Una travesía de 400 kilómetros a caballo

Una travesía de 400 kilómetros a caballo

Un grupo de cinco mujeres emprendió una expedición de 13 días hasta el Puerto Santa Cruz.

24 Enero 2017
Se habían prometido hacer la travesía y lo cumplieron. Cinco mujeres residentes en Santa Cruz realizaron una cabalgata de 13 días uniendo los casi 400 kilómetros del río Santa Cruz donde serán construidas las represas hidroeléctricas.

Mónica Cepernic, de 68 años, ex juez de paz de El Chaltén e hija del fallecido ex gobernador Jorge Cepernic (1915-2010), se había prometido hacer la travesía para conocer el recorrido, porque en la naciente del río fueron tiradas las cenizas de su padre y de su madre, Sofía Vicic, y la construcción de las represas apuró el objetivo, que le llevó un año de logística.

“Sabemos que el río no va a estar en su estado natural, se van a perder picaderos y otras cuestiones”, explicó a Télam la sobrina, Marcela Cepernic. “Me prendí porque a mí esas cosas me encantan y fue una experiencia increíble, muy dura, por el viento, la tierra y una aridez que era mucho más de lo que imaginábamos”, dijo.

También se les unieron Nélida Paz Suárez (66), de la estancia “Catalina”; Blanca del Río, una productora artesanal de cerveza de El Chaltén, y Angélica Sánchez (57), de radio “La Aplanadora Show de Pico Truncado”.

Una vida dura

La travesía les demandó 13 días, desde Bon Accord hasta la naciente y de allí hasta Puerto Santa Cruz. Con un promedio de 25 a 30 kilómetros cubiertos por día -37 el que más-, las charlas compartidas fueron un impulso a seguir adelante. “Cómo esa gente de campo que tenía una vida muy dura anduvo todas esas pampas peleando por un medio franco”, relató.

El proyecto de las represas también fue parte de las conversaciones durante la cabalgata. “Es difícil aceptar los beneficios de unas represas, que no van a ser para los lugareños, porque le quitan el acceso al río a los campesinos en las estancias, que hemos visto abandonadas”, afirmó.

Marcela Cepernic consideró que su abuelo “tenía un sueño genuino, que era colaborar para que Santa Cruz fuera independiente y tenga sus propios recursos”.

Las mujeres hicieron la travesía guiadas por Claudio Waring, hombre de campo de la zona de Tres Lagos, encargado de los caballos y de abrirles caminos en las tranqueras. “Realmente, Claudio fue muy importante para que tuviera éxito esta expedición”, admitió Cepernic.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios