Siguen siendo aire, fuego y agua, casi sin querer

Siguen siendo aire, fuego y agua, casi sin querer

Llega al Teatro San Martín una hermandad musical integrante del catálogo de lo mejor que ha dado la música popular argentina -y latinoamericana- en lo que va del siglo. El alma mater es el tucumano Juan “Popi” Quintero.

ACA SECA -  FOTO SOFÍA ROMERO.- ACA SECA - FOTO SOFÍA ROMERO.-
30 Septiembre 2016


HOY
• A las 22
, en el Teatro San Martín (av. Sarmiento 601).


mariano cantero
- La percusión ¿puede generar melodías?
- Sí, claro; depende del contexto, de los músicos con los que estás.  
- ¿Qué desafíos plantea el folclore argentino a los percusionistas? 
- Es muy rico y hay mucho por indagar,  desde lo polirrítmico. Además es muy propio de acá (y de cada región).Tenemos todavía mucho por explorar para generar cosas nuevas. También hay que probar ritmos de afuera, que encuentran algunas similitudes en los nuestros. 
- ¿El baterista-percusionista es quien coordina los miembros en un grupo?
- El ritmo es algo que llevan todos. Lo que pasa es que los percusionistas trabajamos con la materia prima. Muchas veces se destaca al percusionista por lo rítmico, pero es algo que todo músico debería estudiar, porque es algo que se trabaja poco, que muchas veces se mira de soslayo. Es algo muy importante; llega a definir territorios y procedencias. Decís: ese ritmo es del Norte o del Este.  
- ¿Qué te une musicalmente con Beeuwsaert y qué con Quintero?
- Hay una hermandad de 18 años. Siempre nos juntó la música, pero después nos fuimos juntando cada vez más humanamente. En lo musical eso nos da una potencia, es una totalidad. Tengo mi admiración hacia ellos. A la vez siento que es como el primer día, nuestra sociedad se va renovando, y también porque nos gusta divertirnos. No estamos pensando qué si y qué no; simplemente ensayamos, buscamos temas nuevos y disfrutamos. 
 
“popi” quintero  
- ¿Siguen siendo “Aire, fuego y agua”, como cuando eran estudiantes?
- Me gusta pensar que sí. Seguimos siendo un organismo que se complementa, que respira y se mueve, en el cual cada parte es fundamental. No podríamos pensar esta música sin uno. En ese punto no cambió nada.
- Hace mucho que no tocan en Tucumán y ahora vas a tocar dos veces en pocos días. ¿Te genera algo especial?
-  A mí en particular me pasa que tengo el espejo (por suerte un espejo amoroso) de gente a la que admiro y que me conoce mucho. La opinión de ellos vale un montón en mi hacer musical, entonces en un punto es como un desafío, que da gusto afrontar.
- ¿Qué novedades traen para este show?
- Algunas pocas canciones nuevas. La verdad es que no sé bien cuántas se sumaron al repertorio. Tampoco me importa mucho; lo importante es retomar este vínculo con el público de mi tierra, que se interrumpió un poco en estos años.
- Se juntaron en 1999. ¿Cómo avizorás Aca seca en 2019?
- Desde que nos formamos nunca tuvimos una visión a largo plazo; creo que esa fue una de las virtudes del grupo. Año a año revisamos si tenemos ganas de seguir tocando, de descansar un tiempo, de aprender; en fin, de darles lugar a las voluntades, y creo que ese aire es lo que nos mantuvo unidos. 
- ¿Qué te une musicalmente con Cantero, y qué con Beeuwsaert?
- La primera pregunta lo responde. Tengo una admiración muy profunda por mis compañeros, pero lo importante ocurre cuando estamos los tres juntos.
 
andrés beeuwsaert
- ¿Te considerás un músico de jazz o de música popular de raíz folclórica ? 
- Ni uno ni otra. Soy un músico curioso. 
- Tocaste y grabaste con Charly, Malosetti, Aznar, Lebón… ¿Estás muy influenciado por el rock?
- No, porque a la música no la veo en cuanto género. Si me moviliza es música válida para mí, no importa el estilo ni de dónde venga. Así lo viví de chico en casa. Además empecé tocando el teclado por Charly García: él fue mi primer gran amor musical. Después, las cosas de la vida hacen que toque con él, como con Pedro u otros músicos. A mi casa podía venir un amigo violinista a tocar Stravinsky, o un trompetista, con Miles Davis. Los que me rodeaban venían algunos del palo del rock, otros del jazz y otros de la clásica, pero para mí todo eso era muy natural.
- ¿Qué te une musicalmente con Quintero, y qué con Cantero? 
- Lo que nos une es básicamente una gran afinidad, aparte de una gran química tanto musical como humana, que es lo que nos mantiene activos y con las mismas ganas de tocar desde que empezamos. Las primeras veces que escuché las canciones de Juan en los pasillos de la facultad, no estaba familiarizado con su música, o con el bagaje de raíz folclórica de Tucumán. Sin embargo me conmovió profundamente: tenía mucho que ver con lo que yo quería escuchar en ese momento. Y con Mariano  compartimos siempre muchas experiencias con distintos tipos de música porque tocamos en grupos de rock y de jazz; y tenemos muchos discos en común escuchados desde la adolescencia, por eso hay  mucha conexión. Nosotros los tres no tenemos ni que hablar de música; sólo fluye. 

