Lo hallaron muerto en el inodoro

Belén fue condenada a ocho años de prisión, el pasado 19 de abril. Los jueces de la Sala III (Dante Ibáñez, Néstor Rafael Macoritto y Fabián Adolfo Fradejas) la encontraron culpable del delito de homicidio agravado por el vínculo mediando circunstancias extraordinarias de atenuación.

Todo comenzó el 21 de marzo de 2014, cuando la joven llegó al hospital Avellaneda con cólicos renales y diarrea. Según concluyeron los jueces, Belén dio a luz a un bebé de 32 semanas de gestación con vida en un baño del hospital. “Cortó el cordón umbilical, luego lo anudó y, con claras intenciones de provocar la muerte de su hijo, lo arrojó por las cañerías del baño y tiró la cadena”, sostuvieron.

Después de conocerse el fallo, la abogada Soledad Deza asumió la defensa de Belén y pelea por la libertad de la joven. Dice que su defendida no tuvo un parto prematuro -como dice el fallo- sino que sufrió un aborto espontáneo. Deza también sostiene que a Belén “le plantaron el feto” y que esta es “una causa armada”. El caso tuvo repercusión nacional y se realizaron varias movilazaciones pidiendo su liberación (foto).