11 Octubre 2016
La enseñanza de género y la educación femenina son claves para el desarrollo sostenible del mundo, sostiene un estudio de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) sobre igualdad entre hombres y mujeres.
El informe GEM, de seguimiento de la educación en el mundo, fue difundido ayer, durante un acto celebrado en París, en vista de que hoy se conmemora el Día Internacional de la Niña.
La Unesco explica en el informe que la probabilidad de ratificar tratados sobre el medio ambiente es mayor en aquellos países que cuentan con más mujeres en el parlamento, informa un cable de la agencia EFE.
La Unesco destacó en un comunicado: “mediante la alfabetización y la adquisición de confianza, la educación puede empoderar a las mujeres y permitirles así convertirse en líderes”.
Esa misma educación también ayuda a las mujeres a ganar credibilidad e influencia entre otros líderes y dirigentes, agrega.
En la política
Puntualiza, asimismo, que, en la actualidad, menos de una quinta parte de los jefes de Estado y de Gobierno y de los ministros de todo el mundo son mujeres.
Además, en los parlamentos nacionales, las mujeres todavía ocupan menos del 25 % de los escaños. “Se necesita, por tanto, corregir las desigualdades de género profundamente arraigadas y complejas que afectan a las personas en la educación y fuera de ella”, subrayó la directora general de la Unesco, Irina Bokova.
“El empoderamiento de las mujeres y de las niñas y, en última instancia, el logro de un desarrollo sostenible, dependerán de si la sociedad consigue reformarse de acuerdo con estas recomendaciones”, añadió.
Barreras
En el estudio se alude a la necesidad de acabar con las barreras de género en la sociedad para permitir un mayor acceso de las mujeres en áreas como el empleo. Las mujeres desempeñan más empleos no remunerados que los hombres y ocupan puestos menos seguros. Esto tiene que ver con lo que estudian. “Las mujeres constituyen el 70% de quienes deciden graduarse en enseñanza, pero sólo el 25% de quienes optan por la ingeniería y la informática”, hicieron notar los autores del informe.
“Sin embargo, menos del 15% de los marcos curriculares nacionales incluyen materiales sobre el empoderamiento desde la perspectiva de género y sólo la mitad menciona la igualdad de género”, agregaron. También destacan que los docentes pueden contribuir a acabar con los estereotipos laborales.
El director del Informe GEM, Aaron Benavot, defendió el concepto de que educar a los hombres y a los niños para cuestionar las normas de género convencionales es tan importante como educar a las niñas. “Pero las experiencias educativas deben reforzarse con lo que ocurre en el hogar y en la política”, subrayó.
El informe GEM, de seguimiento de la educación en el mundo, fue difundido ayer, durante un acto celebrado en París, en vista de que hoy se conmemora el Día Internacional de la Niña.
La Unesco explica en el informe que la probabilidad de ratificar tratados sobre el medio ambiente es mayor en aquellos países que cuentan con más mujeres en el parlamento, informa un cable de la agencia EFE.
La Unesco destacó en un comunicado: “mediante la alfabetización y la adquisición de confianza, la educación puede empoderar a las mujeres y permitirles así convertirse en líderes”.
Esa misma educación también ayuda a las mujeres a ganar credibilidad e influencia entre otros líderes y dirigentes, agrega.
En la política
Puntualiza, asimismo, que, en la actualidad, menos de una quinta parte de los jefes de Estado y de Gobierno y de los ministros de todo el mundo son mujeres.
Además, en los parlamentos nacionales, las mujeres todavía ocupan menos del 25 % de los escaños. “Se necesita, por tanto, corregir las desigualdades de género profundamente arraigadas y complejas que afectan a las personas en la educación y fuera de ella”, subrayó la directora general de la Unesco, Irina Bokova.
“El empoderamiento de las mujeres y de las niñas y, en última instancia, el logro de un desarrollo sostenible, dependerán de si la sociedad consigue reformarse de acuerdo con estas recomendaciones”, añadió.
Barreras
En el estudio se alude a la necesidad de acabar con las barreras de género en la sociedad para permitir un mayor acceso de las mujeres en áreas como el empleo. Las mujeres desempeñan más empleos no remunerados que los hombres y ocupan puestos menos seguros. Esto tiene que ver con lo que estudian. “Las mujeres constituyen el 70% de quienes deciden graduarse en enseñanza, pero sólo el 25% de quienes optan por la ingeniería y la informática”, hicieron notar los autores del informe.
“Sin embargo, menos del 15% de los marcos curriculares nacionales incluyen materiales sobre el empoderamiento desde la perspectiva de género y sólo la mitad menciona la igualdad de género”, agregaron. También destacan que los docentes pueden contribuir a acabar con los estereotipos laborales.
El director del Informe GEM, Aaron Benavot, defendió el concepto de que educar a los hombres y a los niños para cuestionar las normas de género convencionales es tan importante como educar a las niñas. “Pero las experiencias educativas deben reforzarse con lo que ocurre en el hogar y en la política”, subrayó.
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