Importancia del peatón en el ordenamiento del tránsito

Importancia del peatón en el ordenamiento del tránsito

Ya en la década de 1990 comenzaron a hacerse estudios sobre el tránsito de San Miguel de Tucumán con la idea de encontrar soluciones duraderas para su reordenamiento. Se formularon varias sugerencias, como las del Plan Estratégico Urbano Territorial de San Miguel de Tucumán de 2005, que proponía, entre otras cosas, avanzar en la peatonalización como un modo de desalentar que los vehículos ingresaran al centro y beneficiar al transeúnte que pareciera ser menos importante que los vehículos en Tucumán. Poco o nada se llevó a la práctica. En 2011, una periodista de LA GACETA recorrió en un automóvil, en las horas pico, la 24 de Septiembre, entre Marco Avellaneda y El Bajo. Entre infracciones, bocinazos, frenadas, mal humor, peatones que cruzaban por cualquier parte, demoró 26 minutos en recorrer 12 cuadras. Un relevamiento municipal de 2014 informó que por hora circulaban 165.000 vehículos en las 12 manzanas centrales de la ciudad; 330.000 vehículos transitaban diariamente; 800.000 peatones se movían por día en el área céntrica y unas 475.000 personas empleaban el ómnibus para trasladarse en el área metropolitana. Una de las ideas propuestas era establecer calles exclusivas para el transporte público, así como calles compartidas, pero con sendas exclusivas para cada tipo de vehículo. El 22 de marzo pasado, informamos que funcionarios municipales analizaban la posibilidad de crear calles exclusivas para la circulación de los ómnibus.

Nick Tyler, experto británico en transporte que vino a disertar a nuestra ciudad, dijo que lo más saludable y más barato es invertir en mejorar los viajes peatonales; luego invertir en bicicletas públicas y finalmente, en el transporte. “Aquí veo que son un poco grandes para estas calles... los colectivos pueden ser más pequeños, cambiarles la frecuencia, que los usuarios tengan menos tiempo de espera. Hay que estudiar todo muy bien. La cantidad de motos en las calles es una señal de que no existe un buen sistema de transporte público para alcanzar las necesidades de la gente”, dijo. Y agregó: “si charlamos con las personas entenderemos cuáles son las necesidades y deseos para saber cuál es el transporte público que debemos diseñar. Los pasajeros hoy quieren hacer distintas cosas en su viaje, quieren ir cómodos, tener Wi-Fi. Y las líneas de colectivo siguen igual que en los años 20, cuando los estilos de vida cambiaron totalmente. Hay un verdadero quiebre entre los deseos de las personas y lo que ofrecen hoy los transportes. Por eso no los usan”.

Para diagnosticar una enfermedad, el médico interroga al paciente sobre sus dolencias, lo cual que le permite armar su historia clínica, lo revisa y luego formula el diagnóstico y el tratamiento. No podrá curarlo con solo mirarlo o con lo que le dicen los familiares. El protagonista de una ciudad debería ser el peatón, por lo tanto, como señala Tyler, habría que preguntarle a él cuáles son sus necesidades. El Plan Estratégico de 2005 fue elaborado por urbanistas, funcionarios y vecinos, sin embargo, se lo acató en forma fragmentaria. En más de dos décadas, los gobiernos de San Miguel de Tucumán no han sido capaces de dar soluciones en materia de tránsito. Las decisiones que se toman desde un escritorio, sin escuchar lo que necesita la gente, están destinadas al fracaso. “Si tenemos una política más dirigida a la persona que al vehículo tendremos una ciudad mucho más civilizada y más feliz”, expresó Nick Tyler.

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