14 Febrero 2016
SIN EDAD. Midler tiene la juventud incorporada, dicen sus colegas. reuters
Michael Paulson / The New York Times
Claro que ha visto la película y, en lo general, estaba familiarizada con la historia, pero cuando el productor Scott Rudin empezó a llamarla hace unos meses para pedirle que considerara protagonizar una nueva puesta en escena del musical en Broadway, se dio cuenta de que necesitaba averiguar más.
Fue a la biblioteca pública de las artes escénicas de Nueva York para ver una película de Carol Channing en una versión de 1995 y recurrió a YouTube para ver clips de Pearl Bailey en la reposición de 1975. Vio “The matchmaker”, una cinta de 1958, estelarizada por Shirley Booth, una adaptación de la obra de teatro de Thornton Wilder, en la que está inspirado el musical.
Y eso no fue todo. Leyó las notas de la producción que hizo Gower Champion, quien dirigió el montaje original en 1964. Escuchó álbumes del elenco. Y finalmente leyó el guión, que la convenció de que el personaje del título, una viuda de principios del siglo XX llamada Dolly Gallagher Levi, tenía más necesidades y estaba más desesperada de lo que Midler se había dado cuenta.
Dijo que sí.
Enormemente popular
“Tiene una gran cantidad de peso y la partitura es irresistible”, explicó Midler en una entrevista por teléfono, horas después de que se anunciara su contrato para estelarizar un nuevo montaje de “Hello, Dolly!”. “Es algo muy estadounidense, con una cualidad alegre, un tipo de cualidad de que sí se puede y una dulzura increíble, y en estos tiempos terribles, cuando todo el mundo parece estar en llamas, parece algo que a la gente le encantaría ver”.
La Dolly de Midler llegará a Broadway en 2017, 50 años después de que la actriz se presentara por primera vez ahí como Tzeitel en la producción original de “Fiddler on the roof”. En los años intermedios se ha convertido en una artista enormemente popular, mejor conocida por sus papeles cinematográficos y sus conciertos. En los 70 se presentó en Broadway en una serie de espectáculos en concierto; retornó en 2013 con la obra de una sola mujer (“que me satisfizo al infinito”) titulada “I’ll eat you last: a chat with Sue Mengers”.
En el mismo período, “Dolly” se ha transformado en uno de los musicales estadounidenses mejor conocidos, que más se ha montado, parodiado y fetichizado (entre los entusiastas más encantadores del espectáculo está el robot del título de la película de Pixar de 2008, “Wall-e”). Si bien el papel se asocia más estrechamente a Channing (quien estelarizó la original y dos reposiciones en Broadway) y a Barbra Streisand (quien fue la protagónica en la película), también han interpretado al personaje cualquier cantidad de cantantes estridentes: Phyllis Diller, Betty Grable, Mary Martin, Ethel Merman y Ginger Rogers, entre ellas.
El botón del “guau”
La nueva puesta en escena también hará que regrese el compositor del espectáculo a Broadway por vigésima ocasión. “Me guste o no en mi lápida dirá: compuso la música y la letra de ‘Hello, Dolly!’”, señaló Jerry Herman, quien escribió la música y la letra de “Hello, Dolly!”, así como las de “Mame” y “La cage aux folles”.
“La mañana después de que salieron las críticas en 1964 recibí la llamada de David Merrick, quien me dijo ‘sea lo que sea que estás haciendo, ponte los pantalones y ven a St. James porque vas a ver esto una o dos veces en toda tu vida’”, recordó, en otra entrevista por teléfono. “Así lo hice y vi una fila que daba la vuelta a la Octava Avenida, y el propio Merrick les servía café a las personas que querían comprar boletos. Era una vista por la que valía la pena vestirse”.
Herman, de 84 años, dijo que aguardó durante años ver una nueva puesta en escena del espectáculo, pero que se había estado esperando a la actriz adecuada. “Hubo tantas sugerencias de mujeres muy talentosas, pero ninguna presionó ese botón que me hizo decir ‘guau’. Entonces, cuando vi a Bette en la televisión, en una parte de su espectáculo en Las Vegas, sucedió todo -contó-. Dije ‘ella es la dama que puede hacerlo’. Ha llegado el momento.”
Eso fue hace varios años. Herman comió con Midler, quien estaba encantada, pero no podía meter a “Dolly!” en su agenda. Entonces llegó Rudin, un productor veterano de Hollywood, así como de Broadway, quien selló el trato.
“Me mantiene delgada”
Midler, quien cumplirá 71 años cuando se estrene la nueva puesta en escena, dijo que el papel “es un gran reto” y notó que hace muchos años que no se presenta en ningún espectáculo que tenga un elenco de otros actores. Pero también dijo: “va a ser divertido y, más que nada, a mí me gusta divertirme. No me cuezo al primer hervor, pero soy curiosa y me encanta hacer todas las cosas que se requiere que haga este personaje -agregó-. Me mantiene delgada, lo que me gusta, y me mantiene comprometida”.
Herman dijo que la edad de Midler podría haber sido un problema para otra actriz, pero que “ella tiene la juventud integrada y creo que va a pasar por esto sin esfuerzo”. Midler es también más joven de lo que era Channing en su última reposición (tenía 74 años y estaba interpretando un papel al que dio origen cuando tenía 43).
“Bette es una original, y Dolly necesita ser una original -comentó Herman- La producción va a estar hermosa, será emocionante y va a estar llena de color. Todo lo que se merece una dama”.
