26 Mayo 2016
la gaceta / foto de osvaldo ripoll
Escuela “Héctor A. Rodríguez”
“Vayan al fondo”.- ¡Ufa! si nosotros preguntamos y nos dijeron que podíamos sentarnos en cualquier lado. - “Es por orden de llegada”, agregó sonriente el docente que nos recibió. -”Disculpen, disculpen”. Y allí nos quedamos con Chicho y Ramoncito dispuestos a gozar del espectáculo. El patio de la escuela, bajo ese enorme tinglado se llenó de risas, de voces, de abrazos, en un reconocerse mutuamente; en abrazarnos en ese pequeño espacio del alma que prodiga el amor cuando la gente se une. Era el festejo de los 50 años de la escuela; 50 años de luchas, de anécdotas, de sufrimientos y logros, de amarguras, desengaños y un empujar siempre. La escuela parecía un enorme vientre materno que cobijaba a sus hijos, los alimentaba y en esa simbiosis espectacular de la enseñanza los arrojaba luego a la comunidad, al mundo, a prodigar sabiduría y esperanza. Sentía un orgullo denso en nombre de tantos padres que hoy ven a sus hijos protagonistas de una historia y me unía en una silenciosa plegaria con aquellos padres que ya no están. Los abanderados dignos portaron el estandarte de la patria, son jóvenes cuyos rostros parecieran esculpidos en piedra, con el orgullo en los ojos, con una sencillez estremecedora, al igual que la poesía de Sofía, junto al orgullo de pertenecer a esta tierra gaucha. Las palabras emocionadas de Lito, de Teresita, de Valeros y el inacabable cumpleaños feliz cantado mil veces. Maestro Héctor Antonio Rodríguez, aún sin conocerte te amábamos. Eras ese sentimiento que nos devoraba a todos, eras la Escuela. Qué importa que después, solo después, cuando el sentimiento calle, la razón nos diga quién eras, y como colgajos de un árbol inmenso sepamos que cuando cursabas 4º grado organizaste la “Escuelita de los pobres”, que más tarde, en 1956, junto a tu madre fundaste en García Fernández la Escuela de Orientación para la juventud “Teresa Ramos Carrión”, o que la muerte te arrebató un 25 de mayo de 1962 con sol, a tus 23 años.
Antonio Salazar
[email protected]
Jubilados I
Quiero referirme a la carta del lector Carlos Núñez, del 13/5, para expresar mi pensar y sentir al respecto. Tanto a nivel Federación como en diversos ámbitos, siempre ponderamos el conocimiento del tema Jubilados y Pensionados Transferidos, por parte del ministro de Economía -también integrante del sector- además de la franqueza y sensibilidad demostrada cuando era secretario de Hacienda y en cuya gestión se concretaron pagos de la asignación de la Ley 7.652 y hasta llegó a procurar la cancelación de las deudas por la retroactividad con un titulo público y que después se frustró por la indiferencia y el resentimiento del entonces gobernador. Hoy y a pesar de no atendernos el teléfono -pedidos de audiencia - desde la primera reunión que mantuvimos a poco de asumir su cargo, personalmente me resisto a perder las esperanzas en este funcionario y confío que en cuanto las posibilidades del erario lo permitan él promoverá una solución parcial o total a la afligente situación que padecemos desde setiembre del año 2009 por el congelamiento de la asignación contemplada en la ley antes referida. Aceptar lo contrario sería asumir que el ministro claudicó en sus convicciones y se presta a proseguir castigando a sus pares, máxime sabiendo la desprotección en que se encuentran al no contar con paritarias ni legisladores -bloque mayoritario- que tutelen sus derechos. Concluyo esta nota con una fuerte apuesta de confianza en los valores humanos y generosa disposición del ministro Eduardo Garvich, estando seguro que la misma no se verá defraudada.
