valijas en México para regresar al país y luego volar rumbo a Tucumán.

- ¿Se puede pensar actualmente la música sin hablar de fusión?

- Todas las músicas, hoy, son mestizas. No hay tal cosa como géneros puros y eso es algo bueno. En Latinoamérica toda, el rock se ha ido fusionando con las músicas locales, tomando elementos de los folclores y ha dado resultados excelentes. En el rock uruguayo se respira el candombe y la milonga; en el chileno, la cueca; en el argentino, el tango, la zamba y la baguala; en el colombiano, la cumbia, y así... En “Contraluz” buscaba hacer una colección de canciones que fueran muy estimulantes y divertidas de tocar en vivo, y creo que se logró muy bien. En la grabación suenan frescas y directas, y en el escenario son un cañón. Empezamos a mostrarlas como adelanto hace dos años, antes de grabarlas, y hubo una respuesta buenísima en los conciertos. Eso es algo poco usual, ya que se necesita tiempo para que música nueva “se haga amiga”. Sin embargo, pareció ser amor a primera vista. Y ahora que el disco ya tiene su tiempo de rodaje, lo que pasa en vivo es todavía mejor.

- ¿Influye la respuesta del público en vivo en la forma de ir presentando el show?

- ¡Sin lugar a dudas! El público es un factor fundamental y modifica fuertemente lo que pasa sobre el escenario. En Tucumán tengo un público hermoso, muy atento y efusivo, y eso nos hace dar conciertos tremendamente disfrutables a uno y otro lado del telón.

- ¿Qué te aportó este disco?

- Es una consolidación de mi trabajo como compositor, arreglador e intérprete. Creo que “Quebrado”, que salió hace casi 10 años, fue un disco bisagra en mi carrera, un momento de reafirmación de una propuesta artística que, a partir de ahí, se ha ido intensificando y creciendo.

- La variedad estilística del álbum es el sello de tu carrera. ¿Lo seguirá siendo?

- Lo que vengo proponiendo desde “Cuerpo y alma” (de 1998), es una fusión de rock con la música de raíz latinoamericana. En “Contraluz” se materializa una nueva escala de ese concepto, con la diferencia de que, en este caso, es toda música compuesta por mí. En este disco conviven rock, pop-rock, balada, tango-bolero, ranchera, zamba, electrónica y madrigal, que es un tipo de canción medieval italiana. Cada una tiene su propio tratamiento, su propia atmósfera y sonoridad, pero el hilo conductor es mi visión.

- En tu poema “A George” (dedicado al fallecido beatle George Harrison) escribís “tu música se grabó en mis células”. ¿Qué otras músicas tenés en tu ADN?

- ¡Tengo un ADN bastante curioso y complejo! Hay rock, tango, folclore de distintas partes de América, bagualas, vidalas, blues, ritmos del Brasil, música clásica de los siglos XVI al XXI, jazz, soul, rhythm and blues y músicas tradicionales de Japón, India, Medio Oriente y África.

- ¿Te afectó de algún modo la polémica alrededor del Indio Solari y su recital en Olavarría?

- Creo que nos hizo reflexionar a todos sobre los riesgos involucrados en eventos tan masivos. Más allá de eso, en las opiniones que se vertieron escuché cosas muy atinadas y disparates tendenciosos y muy poco serios.

- Se están cumpliendo aniversarios redondos de discos fundacionales del rock, argentino y mundial. ¿Qué te pasa cuando revisitás esa música, descubrís algo nuevo, te sorprende algo?

- Cuando un disco es recordado a más de veinte años de su publicación suele ser porque tiene valores perdurables. Este año se cumple medio siglo del inicio del rock argentino y es indudable que ha hecho un aporte imborrable a la cultura latinoamericana. También es el cincuentenario del álbum de The Beatles “La banda del club de los corazones solitarios del Sargento Pepper’s”, y nadie podría discutir la importancia que tuvo como disco iniciador o catalizador de tendencias sociales y estilos musicales.

producciones emblemáticas
 
VIVIR EN EEUU.   Grabó cuatro álbumes con Pat Metheny Group.
 
RADIO PINTI. En 1991 trabajó con el actor y con Charly García.
 
SOLISTA. Su carrera comenzó en 1982, a los 23 años.
 
SERÚ GIRÁN. En 1978 salió el primer disco del histórico grupo.
 
EN EL CINE. Hizo bandas de sonido de varias películas.
 
CUERPO Y ALMA. El disco de 1998 implica un giro en su sonido.
  
QUEBRADO. En 2008 se alza con tres Gardel. 
 
POR SPINETTA. “Puentes amarillos” es un tributo al Flaco.
 
SUS POEMAS. Publicó “Pruebas de fuego” y “Dos pasajes a la noche”.
 
FOTÓGRAFO. Desde 2014 realiza exposiciones de sus imágenes.

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> Producciones emblemáticas 

VIVIR EN EEUU.   Grabó cuatro álbumes con Pat Metheny Group. 

RADIO PINTI. En 1991 trabajó con el actor y con Charly García. 

SOLISTA. Su carrera comenzó en 1982, a los 23 años.

SERÚ GIRÁN. En 1978 salió el primer disco del histórico grupo. 

EN EL CINE. Hizo bandas de sonido de varias películas.

CUERPO Y ALMA. El disco de 1998 implica un giro en su sonido. 

QUEBRADO. En 2008 se alza con tres Gardel. 

POR SPINETTA. “Puentes amarillos” es un tributo al Flaco. 

SUS POEMAS. Publicó “Pruebas de fuego” y “Dos pasajes a la noche”.

FOTÓGRAFO. Desde 2014 realiza exposiciones de sus imágenes.


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