Quedó detenido el jefe de la comisaría de Banda del Río Salí

Quedó detenido el jefe de la comisaría de Banda del Río Salí

Lo acusan, junto a un cabo, de perseguir a toda una familia.

Banda del Río Salí. FOTO TOMADA DE MAPS.GOOGLE.COM Banda del Río Salí. FOTO TOMADA DE MAPS.GOOGLE.COM
26 Febrero 2017
El jefe de la comisaría de Banda del Río Salí y otro uniformado quedaron detenidos por orden de la Justicia. Se los acusa de haber privado de la libertad, de apremios ilegales y de haberle pedido una coima, entre otros delitos, a una mujer y a sus dos hijos.

El caso es tan complejo como polémico. Todo comenzó cuando una bandeña denunció que era perseguida y amenazada por dos vigías municipales. Esa demanda le generó problemas con el personal de la comisaría de esa ciudad. Y la situación se agravó aún más al quedar uno de los acusados detenidos y el otro, que tiene pedido de captura, separado del grupo que había creado el intendente Darío Monteros para redoblar la seguridad en esa ciudad.

En el expediente judicial, la mujer -su nombre se mantiene en reserva por cuestiones legales- fue detenida por el subcomisario Ángel Alberto Medina y el cabo primero Eduardo González Brondo, acusada de tentativa de homicidio y resistencia a la autoridad. Ella filmó el incidente con un celular y, cuando fue llevada a declarar, con esas imágenes demostró que no había hecho nada malo, por lo que quedó en libertad.

La pesadilla de la familia no terminó ahí. De acuerdo con la causa que es investigada por la fiscala Adriana Giannoni, también fueron aprehendidos de manera injustificada los dos hijos de la denunciante durante un allanamiento en el marco de una causa que habría sido falseada por los uniformados. A pesar de que se les había ordenado que no los detuvieran, los llevaron a la comisaría.

Los jóvenes, cuando fueron presentados en Tribunales para declarar, coincidieron en cómo se habían producido los hechos. Dijeron que ambos fueron golpeados y después, separados. Al más chico de ellos, menor de edad, lo llevaron a una habitación y un policía, según relató, le tocó sus partes íntimas. Recuperaron la libertad luego de haberles pagado $ 15.000 de coima.

La fiscala comenzó a investigar el caso y descubrió varias irregularidades. Por ejemplo, en el allanamiento que hicieron en la vivienda de la mujer, los policías aseguraron que habían secuestrado una “tumbera”. Sin embargo, la testigo del procedimiento reconoció que ella había observado que los uniformados se llevaban los hierros que se utilizan como estructura para las piletas de lona.

Los uniformados fueron citados a declarar el viernes, pero se abstuvieron. La fiscala pidió la detención de ambos, planteo que fue aceptado por un juez de instrucción. Un tercer policía, que es suboficial, también había sido citado, pero no se presentó.

Desde la Policía decidieron no realizar declaraciones al respecto y lo harán una vez que conozcan el avance de la investigación. Mientras tanto, de manera inmediata, iniciaron el sumario administrativo correspondiente.

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