Una auxiliar de Campero, en la mira

Una auxiliar de Campero, en la mira

Iramain fue exonerada en 2008 del Gobierno y colabora en el área social de la Municipalidad

21 Marzo 2017
Acorralada por la sorpresa y desmoronada por el llanto, Silvia Iramain dice que esto le pasa por meterse con gente del poder. Unos 20 días antes de este interrogatorio periodístico, un tucumano subía las escalinatas de los tribunales federales de Buenos Aires para ingresar una denuncia en su contra, por la presunta comisión de los delitos de tráfico de influencias, administración fraudulenta, violación de los deberes de funcionario público, abuso de autoridad, falsificación de instrumento público y cohecho.

La acusación involucra, también, al intendente de Yerba Buena, Mariano Campero; a la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Carolina Stanley; y a un funcionario suyo, Matías Kelly. Los cuatro, según el dirigente político Sebastián Luna, tendrán que contestarle a la Justicia porqué Iramain trabaja para el Gobierno, si fue exonerada de la administración pública. De acuerdo a la acusación, Iramain tendría dos documentos de identidad, dos CUIL y dos CUIT diferentes. Luna entregó documentación que probaría que la mujer posee un DNI con el número 17.678.309 y otro con el número 17.578.309 (la diferencia radica en el tercer dígito). El último pertenecería a otro ciudadano, Eduardo Luis Rodríguez.

También proporcionó evidencias de que Iramain se encontraría registrada en la Anses con los números de CUIL 27-17678309-0 y 27-17578309-7. El primer CUIL data de 1999. El segundo fue dado de alta en agosto de 2008, y respondería al presunto DNI falso. Con ese número, supuestamente usurpado, se habría registrado ante la AFIP, según el denunciante.

El CUIT es un número que utiliza la AFIP para identificar a las personas. El CUIL es asignado por la Anses para los casos de relación de dependencia. Actualmente, Iramain figura como dada de alta en la AFIP. Para la Anses, en cambio, tiene una certificación negativa; eso significa que no registra aportes como trabajador en relación de dependencia. Luna sospecha que Iramain falsificó su identidad para acceder a un cargo público. Según él, presta servicios para el Gobierno provincial, y desarrolla su actividad en la Municipalidad.

Con respecto a la exoneración, Iramain fue destituida, en 2008, del Gobierno. ¿La razón? Según un decreto que lleva la firma del entonces gobernador, José Alperovich, habría intentado adjuntar un decreto apócrifo. Aunque ella interpuso un recurso de reconsideración, el castigo quedó firme. Según Luna, Iramain es quien maneja operativamente los beneficios. Para corroborar esa afirmación, le ha entregado a la Justicia, además, unas grabaciones ocultas. En esos videos, Iramain dice que ella ha sido “puesta ahí” por el Gobierno nacional. No obstante, la mujer asegura que no es jefa del área.

- Según una denuncia, usted es la titular de la dependencia.

- No. Eso es totalmente falso. Estoy prestando servicios.

- ¿Quién es su empleador?

- Esteee, yo no, yo, yo estoy prest..., yo estoy prestando servicios acá. Soy de la Provincia, pero estoy prestando servicios acá.

- ¿Cuál es su número de DNI?

- Y... ¿por qué esa pregunta? No la entiendo.

- En esa acusación se sugiere que usted falsificó documentación.

- Ah... muy bien. ¡Qué bárbaro!

- ¿Fue exonerada del Estado?

- Esto es siniestro. Yo al Estado no le gasto nada. No manejo ni un peso. Colaboro como voluntaria, porque estoy vinculada y provengo de movimientos de la Iglesia.

- ¿Pero ha sido exonerada?

- Tengo un juicio abierto en contra de Alperovich. Es totalmente distinto. Y en el municipio de Yerba Buena no he sido nombrada. No tengo ningún sueldo; colaboro.

- El denunciante asegura que usted posee dos DNI: 17.678.309 y 17.578.309.

- Tengo uno, y es el primero.

Lo primero que contesta el intendente de Yerba Buena, Mariano Campero, es que se trata de una “chicana barata”. Luego, recuerda que, desde que llegó al poder, ha debido desayunarse con varias denuncias de Sebastián Luna, en contra suya. Todas -asegura- han sido mediáticas, pues no han prosperado en los tribunales. “El establishment político de Tucumán quiere volver a Yerba Buena; ya lo dije antes. Hay gente que, sistemáticamente, intenta perjudicarnos. Detrás de este señor se esconden el legislador Ariel García, el vicegobernador Osvaldo Jaldo y los seguidores del ex gobernador José Alperovich. Los muchachos están nerviosos, y han salido a ensuciarnos. El peronismo hará lo que pueda por recuperar esta intendencia”, declara.

Cuenta que, hace unos días, el Tribunal de Cuentas les auditó el manejo de los planes sociales. “Tenemos todo en regla y lo hemos probado durante esa fiscalización. No vamos a cometer errores. No malversaremos ni un peso”, dice. Finalmente, se refiere a Silvia Iramain, a quien califica como una colaboradora suya. Aunque el teléfono de la mujer figura en una lista de números de los funcionarios de su gabinete, Campero ratifica la informalidad de la relación.

“No es funcionaria. No ha sido nombrada. Colabora conmigo, desde hace años. Sé que ha sido perseguida por el gobierno de Alperovich, y que le hicieron una causa. Con respecto a su documentación, no conozco el tema. Pero me consta que esto es una opereta”, afirma Campero.

En el organigrama de la Municipalidad, Soledad Gettas figura como secretaria de Política Social, mientras que Eduardo Poliche aparece como subsecretario.

El año pasado, Luna denunció a Campero en dos ocasiones, por las contrataciones directas de la consultora porteña Reale Dalla Torre y de la empresa constructora Sebastián Calleri. En 2015, además, había denunciado al jefe municipal de Tafí del Valle, Jorge Yapura Astorga, por presunto incremento patrimonial injustificado y por unas supuestas compras irregulares.

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