19 Marzo 2017
DESAFÍO. Juri asume el dilema de definir el tiempo transitando paisajes y razonando la continuidad y lo discontinuo.
POESÍA
LAS ESTOCADAS DEL TIEMPO
AMIRA JURI
(Lisboa – Buenos Aires)
El tiempo es protagonista absoluto de este libro. Lo es en forma explícita y directa o como argumento de fondo, en casi la totalidad de los poemas que lo integran, siendo expuesto en su doble condición del transcurrir experimentado físicamente por el ser humano o en cuanto a los efectos emocionales y mentales que devienen de sus tres alternativas: pasado, presente y futuro, ampliamente tratadas por parte de la filosofía.
La trayectoria literaria y profesional de Amira Juri abarca tanto la labor poética (a través de la publicación de tres poemarios anteriores: Al Andalus, en 2001; Árbol de viajes, en 2005, y El tiempo y las cosas, en 2009), como el desempeño docente en las cátedras de Historia y de Filosofía, en la UNT.
Muy uniforme a lo largo de toda su obra, respecto de la lírica se advierte el posicionamiento que le otorga a las disciplinas humanistas, sobresaliendo el énfasis puesto en la digresión referida al tiempo, captado desde lo vivencial y sus ineludibles huellas y señales de manifestación o mediante la observación reflexiva, de algún modo emparentada con el célebre planteo de San Agustín: “Cuando vivo el tiempo sé lo que es, pero cuando me preguntan qué es, no lo sé”.
La poeta asume ese dilema transitando paisajes cotidianos y naturales; razonando sobre las estaciones, la continuidad, lo discontinuo, “los recuerdos agazapados” y la partida final, hacia el infinito y la conciencia, ante la cual, afirma, “los músculos faciales del tiempo podrían quedar desencajados”.
© LA GACETA
Willy G. Bouillon
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