Marcelo A. Venecia
[email protected]
Jubilados II
Seremos inmensamente felices hasta el último día de nuestras vidas si el gobernador Juan Manzur ordenara, ganándole de mano al presidente Mauricio Macri, actualizar y pagar con el 82% móvil automático el sueldo de los jubilados y pensionados provinciales y municipales transferidos a la Nación, con o sin juicios y en no menos de cuatro o cinco cuotas los dineros por retroactivo. Por favor, no crean que estoy soñando, porque en estos festejos del Bicentenario de la Independencia Argentina nosotros los jubilados y pensionados que hemos entregado lo mejor de nuestras vidas, construyendo esta patria hermosa que estamos celebrando, pertenecemos a ese ejército de miles de argentinos al que hoy rendimos honores..
Ángel Ricardo Salguero [email protected]
Jubilados III
A propósito de mi carta “Salario mínimo” (23/5), quisiera manifestar que no es mi intención polemizar; es más, no desconozco la existencia de la Ley de movilidad jubilatoria. Mi comentario fue acerca de que sería bueno que alguna vez se acuerden de los jubilados, más allá de las promesas, y que cuando ajusten el salario del sector pasivo tengan en cuenta la realidad del país; entre otras cosas, la inflación, el salario mínimo, la canasta básica, etcétera.
Arnaldo Grosvald
[email protected]
Dormir en la calle
El pasado martes, en mi caminar hacia el centro, y siendo las 7.45 horas, el termómetro marcaba 9 grados. Una temperatura que la mayoría de los tucumanos no estamos acostumbrados a soportar. Por ello me impactó sobremanera el ver a una persona durmiendo a la intemperie en calle Salta al 300, y por si fuera poco al doblar en calle San Martín al 800, y a media cuadra, me tope con otra imagen que superó a la anterior. Allí había sobre un colchón, dos personas durmiendo y a la par una silla de ruedas (foto), lo que me hizo suponer que uno de los que allí dormían es un discapacitado. La verdad que esas dos escenas por demás inhumanas, me dejó muy impresionado. Es muy lamentable tener que naturalizar estas vivencias y que para quienes transitamos diariamente parezcan como invisibles en nuestra sociedad. Pero no lo son. Así como estas dos escenas, estoy convencido que debe haber muchísimos casos más en nuestra ciudad capital. Por ello es que apelo a este prestigioso espacio que gentilmente nos cede LA GACETA, para dirigirme a las autoridades, sean del gobierno provincial, municipal y/o alguna institución social, a los efectos de que a estos seres humanos se les pueda brindar lo mínimo indispensable para que puedan cambiar esa indigna manera de vivir; caso contrario estaríamos ante el delito de “abandono de persona”.
Rodolfo Emilio Castillo
[email protected]
Plan Belgrano y Ferrocarril
A propósito del Plan Belgrano y del Ferrocarril (carta de Adrián Silva, 25/5), al que adhiero en su totalidad, me permito hacer un pequeño agregado. Este tipo de obras necesita grandes inversiones y, en la medida de lo posible, habría que comenzar por los ramales que ya están disponibles, agregándoles lo necesario para su funcionamiento en poco tiempo, y proyectándolo para el futuro en una doble vía. Me refiero que existe un ramal que podría ser utilizado de inmediato: es el que va hacia el Este por el ramal Mitre. Se podría iniciar en la Estación Mitre en calle Corrientes hasta la localidad de Estación Aráoz (foto), conectando importantes poblaciones inmensamente pobladas: Alderetes, Cevil Pozo, Cruz Alta, Ranchillos, hasta llegar a Estación Aráoz, y desde allí regresa. Incluso, se podrían programar cuatro viajes al día, partiendo el primero desde Estación Aráoz a las 6.30, y luego a las 15. Y partiendo desde Tucumán hacia aquella localidad, a las 13 y 20.30 horas. Creo que si todas las autoridades se lo proponen, este proyecto no debería ser imposible de concretar, y ser el primer intento de reiniciar un transporte público en tren, que en forma arbitraria le fue quitado mezquinamente a nuestro querido Tucumán.
