Alegría, optimismo y pequeñas críticas: esto opinaron los primeros conductores que usaron el túnel

Alegría, optimismo y pequeñas críticas: esto opinaron los primeros conductores que usaron el túnel

En general, coincidieron en que la obra ayudará a mejorar el tránsito hacia el oeste. Resaltaron la decoración.

LOS PRIMEROS en pasar. Dos motociclistas entran  al túnel de calle Córdoba. LA GACETA LOS PRIMEROS en pasar. Dos motociclistas entran al túnel de calle Córdoba. LA GACETA
07 Octubre 2016
El reloj marcaba las 10.15. Bajo un cielo despejado y ante la atenta mirada de los presentes, en ese momento dos motos y un auto se convirtieron en los primeros vehículos, oficialmente, en inaugurar el túnel que une Marco Avellaneda y Suipacha por la Córdoba. 
Mientras sus conductores se perdían por el gigantesco hueco de entrada, de 3,50 metros, las bocinas se hacían sentir, como así también los aplausos de todos los vecinos, curiosos y autoridades provinciales. Finalmente, después de tantas idas y vueltas los tres años que había demorado la obra quedaron atrás; el cinturón de acero se había roto. 
"Me parece muy bien lo que se hizo. Es un gran paso para la capital porque es (la Córdoba) una de las calles primordiales que tiene la ciudad para cruzar de avenida a avenida. Esperemos que cuando llueva no pase nada, pero creo que ese tema ya está solucionado", contó Roberto Mirabel, que tiene su gomería frente a la reciente obra inaugurada . 
Él, como varios vecinos que estuvieron en la inauguración, pudo ser testigo de algo que llevó su tiempo y que fue muy criticado por los tucumanos. "Realmente llevó mucho hacer esto y el monto de la obra fue abultado. Pero el asunto es que se haya terminado. El tráfico ahora va a mejorar bastante por aquí, y le va a dar otra cara a esta zona. Esto (el túnel) era necesario y se tendría que haber hecho hace años", contó el gomero.
Con el pasar de los minutos distintos vehículos comenzaron a utilizar el nuevo túnel. Los conductores de camionetas, autos y motos saludaban, como si de un triunfo se tratara, a cada cámara que veían cuando salían por calle Suipacha. Sin embargo, otras personas, con sonrisa cómplice, se desentendían y preferían no entrar. "No me animo a pasar todavía. Que lo hagan primeros los políticos y después hablamos", decía Roberto Morales.
Sobre el túnel en sí, muchos de los 'curiosos' que decidieron ser los primeros en ingresar quedaron maravillados por cómo se ve por dentro la obra. "Está hermoso. Las pinturas, las luces, todo. Ahora tenemos pensando en traer a los chicos para conozcan esto", confesaba un hombre, que estaba acompañado por su mujer.
"Es una obra muy buena. Sin duda el flujo vehicular va a ser mucho más libre para el manejo del centro hacia el oeste; veo que es una obra de bien. De ingenieria bien hecha. Esperemos que las cosas que falten mejoren con la decoración", decía un conductor tras pasar por el túnel.
Sin embargo, no todo salió perfecto. Es que cuando los vehículos salían del túnel se encontraron con algo inesperado: los semáforos de suipacha y Córdoba no funcionaban, por lo que se tuvo que poner, de maera provisoria, a agentes de tránsito. "Es la ley de Murphy. Ayer funcionaba todo perfecto y hoy nos pasó esto. Ya se está solucionando todo", reclamaba un ingeniero que trabajó en la obra. 
El acto de inauguración fue encabezado por el gobernador Juan Manzur y por el intendente Germán Alfaro. 
El túnel de la Córdoba es de exclusivo uso vehicular. Los peatones pueden cruzar por un puente elevado que pasa por encima de las vías. 
Según Manzur, el otro túnel que está sobre calle Mendoza será inaugurado antes de fin de año.
Datos a tener en cuenta del nuevo túnel
El túnel de la calle Córdoba en sí mismo mide 90 metros de largo, pero con las troneras (las estructuras blancas de la entrada) alcanzará los 160 metros. Dos vehículos podrán circular a la vez, siempre en un mismo sentido. 
Para ordenar el tránsito, la Municipalidad colocó semáforos. A fin de prevenir accidentes se instalaron cámaras dentro del túnel, que tiene una altura de 3,5 metros, para medir el tránsito. 
Si en un momento se detiene un auto, se enciende una alarma que hace cerrar el túnel con luces.
Si se produce un embotellamiento, habrá una coordinación con los semáforos de la Suipacha para que eso no suceda. 
En caso de que sea necesaria la presencia de rescatistas o bomberos, se construyó una vereda pequeña, por donde circularán si sucede algo inusual. Pero al haber dos carriles, normalmente tendrán espacio para trabajar tranquilos, ya que también al sonar la alarma no podrán pasar otros vehículos. El túnel cuenta con extractores de humo.
Para evitar inundaciones se hicieron cuatro pozos externos que permiten deprimir las napas freáticas. También se cuenta con un grupo electrógeno en caso de que la energía se corte. De ese modo las bombas no dejarán de funcionar.

