Capuletos y Montescos, arropados con lujoso vestuario renacentista

Capuletos y Montescos, arropados con lujoso vestuario renacentista

“Romeo y Julieta”, la ópera de Gounod, en una colorida versión

ACTO PRIMERO. Complicados tocados, antifaces y modelos únicos para cada participante, en el baile de máscaras del palacio de los Capuleto. LA GACETA / FOTO DE DIEGO ARÁOZ. ACTO PRIMERO. Complicados tocados, antifaces y modelos únicos para cada participante, en el baile de máscaras del palacio de los Capuleto. LA GACETA / FOTO DE DIEGO ARÁOZ.
29 Junio 2016

HOY
• A las 21, en el Teatro San Martín (av. Sarmiento y Muñecas). 

SÁBADO: a las 21.

DOMINGO: a las 18.



El teatro San Martín está de estreno con la ópera adaptada en tres actos, “Romeo y Julieta”, de Charles Gounod.

El Ente Cultural ha unido en la elección de la obra el Bicentenario de la Independencia con los 400 años de William Shakespeare, autor de la historia universal. En el ensayo general la maquinaria de la puesta en escena funcionó tal como estaba previsto.

En la dirección general y en la régie vuelven a trabajar, respectivamente, Alejandro Jassán y las hermanas María Concepción y María de la Paz Perre, y la soprano Mercedes Arcuri (Julieta) que tan bien trabajaron en 2015 en “La hija del regimiento”.

En los otros roles centrales Romeo es el tenor tucumano Pablo Bemsch, de carrera en Suiza, y el barítono Sebastián Sorarrain, del Argentino de La Plata y solista en el Colón. Hasta ahí los artistas importados. Los otros roles principales son de cantantes tucumanos: Ramón Poliche, Marcelo Oppedisano, Claudia Manrique, Josefina Viejobueno, Alfredo Tiseira, Miguel Domínguez, Pablo Jiménez, Víctor Guitiérrez y Gustavo Girbau. Junto a ellos, el Coro Estable adquiere protagonismo vocal y escénico dirigido por Ricardo Sbrocco.

La Verona del Renacimiento aparece antes de que se abra el telón, en movimientos escénicos que abarcan hasta la platea. Dominan la escenografía grandes muros de piedra, tan fracturados como Capuletos y Montescos. Hay escenas masivas donde se disfruta el lujosísimo vestuario histórico del Teatro Colón, y otras íntimas y muy esperadas, como la del balcón.

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Música, escenografía, canto y actuación

Melodismo francés.- “Gounod tuvo éxito en la premiere, pero quedó opacada por el Fausto. Es una joya. La historia en sí es grandiosa y la visión musical del autor es característica: puro melodismo romántico francés”. (Alejandro Jassán, director)

Espacio escénico.- “Planteamos un espacio único que se ve intervenido por las acciones de los personajes y por algunos elementos. Hablamos de la Verona original del Renacimiento, fracturada por dos familias”. (María Concepción Perre, reggiseuse)

Peleas con espadas.- “Contamos con un equipo técnico fabuloso. Estamos trabajando desde marzo. Hay un gran trabajo actoral de los cantantes y del coro, con escenas de peleas con espadas bien resueltas”. (María de la Paz Perre, reggiseuse)

Movimientos masivos.- “El coro interviene sobre todo en el primer y en el tercer acto, en los movimientos más masivos escénicamente”. (Ricardo Sbrocco, director del Coro Estable)

Romántico y dramático.- “Cantar por primera vez en Tucumán es muy especial para mí. Estoy vocalmente conectado con el rol. Soy romántico, pero más bien dramático, como Romeo. Es mucho más que una simple historia de amor; hay un peso social y un sinfín de cuestiones. Romeo tiene una lectura de la realidad muy sincera”. (Pablo Bemsch, tenor)

De vida o muerte.- “Estar juntos es una cuestión de vida o muerte. Saben que si los descubren los van a matar. En mi vida personal podría decir que para mí cantar es una cuestión de vida o muerte. No me imagino la vida sin cantar”. (Mercedes Arcuri, soprano)

Gran espadachín.- “Mueren muchos inocentes a causa de un odio que no saben de dónde viene. Mercutio es un gran espadachín, muy joven muy idealista, ni se imagina que la muerte lo puede sorprender en cualquier momento”. (Sebastián Sorarrain, barítono)

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