El abogado de “Jazo” está preocupado

Luego de pasar una semana detenido en Santiago del Estero, el barrabrava de Atlético Tucumán Jorge “Jazo” Acevedo fue traído a Tucumán el viernes a las 20. Se encontraba prófugo.

Apenas llegó, se lo sentó frente al fiscal Diego López Ávila por una denuncia efectuada en 2013, según la cual Acevedo baleó la casa de un entonces adolescente de 15 años. Dos de esos disparos dieron en la víctima uno en el abdomen y otro en la pierna. Varios testigos lo señalaron como el autor de los disparos. Ante López Ávila, “Jazo” negó terminantemente haber efectuado los disparos. Luego de la declaración, por orden del fiscal fue alojado en la unidad N°9 del servicio penitenciario provincial hasta tanto se resuelva la situación procesal. Esta situación generó temor en los defensores de Acevedo, los doctores Exequiel Filmann y Manuel Pedernera.

La preocupación se da porque en la unidad en la que se encuentra detenido Acevedo trabaja Daniel Albornoz, un guardiacárcel que denunció a “Jazo” por haberle pegado un tiro en la pierna. A raíz de este disparo, Albornoz perdió una extremidad. Los abogados temen represalias del denunciante.

“Acevedo no puede estar en ahí justamente porque ahí trabaja albornoz. Nuestra preocupación es por su situación psicofísica también porque en otras ocasiones le provocaron malos tratos los guardiacárceles de ese lugar”, informó Pedernera.

“Por este motivo, decidimos con el doctor Filman presentar un recurso de hábeas corpus, a los fines de que a nuestro defendido se le realice un examen médico semanal, con el que podremos constatar fehacientemente que no haya irregularidades en el trato”, agregó.

Acevedo se encuentra en la unidad de detención en calidad de detenido. Esto quiere decir que López Ávila tiene 10 días hábiles para solicitar, en caso de que lo creyera necesario, el pedido al juez correspondiente para que su situación cambie a prisión preventiva.