Luis Alberto Singh
[email protected]
Estado de incertidumbre
Por estos días, la vida de nuestra sociedad no es muy halagüeña. Casi todos los hábitos cotidianos cambiaron, desde la forma de alimentarnos, hasta en lo recreativo. Todos padecemos los altos costos de alimentos, remedios, vestimenta para combatir el frío, etcétera. Pero lo más preocupante son los servicios de luz, gas, agua, que golpean los salarios ya magros, con aumentos usurarios. Sumado al temor a perder el empleo, por tantos despidos, crea entonces un estado de incertidumbre, jaqueando nuestra salud, pues trae de la mano frustraciones diversas, al pensar en pequeños emprendimientos truncados. Impresiona el silencio de la gente que a veces se ve triste y apesadumbrada, que hoy en día apela a una megacreatividad, en todos los sentidos, para poder pasarla más o menos regular. Pensemos un momento en ese padre, con más de cinco hijos, siete, tal vez, y que recibe por día por su trabajo, no más de $ 100. ¿Qué pasará con él? Parece un castigo. ¿Qué nos pasó? Es de valientes reconocer las equivocaciones en los pasos que damos, pero pensemos también que enaltece mirar la vida de los demás que soportan, hoy por hoy, un irremediable y silencioso sufrimiento.
Josefina Argañaraz
Guillermo Rawson 168
San Miguel de Tucumán
Fanatismo
Algunos seguidores de “Procambiemos” son autoritarios. El 31/1, F. Sánchez manda “Sáquese el sobretodo K para opinar”: el 15/5, A. Cabral, nombrándome, dice: “El lector debió decir...”. Hay quienes, aconsejando, mandan. El 12/5. un lector recomienda a otros “no discutir con necios e ignorantes” que piensen o hablen bien de Néstor o Cristina. Situación que hace recordar un tango al que le haré pequeños cambios. “Atenti, lector, seguí mis consejos, yo soy lector viejo y te quiero bien”. Adhiero a lo escrito por M. Funes (12/5): “no podemos avanzar si nos azuzan con enfrentamientos en los que cada uno busca su victoria sobre la anulación del oponente”. A los que van por la ancha avenida del medio. A los que no son ni lo uno ni lo otro, pero opinan odiando a Cristina. Al “peronista” que adhiere a la ley del arrepentido (carta del 7/5). La realidad, que es la única verdad, responde. El ingeniero habla demasiado de cambio, pero no cambia. Usó el mismo estilo, tanto para estatizar sus deudas en 1982 como para arreglar con los fondos buitres, endeudando por años al pueblo argentino. Voy con algunos “cambios” que ejecutó el ingeniero: a) Con gran “respeto” a la libertad de expresión, abusando del poder, acalló a periodistas, silenció programas de radio y TV no afines con sus objetivos. b) “Respetando” a la población que paga sus impuestos, él y sus ceos los eluden, fugan divisas y las esconden en paraísos fiscales. c) Su vida empresaria está teñida por un sinnúmero de procesos judiciales, adormilados por la justicia independiente. d) Puso su pie sobre esta al pedir que haga cesar su mandato a CFK a las 23.59 del 9/12/15. Hizo esto por el temor por verse opacado por el brillo político de una estadista como Cristina. e) Arrodillado ante el altar de la especulación, benefició a los tenedores de papeles en default, perjudicando al pueblo. f) Del ostracismo internacional al mundo de la angurria y del offshore. g) Está clarísimo. Cero retenciones. Apertura indiscriminada de importaciones, anulando mano de obra argentina. Tarifazos. Gobernar para los ricos. Simplemente oligarquía. h) Ante el ingeniero, empresarios firmaron en un papel de envoltorio el compromiso de no despedir más trabajadores. Los actuales inquilinos de la Casa Rosada desprecian el trabajo y al trabajador. Hoy no se habla del impuesto a las ganancias, del 82% móvil, de los que no tienen viviendas, de leyes que beneficien a la población, sino de cómo hacer un asado sin carne, de si a las papas las comemos con o sin cáscara, de cómo andar en auto sin ponerle nafta, de una ley que prohíba despidos por 180 días. Estamos ahí nomás de volver al “hueso gustador”. Acompaño al lector Centurión, así como a O. Beltrán, C. Peral Tobar y tantos más a los que perder elecciones no les significa perder convicciones. Seguiré aplaudiendo proyectos políticos que invitan a soñar y crecer con inclusión, no así a los que con comportamientos antipopulares provocan pesadillas.
Hugo Vallejo
M. Estrada 3.850
San Miguel de Tucumán
Parece mentira
Parece mentira tener que decir estas palabras, pero son los hechos, la certeza de tener la absoluta presencia de las mismas medidas de siempre, para no pensar en un cambio de rumbo en nuestro país. La Argentina tiene otra vez que recurrir a un blanqueo de capitales, en estos tiempos cuando todo puede saberse y lo que está oculto si es malhabido, poco lo disfrutarán sus dueños si no hubiera más blanqueos y se aplicara la ley. Que sí existe, y no se la aplica. El porqué no se aplica, sencillamente o es por conveniencia o por ignorancia. Y de esta forma, no se consolida la confianza para iniciar las grandes obras de una vez por todas. La sensación de que no se recurre a los millones de desocupados, ahora, no dentro de un año, ni dentro de seis meses, es que no se llama para estas obras. Debemos preguntarnos. ¿No se hicieron los planes? ¿acaso se cree que los dineros vendrán de algún otro lado que no sea nuestra enorme productividad, esa enorme masa trabajadora que aporta junto a los actuales empresarios que quedaron “vivos” después de tanto ir y venir de la política económica nacional? Si el gobierno no tiene confianza en el potencial argentino, en la capacidad de nuestros profesionales para encomendarles las grandes obras, está equivocado, y aún puede corregirse y emprender el cambio en serio. Con el corazón, espero que se haga lo que se debe hacer.
Carmelo J. Felice
[email protected]
“Vayan al fondo”.- ¡Ufa! si nosotros preguntamos y nos dijeron que podíamos sentarnos en cualquier lado. - “Es por orden de llegada”, agregó sonriente el docente que nos recibió. -”Disculpen, disculpen”. Y allí nos quedamos con Chicho y Ramoncito dispuestos a gozar del espectáculo. El patio de la escuela, bajo ese enorme tinglado se llenó de risas, de voces, de abrazos, en un reconocerse mutuamente; en abrazarnos en ese pequeño espacio del alma que prodiga el amor cuando la gente se une. Era el festejo de los 50 años de la escuela; 50 años de luchas, de anécdotas, de sufrimientos y logros, de amarguras, desengaños y un empujar siempre. La escuela parecía un enorme vientre materno que cobijaba a sus hijos, los alimentaba y en esa simbiosis espectacular de la enseñanza los arrojaba luego a la comunidad, al mundo, a prodigar sabiduría y esperanza. Sentía un orgullo denso en nombre de tantos padres que hoy ven a sus hijos protagonistas de una historia y me unía en una silenciosa plegaria con aquellos padres que ya no están. Los abanderados dignos portaron el estandarte de la patria, son jóvenes cuyos rostros parecieran esculpidos en piedra, con el orgullo en los ojos, con una sencillez estremecedora, al igual que la poesía de Sofía, junto al orgullo de pertenecer a esta tierra gaucha. Las palabras emocionadas de Lito, de Teresita, de Valeros y el inacabable cumpleaños feliz cantado mil veces. Maestro Héctor Antonio Rodríguez, aún sin conocerte te amábamos. Eras ese sentimiento que nos devoraba a todos, eras la Escuela. Qué importa que después, solo después, cuando el sentimiento calle, la razón nos diga quién eras, y como colgajos de un árbol inmenso sepamos que cuando cursabas 4º grado organizaste la “Escuelita de los pobres”, que más tarde, en 1956, junto a tu madre fundaste en García Fernández la Escuela de Orientación para la juventud “Teresa Ramos Carrión”, o que la muerte te arrebató un 25 de mayo de 1962 con sol, a tus 23 años.
