Fueron suspendidas 10 cirugías por problemas con el suministro de agua

El Centro de Salud lleva cinco días con problemas en el suministro de agua y el viernes pasado tuvieron que cancelar 10 cirugías por este inconveniente.

Desde el hospital, el subdirector técnico Rafael Royna, aclaró que se trata de un problema interno que aún no logran descifrar, pero que consideran que en 48 horas podría solucionarse.

“Asumimos que el problema es interno y no está a la vista, se trata de caños subterráneos. Además la SAT nos da un bajo caudal de agua, por eso es que cortamos en algunos horarios, para poder recuperar el nivel necesario y llenar un tanque elevado”, declaró y agregó: "el viernes suspendimos 10 cirugías por este problema, pero hoy realizamos todas”.

Por otro lado, fuentes oficiales de la SAT, aseguraron que desde el martes 24 están trabajando con dos cuadrillas de operarios exclusivas para el nosocomio. Afirman que contribuyeron con tanques de agua e incluso con el soplado de cañerías internas, pero aún así no lograr llenar las cisternas.

“Está determinado que es un problema del hospital. La SAT les da presión suficiente y, si le estamos destinando mucho personal y dedicándonos a ayudar , es porque consideramos que es una institución pública que necesita colaboración, pero no somos responsables del problema”, aclararon fuentes oficiales de la empresa.

Royna, por su parte, dijo que están trabajando para resolver la situación y que desde ayer hasta hoy, la SAT llevó seis tanques de agua y ahora colocarían una bomba para tratar de llenar las cisternas.

“El problema está concentrado en el primer piso del hospital, donde están las salas de cirugía, por eso es que el viernes se suspendieron”, aclaró el subdirector.

Mientras tanto, los pacientes que ya tendrían que haber sido operados, temen que vuelvan a suspenderles la fecha de operación.

“A mi papá tendrían que haberlo operado de los intestinos el día viernes. En teoría le tocaría mañana, pero con esta falta ya no sé”, declaró Paola Molina, la hija de un paciente.

Las quejas no son solo por la cancelación de cirugías, sino que los enfermos y los cuidadores deben compartir el baño y cuando no hay agua, dicen, corren todo tipo de riesgos.

“El domingo fui a verla a mi hermana y no tenían agua. Tuve que hablarlo al hijo para que trajera bidones para que pudiera hacer sus necesidades e higienizarse. Largan una hora, cortan y vuelven a largar”, dijo Elvira del Carmen Gómez, que cuida a su hermana hasta que le realicen la operación.