23 Marzo 2016
La controvertida partida de fondos de uso discrecional de la Legislatura denominada “ayudas sociales a personas” volvió a resonar en el recinto legislativo. Durante el período de manifestaciones generales, voces del oficialismo y de la oposición coincidieron en apuntar contra el legislador macrista Luis Brodersen, quien en declaraciones periodísticas había acusado a quienes manejan esos dineros de estafar a la sociedad.
Los encargados de responderle al integrante del bloque unipersonal PRO-A Propuesta Republicana fueron el vicepresidente 2° de la Cámara, Ariel García (UCR) y el jefe de la bancada oficialista, Ramón Santiago Cano. “Soy un militante de toda la vida. No voy a tolerar que se quiera manchar nuestra trayectoria por ganar un lugarcito en los diarios”, aseveró el parlamentario radical.
El domingo, en una nota publicada por este diario, Brodersen había reiterado su opinión crítica contra los gastos sociales, cuestionando en especial a los miembros de la anterior conformación del Poder Legislativo. “Es increíble que mientras el Gobierno se ve en apuros para reactivar la obra pública y aún más, para cumplir con sus compromisos salariales, en la Legislatura se distribuyan discrecionalmente millones de pesos que son asignados y utilizados sin control ni rendiciones de cuentas”, manifestó, y añadió: “yo me atrevería a agregar que son una estafa a la gente que nos votó para legislar y no para disponer de fondos espurios como si fuéramos señores feudales, que derramamos graciosamente nuestra riqueza sobre los pobres”.
El presidente del bloque Tucumán Crece se mostró ofuscado por la comparación realizada por Brodersen. “Desde los 12 años que soy trabajador. Tengo 40 años de aportes; la mayor parte como trabajador, luego como dirigente sindical y por último como político. Soy un humilde trabajador, no soy un prestamista ni vivo de las necesidades ajenas”, manifestó Cano, haciendo referencia a la actividad privada que desarrolla el parlamentario del PRO, quien es propietario de una tarjeta de crédito. “No me considero un señor feudal ni nada por el estilo”, remarcó.
García, por su parte, cuestionó a Brodersen -aunque, del mismo modo que Cano, sin nombrarlo- por no expresar sus puntos de vista en el recinto y, por el contrario, cuestionar a sus pares a través de la prensa. “Infamemente quieren hacernos creer que los que integramos este Poder Legislativo estafamos a la gente. Y lo más curioso es que quienes son capaces de escribir una declaración no son capaces de debatir en el recinto. No he visto en ningún momento que ingresara por Mesa de Entradas una propuesta que tienda a colaborar para encontrar una solución para los que menos tienen”, aseveró. El líder de los “Boinas Blancas” agregó: “la democracia nos ha costado mucho a los argentinos, como para que venga un parlamentario financista a decirnos que este poder es una estafa”.
El año pasado, bajo la presidencia del actual gobernador Juan Manzur, la Cámara utilizó más de $ 500 millones pertenecientes a la partida “ayudas sociales a personas” (el presupuesto anual superaba los $ 1.500 millones). En una serie de notas publicadas en noviembre, LA GACETA demostró cómo el dinero de esa partida era trasladado en valijas desde una sucursal del Banco de Tucumán-Grupo Macro hasta el edificio legislativo en un vehículo oficial. Sobre la base de esos informes, el abogado y peronista disidente Oscar López formuló denuncias en la Justicia provincial y en la federal.
“Clientelismo”
El legislador Brodersen prefirió no responderles a sus pares en el recinto. Luego de la sesión, apuntó especialmente contra García, a quien le reprochó haber formado parte del cuerpo que gastó $ 500 millones de gastos sociales en un año. “¿Cuánto nos costó a los tucumanos la Legislatura anterior, de la cual García formó parte? El cálculo es sencillo y está publicado en todos lados: nos costó cientos de millones de pesos, que fueron manejados discrecionalmente por un puñado de personas que aún no explicaron en qué gastaron ese dinero”, afirmó.
“Fuimos elegidos para legislar, no para hacer una asistencia social que, en manos de quien se somete a elecciones cada cuatro años, corre el riesgo de convertirse en clientelismo. Para ello existen organismos específicos, con presupuestos claramente definidos”, agregó el macrista, quien reiteró que seguirá sin percibir dinero de esa partida. “Quieren seguir cobrando los gastos sociales y no tienen un solo argumento válido para justificarlo”, disparó.
“El juez Pisa me amenazó”
El radical Valdez solicitó un juicio político contra un magistrado del fuero penal
El legislador Fernando Valdez (UCR) solicitó en plena sesión la destitución mediante juicio político del juez de Instrucción Penal Francisco Pisa, luego de explicar que el magistrado lo amenazó durante el fin de semana. “Estaba tomando un café en un bar céntrico junto a mi esposa cuando se me acercó el juez Pisa y me dijo: ‘ya vas a tener noticias mías, cuidate’. Cuando le pregunté si me estaba amenazando, una hija de él se lo llevó. La verdad que es una situación de bochorno institucional”, relató Valdez. En 2014, el radical había presentado un pedido de juicio político contra el magistrado, pero fue rechazado in límine por el entonces titular de la comisión de Juicio Político de la Legislatura, Sisto Terán Nougués. “Aquel pedido de destitución es mi único vínculo con él, sólo lo conozco porque es una figura pública. Le he cuestionado porque intervino en causas en las que demostró actuar en favor de personas vinculadas al poder y favoreciendo la impunidad, donde rechaza planteos con celeridad, resuelve absoluciones o ‘duerme’ los expedientes indebidamente. Entre las investigaciones en las que denuncio mal desempeño, se encuentran la causa ‘Funsal’ y ‘Fundación Pibe’. El episodio fue una amenaza por mi función legislativa”, denunció públicamente el parlamentario radical. La Cámara remitió el pedido de Valdez a la comisión de Juicio Político.
Pidió la renuncia de Rojkés
La legisladora Stella Maris Córdoba arremetió contra la ex senadora y esposa de Alperovich
“Le pido públicamente a la señora Beatriz Rojkés de Alperovich que renuncie. Si tiene un poquito de grandeza que deje el cargo como presidenta del PJ”. La legisladora amayista Stella Maris Córdoba arremetió contra la ex senadora y esposa del ex gobernador José Alperovich, y solicitó que dimitiera en su cargo como máxima autoridad del Partido Justicialista. En la semana, se conoció el dictamen del Inadi en el que afirma que Rojkés sí discriminó al damnificado por las inundaciones de marzo de 2015 Cristian Bulacio (lo llamó “vago de miércoles” y “animal”, entre otros apelativos). “Me avergüenzo como mujer y militante de lo que hizo esta ex senadora, nos avergonzó a nivel internacional. Las mujeres que militamos, que nos preparamos, que hacemos todo lo posible por hacer mérito en la vida, cuando vemos que a una mujer se le da la chance de ser presidenta provisional del Senado y en cada oportunidad muestra que no está a la altura de las circunstancias... sentimos que retrocedemos muchos pasos”, expresó Córdoba con dureza. Cuestionó también la defensa que realizó el hijo de Rojkés, Gabriel Alperovich, por las redes sociales, ya que, a su juicio, reiteró la ofensa. “Cuando un peronista comienza a sentirse más de lo que es, empieza a convertirse en oligarca”, espetó la legisladora, citando una de las 20 verdades peronistas.
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