Antonio Salazar
[email protected]
Jubilados I
Quiero referirme a la carta del lector Carlos Núñez, del 13/5, para expresar mi pensar y sentir al respecto. Tanto a nivel Federación como en diversos ámbitos, siempre ponderamos el conocimiento del tema Jubilados y Pensionados Transferidos, por parte del ministro de Economía -también integrante del sector- además de la franqueza y sensibilidad demostrada cuando era secretario de Hacienda y en cuya gestión se concretaron pagos de la asignación de la Ley 7.652 y hasta llegó a procurar la cancelación de las deudas por la retroactividad con un titulo público y que después se frustró por la indiferencia y el resentimiento del entonces gobernador. Hoy y a pesar de no atendernos el teléfono -pedidos de audiencia - desde la primera reunión que mantuvimos a poco de asumir su cargo, personalmente me resisto a perder las esperanzas en este funcionario y confío que en cuanto las posibilidades del erario lo permitan él promoverá una solución parcial o total a la afligente situación que padecemos desde setiembre del año 2009 por el congelamiento de la asignación contemplada en la ley antes referida. Aceptar lo contrario sería asumir que el ministro claudicó en sus convicciones y se presta a proseguir castigando a sus pares, máxime sabiendo la desprotección en que se encuentran al no contar con paritarias ni legisladores -bloque mayoritario- que tutelen sus derechos. Concluyo esta nota con una fuerte apuesta de confianza en los valores humanos y generosa disposición del ministro Eduardo Garvich, estando seguro que la misma no se verá defraudada.
Marcelo A. Venecia
[email protected]
Jubilados II
Seremos inmensamente felices hasta el último día de nuestras vidas si el gobernador Juan Manzur ordenara, ganándole de mano al presidente Mauricio Macri, actualizar y pagar con el 82% móvil automático el sueldo de los jubilados y pensionados provinciales y municipales transferidos a la Nación, con o sin juicios y en no menos de cuatro o cinco cuotas los dineros por retroactivo. Por favor, no crean que estoy soñando, porque en estos festejos del Bicentenario de la Independencia Argentina nosotros los jubilados y pensionados que hemos entregado lo mejor de nuestras vidas, construyendo esta patria hermosa que estamos celebrando, pertenecemos a ese ejército de miles de argentinos al que hoy rendimos honores..
Ángel Ricardo Salguero [email protected]
Jubilados III
A propósito de mi carta “Salario mínimo” (23/5), quisiera manifestar que no es mi intención polemizar; es más, no desconozco la existencia de la Ley de movilidad jubilatoria. Mi comentario fue acerca de que sería bueno que alguna vez se acuerden de los jubilados, más allá de las promesas, y que cuando ajusten el salario del sector pasivo tengan en cuenta la realidad del país; entre otras cosas, la inflación, el salario mínimo, la canasta básica, etcétera.
Arnaldo Grosvald
[email protected]
Dormir en la calle
El pasado martes, en mi caminar hacia el centro, y siendo las 7.45 horas, el termómetro marcaba 9 grados. Una temperatura que la mayoría de los tucumanos no estamos acostumbrados a soportar. Por ello me impactó sobremanera el ver a una persona durmiendo a la intemperie en calle Salta al 300, y por si fuera poco al doblar en calle San Martín al 800, y a media cuadra, me tope con otra imagen que superó a la anterior. Allí había sobre un colchón, dos personas durmiendo y a la par una silla de ruedas (foto), lo que me hizo suponer que uno de los que allí dormían es un discapacitado. La verdad que esas dos escenas por demás inhumanas, me dejó muy impresionado. Es muy lamentable tener que naturalizar estas vivencias y que para quienes transitamos diariamente parezcan como invisibles en nuestra sociedad. Pero no lo son. Así como estas dos escenas, estoy convencido que debe haber muchísimos casos más en nuestra ciudad capital. Por ello es que apelo a este prestigioso espacio que gentilmente nos cede LA GACETA, para dirigirme a las autoridades, sean del gobierno provincial, municipal y/o alguna institución social, a los efectos de que a estos seres humanos se les pueda brindar lo mínimo indispensable para que puedan cambiar esa indigna manera de vivir; caso contrario estaríamos ante el delito de “abandono de persona”.