Claro que ha visto la película y, en lo general, estaba familiarizada con la historia, pero cuando el productor Scott Rudin empezó a llamarla hace unos meses para pedirle que considerara protagonizar una nueva puesta en escena del musical en Broadway, se dio cuenta de que necesitaba averiguar más.
Fue a la biblioteca pública de las artes escénicas de Nueva York para ver una película de Carol Channing en una versión de 1995 y recurrió a YouTube para ver clips de Pearl Bailey en la reposición de 1975. Vio “The matchmaker”, una cinta de 1958, estelarizada por Shirley Booth, una adaptación de la obra de teatro de Thornton Wilder, en la que está inspirado el musical.
Y eso no fue todo. Leyó las notas de la producción que hizo Gower Champion, quien dirigió el montaje original en 1964. Escuchó álbumes del elenco. Y finalmente leyó el guión, que la convenció de que el personaje del título, una viuda de principios del siglo XX llamada Dolly Gallagher Levi, tenía más necesidades y estaba más desesperada de lo que Midler se había dado cuenta.
Dijo que sí.
Enormemente popular
“Tiene una gran cantidad de peso y la partitura es irresistible”, explicó Midler en una entrevista por teléfono, horas después de que se anunciara su contrato para estelarizar un nuevo montaje de “Hello, Dolly!”. “Es algo muy estadounidense, con una cualidad alegre, un tipo de cualidad de que sí se puede y una dulzura increíble, y en estos tiempos terribles, cuando todo el mundo parece estar en llamas, parece algo que a la gente le encantaría ver”.
La Dolly de Midler llegará a Broadway en 2017, 50 años después de que la actriz se presentara por primera vez ahí como Tzeitel en la producción original de “Fiddler on the roof”. En los años intermedios se ha convertido en una artista enormemente popular, mejor conocida por sus papeles cinematográficos y sus conciertos. En los 70 se presentó en Broadway en una serie de espectáculos en concierto; retornó en 2013 con la obra de una sola mujer (“que me satisfizo al infinito”) titulada “I’ll eat you last: a chat with Sue Mengers”.
En el mismo período, “Dolly” se ha transformado en uno de los musicales estadounidenses mejor conocidos, que más se ha montado, parodiado y fetichizado (entre los entusiastas más encantadores del espectáculo está el robot del título de la película de Pixar de 2008, “Wall-e”). Si bien el papel se asocia más estrechamente a Channing (quien estelarizó la original y dos reposiciones en Broadway) y a Barbra Streisand (quien fue la protagónica en la película), también han interpretado al personaje cualquier cantidad de cantantes estridentes: Phyllis Diller, Betty Grable, Mary Martin, Ethel Merman y Ginger Rogers, entre ellas.
El botón del “guau”
La nueva puesta en escena también hará que regrese el compositor del espectáculo a Broadway por vigésima ocasión. “Me guste o no en mi lápida dirá: compuso la música y la letra de ‘Hello, Dolly!’”, señaló Jerry Herman, quien escribió la música y la letra de “Hello, Dolly!”, así como las de “Mame” y “La cage aux folles”.
“La mañana después de que salieron las críticas en 1964 recibí la llamada de David Merrick, quien me dijo ‘sea lo que sea que estás haciendo, ponte los pantalones y ven a St. James porque vas a ver esto una o dos veces en toda tu vida’”, recordó, en otra entrevista por teléfono. “Así lo hice y vi una fila que daba la vuelta a la Octava Avenida, y el propio Merrick les servía café a las personas que querían comprar boletos. Era una vista por la que valía la pena vestirse”.
Herman, de 84 años, dijo que aguardó durante años ver una nueva puesta en escena del espectáculo, pero que se había estado esperando a la actriz adecuada. “Hubo tantas sugerencias de mujeres muy talentosas, pero ninguna presionó ese botón que me hizo decir ‘guau’. Entonces, cuando vi a Bette en la televisión, en una parte de su espectáculo en Las Vegas, sucedió todo -contó-. Dije ‘ella es la dama que puede hacerlo’. Ha llegado el momento.”
Eso fue hace varios años. Herman comió con Midler, quien estaba encantada, pero no podía meter a “Dolly!” en su agenda. Entonces llegó Rudin, un productor veterano de Hollywood, así como de Broadway, quien selló el trato.
“Me mantiene delgada”
Midler, quien cumplirá 71 años cuando se estrene la nueva puesta en escena, dijo que el papel “es un gran reto” y notó que hace muchos años que no se presenta en ningún espectáculo que tenga un elenco de otros actores. Pero también dijo: “va a ser divertido y, más que nada, a mí me gusta divertirme. No me cuezo al primer hervor, pero soy curiosa y me encanta hacer todas las cosas que se requiere que haga este personaje -agregó-. Me mantiene delgada, lo que me gusta, y me mantiene comprometida”.
Herman dijo que la edad de Midler podría haber sido un problema para otra actriz, pero que “ella tiene la juventud integrada y creo que va a pasar por esto sin esfuerzo”. Midler es también más joven de lo que era Channing en su última reposición (tenía 74 años y estaba interpretando un papel al que dio origen cuando tenía 43).
“Bette es una original, y Dolly necesita ser una original -comentó Herman- La producción va a estar hermosa, será emocionante y va a estar llena de color. Todo lo que se merece una dama”.
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