MARIANO CANTERO / Percusión y voz

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- La percusión ¿puede generar melodías?
- Sí, claro; depende del contexto, de los músicos con los que estás.  

- ¿Qué desafíos plantea el folclore argentino a los percusionistas? 
- Es muy rico y hay mucho por indagar,  desde lo polirrítmico. Además es muy propio de acá (y de cada región).Tenemos todavía mucho por explorar para generar cosas nuevas. También hay que probar ritmos de afuera, que encuentran algunas similitudes en los nuestros. 

- ¿El baterista-percusionista es quien coordina los miembros en un grupo?
- El ritmo es algo que llevan todos. Lo que pasa es que los percusionistas trabajamos con la materia prima. Muchas veces se destaca al percusionista por lo rítmico, pero es algo que todo músico debería estudiar, porque es algo que se trabaja poco, que muchas veces se mira de soslayo. Es algo muy importante; llega a definir territorios y procedencias. Decís: ese ritmo es del Norte o del Este.  

- ¿Qué te une musicalmente con Beeuwsaert y qué con Quintero?
- Hay una hermandad de 18 años. Siempre nos juntó la música, pero después nos fuimos juntando cada vez más humanamente. En lo musical eso nos da una potencia, es una totalidad. Tengo mi admiración hacia ellos. A la vez siento que es como el primer día, nuestra sociedad se va renovando, y también porque nos gusta divertirnos. No estamos pensando qué si y qué no; simplemente ensayamos, buscamos temas nuevos y disfrutamos. 


 “POPI” QUINTERO / Composición, guitarra y voz

- ¿Siguen siendo “Aire, fuego y agua”, como cuando eran estudiantes?
- Me gusta pensar que sí. Seguimos siendo un organismo que se complementa, que respira y se mueve, en el cual cada parte es fundamental. No podríamos pensar esta música sin uno. En ese punto no cambió nada.

- Hace mucho que no tocan en Tucumán y ahora vas a tocar dos veces en pocos días. ¿Te genera algo especial?
-  A mí en particular me pasa que tengo el espejo (por suerte un espejo amoroso) de gente a la que admiro y que me conoce mucho. La opinión de ellos vale un montón en mi hacer musical, entonces en un punto es como un desafío, que da gusto afrontar.

- ¿Qué novedades traen para este show?
- Algunas pocas canciones nuevas. La verdad es que no sé bien cuántas se sumaron al repertorio. Tampoco me importa mucho; lo importante es retomar este vínculo con el público de mi tierra, que se interrumpió un poco en estos años.

- Se juntaron en 1999. ¿Cómo avizorás Aca seca en 2019?
- Desde que nos formamos nunca tuvimos una visión a largo plazo; creo que esa fue una de las virtudes del grupo. Año a año revisamos si tenemos ganas de seguir tocando, de descansar un tiempo, de aprender; en fin, de darles lugar a las voluntades, y creo que ese aire es lo que nos mantuvo unidos. 

- ¿Qué te une musicalmente con Cantero, y qué con Beeuwsaert?
- La primera pregunta lo responde. Tengo una admiración muy profunda por mis compañeros, pero lo importante ocurre cuando estamos los tres juntos.

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ANDRÉS BEEUWSAERT / Piano, teclado y voz  

- ¿Te considerás un músico de jazz o de música popular de raíz folclórica ? 
- Ni uno ni otra. Soy un músico curioso. 

- Tocaste y grabaste con Charly, Malosetti, Aznar, Lebón… ¿Estás muy influenciado por el rock?
- No, porque a la música no la veo en cuanto género. Si me moviliza es música válida para mí, no importa el estilo ni de dónde venga. Así lo viví de chico en casa. Además empecé tocando el teclado por Charly García: él fue mi primer gran amor musical. Después, las cosas de la vida hacen que toque con él, como con Pedro u otros músicos. A mi casa podía venir un amigo violinista a tocar Stravinsky, o un trompetista, con Miles Davis. Los que me rodeaban venían algunos del palo del rock, otros del jazz y otros de la clásica, pero para mí todo eso era muy natural.

- ¿Qué te une musicalmente con Quintero, y qué con Cantero? 
- Lo que nos une es básicamente una gran afinidad, aparte de una gran química tanto musical como humana, que es lo que nos mantiene activos y con las mismas ganas de tocar desde que empezamos. Las primeras veces que escuché las canciones de Juan en los pasillos de la facultad, no estaba familiarizado con su música, o con el bagaje de raíz folclórica de Tucumán. Sin embargo me conmovió profundamente: tenía mucho que ver con lo que yo quería escuchar en ese momento. Y con Mariano  compartimos siempre muchas experiencias con distintos tipos de música porque tocamos en grupos de rock y de jazz; y tenemos muchos discos en común escuchados desde la adolescencia, por eso hay  mucha conexión. Nosotros los tres no tenemos ni que hablar de música; sólo fluye. 

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