Rodolfo Emilio Castillo
[email protected]
Plan Belgrano y Ferrocarril
A propósito del Plan Belgrano y del Ferrocarril (carta de Adrián Silva, 25/5), al que adhiero en su totalidad, me permito hacer un pequeño agregado. Este tipo de obras necesita grandes inversiones y, en la medida de lo posible, habría que comenzar por los ramales que ya están disponibles, agregándoles lo necesario para su funcionamiento en poco tiempo, y proyectándolo para el futuro en una doble vía. Me refiero que existe un ramal que podría ser utilizado de inmediato: es el que va hacia el Este por el ramal Mitre. Se podría iniciar en la Estación Mitre en calle Corrientes hasta la localidad de Estación Aráoz (foto), conectando importantes poblaciones inmensamente pobladas: Alderetes, Cevil Pozo, Cruz Alta, Ranchillos, hasta llegar a Estación Aráoz, y desde allí regresa. Incluso, se podrían programar cuatro viajes al día, partiendo el primero desde Estación Aráoz a las 6.30, y luego a las 15. Y partiendo desde Tucumán hacia aquella localidad, a las 13 y 20.30 horas. Creo que si todas las autoridades se lo proponen, este proyecto no debería ser imposible de concretar, y ser el primer intento de reiniciar un transporte público en tren, que en forma arbitraria le fue quitado mezquinamente a nuestro querido Tucumán.
Luis Alberto Singh
[email protected]
Estado de incertidumbre
Por estos días, la vida de nuestra sociedad no es muy halagüeña. Casi todos los hábitos cotidianos cambiaron, desde la forma de alimentarnos, hasta en lo recreativo. Todos padecemos los altos costos de alimentos, remedios, vestimenta para combatir el frío, etcétera. Pero lo más preocupante son los servicios de luz, gas, agua, que golpean los salarios ya magros, con aumentos usurarios. Sumado al temor a perder el empleo, por tantos despidos, crea entonces un estado de incertidumbre, jaqueando nuestra salud, pues trae de la mano frustraciones diversas, al pensar en pequeños emprendimientos truncados. Impresiona el silencio de la gente que a veces se ve triste y apesadumbrada, que hoy en día apela a una megacreatividad, en todos los sentidos, para poder pasarla más o menos regular. Pensemos un momento en ese padre, con más de cinco hijos, siete, tal vez, y que recibe por día por su trabajo, no más de $ 100. ¿Qué pasará con él? Parece un castigo. ¿Qué nos pasó? Es de valientes reconocer las equivocaciones en los pasos que damos, pero pensemos también que enaltece mirar la vida de los demás que soportan, hoy por hoy, un irremediable y silencioso sufrimiento.
