La leyenda que nunca se irá

La leyenda que nunca se irá

Palmer, un fuera de serie dentro y fuera de las canchas

EL ÚLTIMO GOLPE. Palmer, ganador de cuatro Masters, dejó su marca en el golf. reuters EL ÚLTIMO GOLPE. Palmer, ganador de cuatro Masters, dejó su marca en el golf. reuters
27 Septiembre 2016
PITTSBURG.- El golf perdió a una de las máximas figuras de su historia con la muerte del estadounidense Arnold Palmer, a los 87 años, en Pittsburgh. “Estamos profundamente tristes por la muerte de Arnold Palmer”, escribió el domingo en las redes sociales la Asociación de Golf de Estados Unidos (USGA), que calificó al legendario ex jugador como “el mayor embajador” del deporte.

Palmer, apodado “el Rey”, ganó 62 títulos durante su carrera y siete Majors: el Masters de Augusta (1958, 1960, 1962 y 1964), el Abierto de Estados Unidos (1960) y el Abierto Británico (1961 y 1962). Comenzó a jugar en los años 50 y fue uno de los 13 originales en ingresar en el Salón de la Fama del Golf Mundial en 1974.

“El ‘Rey’ era tan extraordinario en el campo como generoso con los demás. Gracias por los recuerdos, Arnold”, dijo el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en Twitter, añadiendo una foto junto a Palmer en la Casa Blanca.

Jack Nicklaus, quien junto a Palmer y Gary Player fue responsable de la popularización del juego en los ‘60, lo describió como un ícono y un pionero que trascendió más allá del golf. “El golf ha perdido un gran amigo. Fue el ‘Rey’ de nuestro deporte”, dijo Nicklaus. Tiger Woods también rindió tributo: “tu filantropía y humildad son parte de tu leyenda. Es difícil imaginar el golf sin ti”.

Nacido el 10 de septiembre de 1929 en la ciudad estadounidense de Latrobe, Palmer fue también un exitoso hombre de negocios, aviador experto y talentoso diseñador de campos de golf. En 1967 se convirtió en el primer golfista en ganar un millón de dólares en premios. Además, atrajo a una legión de seguidores llamada “Arnie’s Army” (el ejército de Arnie) gracias a sus magníficas actuaciones, su bondad y consideración por los demás. Nunca ganó el PGA Championship, el último Major del año, pero eso ya es una anécdota.

En el 1994, con 72 años, Palmer jugó por última vez el US Open y el Open Británico. En 2002 jugó su último Masters. “Me gusta pensar que siempre me quedan un par de buenas rondas y puede que estén ahí, pero no las he mostrado aquí”, dijo en aquel momento.

Palmer recibió los dos máximos honores civiles de Estados Unidos: la Medalla de Oro del Congreso en 2012 y la Medalla Presidencial de la Libertad en 2004. Su salud empezó a empeorar a fines de 2015. El domingo su corazón dijo basta. El “Rey” se fue, pero el trono siempre será suyo. (DPA)

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios