Se cumplen cinco años del caso Marcela Chiaro

Hace exactamente cinco años, Delia comenzaba a preocuparse porque por primera vez su hija Marcela Chiaro no la había llamado para decirle “feliz cumpleaños”. Lo que no imaginaba era que la mujer había sido asesinada y que días después llevarían preso a su concubino, Luis Corral, y a la amante de este, Paola Carina Castro. Cinco años después, el crimen sigue impune.

“Ese tipo te va a matar”, le advirtió Delia a su hija la última vez que Chiaro y Corral tuvieron una pelea y que ella se refugió en la casa de sus padres, en Santa Fe. Luego decidió volver a Tucumán con su pareja y con la hija de ambos, que entonces tenía dos años.

Chiaro fue vista por última vez el 13 de febrero de 2012. Sus vecinas de Villa Amalia la vieron en el mismo lugar de siempre: atendiendo la veterinaria de su concubino. Pero esa noche desapareció y nada más se supo hasta cuatro meses después, cuando hallaron sus restos en un cañaveral, en Leales.

Corral y Castro estuvieron dos años presos. Cuando recuperaron la libertad, la pareja se rompió. En la investigación que realizó el ex fiscal Guillermo Herrera figuraba una declaración de la mujer donde confesaba que el veterinario había asesinado a su pareja. Sin embargo, cuando salió de la cárcel aseguró que el fiscal la presionó para que dijera eso.

“Mi hija se hubiese quedado acá y esto no hubiera pasado”, lamentó ayer Delia, desde Santa Fe. “Luis Corral es un asesino y tiene que estar preso”, agregó, con bronca. A cinco años del crimen, ella y su familia tienen que convivir con la impunidad. En Tribunales, la causa avanza a paso lento. Fuentes judiciales informaron que en la Sala IV, donde deberá realizarse el juicio oral, recién se realizó la apertura de pruebas. Cuando ese plazo culmine, se fijará una fecha para el inicio del debate. Se estima que no se iniciaría hasta mitad de año.