El reloj marcaba las 10.15. Bajo un cielo despejado y ante la atenta mirada de cientos de personas, cámaras de video y de fotos, dos motos y un auto se convirtieron en los primeros vehículos en circular por el túnel que une Marco Avellaneda y Suipacha por la Córdoba.

Mientras sus conductores se perdían por el gigantesco hueco de entrada, de 3,50 metros, las bocinas comenzaron a hacerse sentir, como así también los aplausos de los vecinos, curiosos y autoridades provinciales y municipales que habían participado del acto. Después de décadas de idas y vueltas, el cinturón de acero se había roto

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"Me parece muy bien lo que se hizo. Es un gran paso para la capital, porque es (la Córdoba) una de las calles primordiales que tiene la ciudad para cruzar de avenida a avenida. Esperemos que cuando llueva no pase nada, pero creo que ese tema ya está solucionado", contó Roberto Mirabel, que tiene su gomería frente al túnel. 

Él, como varios vecinos que estuvieron en la inauguración, fue testigo de los avances de una obra muy grande. "Realmente llevó mucho hacer esto y el monto de la obra fue abultado. Pero el asunto es que se haya terminado. El tráfico ahora va a mejorar bastante por aquí, y le va a dar otra cara a esta zona. Esto (el túnel) era necesario y se tendría que haber hecho hace años", contó el gomero.

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Con el pasar de los minutos, fueron más los vehículos que comenzaron a utilizar el nuevo túnel. Los conductores de camionetas, autos y motos saludaban, como si de un triunfo se tratara, a cada cámara que los apuntaba cuando salían hacia la calle Suipacha. Sin embargo, otras personas, con sonrisas cómplices, se desentendían y preferían no entrar. "No me animo a pasar todavía. Que lo hagan primeros los políticos y después hablamos", bromeaba Roberto Morales.

"Está hermoso. Las pinturas, las luces, todo. Ahora tenemos pensado en traer a los chicos para que conozcan esto", confesó un hombre, que estaba acompañado por su mujer.

"Es una obra muy buena. Sin duda, el flujo vehicular va a ser mucho más libre para el manejo del centro hacia el oeste; veo que es una obra de bien, de ingeniería bien hecha. Esperemos que las cosas que faltan mejoren con la decoración", decía un conductor tras pasar por el túnel.

No todo salió perfecto. Es que cuando los vehículos salían del túnel se encontraron con algo inesperado: los semáforos de Suipacha y Córdoba no funcionaban, por lo que se tuvo que poner, de manera provisoria, a agentes de tránsito. "Es la ley de Murphy. Ayer funcionaba todo perfecto y hoy nos pasó esto. Ya se está solucionando", reclamó un ingeniero que trabajó en la obra. 

El acto de inauguración fue encabezado por el gobernador Juan Manzur y por el intendente Germán Alfaro. El túnel de la Córdoba es de exclusivo uso vehicular. Los peatones pueden cruzar por un puente elevado que pasa por encima de las vías. 
Según Manzur, el otro túnel que está sobre calle Mendoza será inaugurado antes de fin de año.

Datos a tener en cuenta del nuevo túnel

1- El túnel de la calle Córdoba en sí mismo mide 90 metros de largo, pero con las troneras (las estructuras blancas de la entrada) alcanzará los 160 metros. Dos vehículos podrán circular a la vez, siempre en un mismo sentido. 

2- Para ordenar el tránsito, la Municipalidad colocó semáforos. A fin de prevenir accidentes se instalaron cámaras dentro del túnel, que tiene una altura de 3,5 metros, para medir el tránsito. 

3- Si en un momento se detiene un auto, se enciende una alarma que hace cerrar el túnel con luces.

4- Si se produce un embotellamiento, habrá una coordinación con los semáforos de la Suipacha para que eso no suceda. 

5- En caso de que sea necesaria la presencia de rescatistas o bomberos, se construyó una vereda pequeña, por donde circularán si sucede algo inusual. Pero al haber dos carriles, normalmente tendrán espacio para trabajar tranquilos, ya que también al sonar la alarma no podrán pasar otros vehículos. El túnel cuenta con extractores de humo.

6- Para evitar inundaciones se hicieron cuatro pozos externos que permiten deprimir las napas freáticas. También se cuenta con un grupo electrógeno en caso de que la energía se corte. De ese modo las bombas no dejarán de funcionar.

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