Josefina Argañaraz
Guillermo Rawson 168
San Miguel de Tucumán
Fanatismo
Algunos seguidores de “Procambiemos” son autoritarios. El 31/1, F. Sánchez manda “Sáquese el sobretodo K para opinar”: el 15/5, A. Cabral, nombrándome, dice: “El lector debió decir...”. Hay quienes, aconsejando, mandan. El 12/5. un lector recomienda a otros “no discutir con necios e ignorantes” que piensen o hablen bien de Néstor o Cristina. Situación que hace recordar un tango al que le haré pequeños cambios. “Atenti, lector, seguí mis consejos, yo soy lector viejo y te quiero bien”. Adhiero a lo escrito por M. Funes (12/5): “no podemos avanzar si nos azuzan con enfrentamientos en los que cada uno busca su victoria sobre la anulación del oponente”. A los que van por la ancha avenida del medio. A los que no son ni lo uno ni lo otro, pero opinan odiando a Cristina. Al “peronista” que adhiere a la ley del arrepentido (carta del 7/5). La realidad, que es la única verdad, responde. El ingeniero habla demasiado de cambio, pero no cambia. Usó el mismo estilo, tanto para estatizar sus deudas en 1982 como para arreglar con los fondos buitres, endeudando por años al pueblo argentino. Voy con algunos “cambios” que ejecutó el ingeniero: a) Con gran “respeto” a la libertad de expresión, abusando del poder, acalló a periodistas, silenció programas de radio y TV no afines con sus objetivos. b) “Respetando” a la población que paga sus impuestos, él y sus ceos los eluden, fugan divisas y las esconden en paraísos fiscales. c) Su vida empresaria está teñida por un sinnúmero de procesos judiciales, adormilados por la justicia independiente. d) Puso su pie sobre esta al pedir que haga cesar su mandato a CFK a las 23.59 del 9/12/15. Hizo esto por el temor por verse opacado por el brillo político de una estadista como Cristina. e) Arrodillado ante el altar de la especulación, benefició a los tenedores de papeles en default, perjudicando al pueblo. f) Del ostracismo internacional al mundo de la angurria y del offshore. g) Está clarísimo. Cero retenciones. Apertura indiscriminada de importaciones, anulando mano de obra argentina. Tarifazos. Gobernar para los ricos. Simplemente oligarquía. h) Ante el ingeniero, empresarios firmaron en un papel de envoltorio el compromiso de no despedir más trabajadores. Los actuales inquilinos de la Casa Rosada desprecian el trabajo y al trabajador. Hoy no se habla del impuesto a las ganancias, del 82% móvil, de los que no tienen viviendas, de leyes que beneficien a la población, sino de cómo hacer un asado sin carne, de si a las papas las comemos con o sin cáscara, de cómo andar en auto sin ponerle nafta, de una ley que prohíba despidos por 180 días. Estamos ahí nomás de volver al “hueso gustador”. Acompaño al lector Centurión, así como a O. Beltrán, C. Peral Tobar y tantos más a los que perder elecciones no les significa perder convicciones. Seguiré aplaudiendo proyectos políticos que invitan a soñar y crecer con inclusión, no así a los que con comportamientos antipopulares provocan pesadillas.
Hugo Vallejo
M. Estrada 3.850
San Miguel de Tucumán
Parece mentira
Parece mentira tener que decir estas palabras, pero son los hechos, la certeza de tener la absoluta presencia de las mismas medidas de siempre, para no pensar en un cambio de rumbo en nuestro país. La Argentina tiene otra vez que recurrir a un blanqueo de capitales, en estos tiempos cuando todo puede saberse y lo que está oculto si es malhabido, poco lo disfrutarán sus dueños si no hubiera más blanqueos y se aplicara la ley. Que sí existe, y no se la aplica. El porqué no se aplica, sencillamente o es por conveniencia o por ignorancia. Y de esta forma, no se consolida la confianza para iniciar las grandes obras de una vez por todas. La sensación de que no se recurre a los millones de desocupados, ahora, no dentro de un año, ni dentro de seis meses, es que no se llama para estas obras. Debemos preguntarnos. ¿No se hicieron los planes? ¿acaso se cree que los dineros vendrán de algún otro lado que no sea nuestra enorme productividad, esa enorme masa trabajadora que aporta junto a los actuales empresarios que quedaron “vivos” después de tanto ir y venir de la política económica nacional? Si el gobierno no tiene confianza en el potencial argentino, en la capacidad de nuestros profesionales para encomendarles las grandes obras, está equivocado, y aún puede corregirse y emprender el cambio en serio. Con el corazón, espero que se haga lo que se debe hacer.
Carmelo J. Felice
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