Liberaron a 15 uniformados y pidieron que la Policía Federal perite las armas secuestradas

Frente al edificio del Centro Judicial de Monteros aún se advierten los rastros de la marcha que el martes pasado realizaron los familiares de los 16 policías que en ese momento estaban aprehendidos en torno a la investigación por la muerte de los agricultores Oscar Martín Moreno y su hijo Oscar Orlando en Tafí del Valle. 15 de esos efectivos ya recuperaron la libertad, mientras que el acusado de mayor jerarquía quedó detenido disposición del Juzgado de turno en feria.

Mientras aguarda los resultados de algunas de las pericias fundamentales para esclarecer el caso, ayer, la fiscala Mónica García de Targa -quien se hizo cargo del caso ayer- se reunió en su oficina con el Ministro Fiscal Edmundo Jiménez. Este último le expresó su preocupación por el gravísimo suceso ocurrió el domingo pasado en el principal paseo turístico de la provincia.

El jefe de los fiscales puso a disposición de García de Targa a los expertos del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF), quienes aportarán su experiencia para avanzar en la investigación del confuso hecho. Luego de esta reunión, los profesionales de ese equipo también se entrevistaron con la fiscala. Apenas terminaron los encuentros, los miembros del grupo llamado “Policía Judicial” comenzaron a trabajar en torno a las diferentes ramificaciones del caso. En tanto, la fiscala ya prepara una serie de medidas para avanzar en la investigación.

“La causa tiene un grado de complejidad importante. Estamos elaborando numerosas medidas. Esperamos para esta semana los resultados de los dermotest, dosajes alcohólicos y análisis bioquímicos para saber si hubo consumo de drogas. También los informes de las prendas de vestir”, precisó a LA GACETA García de Targa.

La fiscala remarcó que: “Hay mucho por hacer y por ese motivo es importante la colaboración del ECIF para profundizar la investigación. Sería apresurado dar una opinión personal del caso”.

Por su parte, Jiménez señaló: “Creemos que es importante el aporte que puede hacer nuestro equipo de profesionales en un caso tan complejo como este. Ese fue el espíritu con el que fue creado el ECIF”. Además, el ministro fiscal solicitó mediante un escrito la colaboración de la Policía Federal para realizar las pericias sobre las armas de fuego y las municiones incautadas, medidas que hasta ahora estuvieron a cargo de la Policía de la provincia, pese a que hubo 16 efectivos involucrados.

Policías liberados

Solo uno de los policías quedó detenido por orden del juez Mario Velázquez, quien entiende en la causa. El resto recuperó ayer la libertad. El lunes, por su parte, habían sido liberados los cinco civiles aprehendidos, que son parientes de los fallecidos. Solamente quedó detenido el jefe de la seccional de Tafí del Valle, Dardo Romano. Este último fue acusado de homicidio por el fiscal Jorge Echayde, según confirmaron fuentes judiciales.

Muchas dudas

Son pocos los puntos en común entre la versión policial y la de los familiares de los hombres de campo fallecidos, por lo que todavía quedan varios puntos oscuros por resolver. Una de las grandes dudas gira en torno al presunto control vehicular. Mientras los policías afirman que los agricultores se negaron a presentar los papeles de un VW Vento, la familia asegura que los efectivos los fueron a buscar en la cancha del Club San José y les pidieron dinero para no secuestrar el auto.

De acuerdo a la información oficial, los Moreno escaparon del control abandonando el vehículo, pero regresaron con varias personas y atacaron a los policías. Luego huyeron y fueron interceptados por un móvil policial. Según ese relato, los ocupantes del Vento descendieron armados y los uniformados dispararon, dando muerte a los Moreno. La familia de los agricultores insiste en que nada de esto es cierto. Según su versión, sí hubo una pelea, pero en ningún momento los Moreno les quitaron las armas a los policías. Además, aseguran que no se trató de un enfrentamiento, sino de una emboscada. Natalia García Salemi, la abogada de la familia de los fallecidos, afirma que fueron que ejecutados a corta distancia y que no estaban armados.